Strawberry Milk. ❤Jikook❤

🍓7🍓

Jungkook había estado triste las últimas semanas, cuando él pensó que por fin había echo amigos que lo apreciaban y lo trataban lindo todo se derrumbó y resultó que solo era una molestia para ellos. Al parecer era una molestia para todos, y nunca conseguiría tener amigos, como las personas normales.

Jin lo había notado decaído y le había echo innumerables interrogatorios para tratar de sacarle que era aquello que lo tenía tan triste, pero no había conseguido nada. Jungkook estaba seguro de que si le decía a Jin que los chicos con los que había estado tratando de entablar una amistad recientemente lo habían tratado muy mal y le habían pedido que se alejara de ellos y no los molestara fue lo que provocó su malestar, Jin los buscaría y los golpearía como pudiera, a todos.

Oh, ya se lo imaginaba, Jin entrando en él local de batidos y montando un escándalo tratando de repartir golpes a todos ellos, uno por uno. Jin parecía inofensivo pero si se le sacaba de sus casillas se podía convertir en un peligro real.

Otra cosa que descubrió fue que Taehyung, él chico con él cabello lindo, como él mismo lo había apodado, iba a su mismo instituto, no solo eso, sino que compartían clases. Jungkook no llevaba mucho tiempo en ese instituto ya que se trasladó hace poco por los malos tratos que recibía de sus compañeros pero se preguntó como fue que no lo había notado antes.

Pero aún así, trató de mantenerse alejado de él, lo máximo que podía, como le habían pedido. Tampoco quería saber si los demás iban a ese mismo instituto, trataría de evitar a cualquiera, y para ello mantendría su vista en él suelo, que parecía interesante.

—¡Jungkook!.—el grito de su madre del piso de abajo lo sobresaltó y logró sacarlo de sus pensamientos.

Con rapidez bajó de su cama y se apresuró a abrir la puerta y bajar las escaleras encontrándose con su madre en la sala.

—¿Si, mamá?.—preguntó con la respiración agitada.

—Ya que andas de vago como siempre y no haces nada útil.—comenzó atacando—.Irás a comprar algunas cosas que necesito.

—Está bien.—dijo sin chistar, agarrando él dinero que le ofrecía su madre y un pequeño papel en el que suponía estaba lo que ella necesitaba.

Su madre se giró sin decir nada más, y Jungkook fue a la entrada a colocarse sus vans antes de salir. Ya llevaba puestos unos jeans ajustados y una sudadera rosa que le había robado a Jin, la cual le quedaba enorme, pero con la que se veía tierno, por lo que no pensó en cambiarse. Antes de salir pasó sus manos por su castaño y revoltoso cabello para tratar de ordenarlo.

El camino hacia la tienda que su madre había apuntado en el papel no quedaba muy lejos, y era una tienda de maquillaje, al parecer a su madre se le había acabado su preciado y maravilloso maquillaje, y él tendría que hacerse cargo de renovarlo.

No fue difícil para él encontrar las cosas en la tienda, él conocía un poco  acerca del tema del maquillaje ya que en algunas ocasiones él mismo lo había usado, nada exagerado, solo algo suave y ligero, como podía ser algo de polvo y base, delineador, labial y algunas cosas más que habían ayudado a mejorar su imagen. Para verse más lindo de lo que ya era, le había dicho Jin.

Cuando tuvo todo en una pequeña bolsa salió contento de la tienda balanceando esta en su mano, él papel lo había guardado, estaba seguro de que su madre le pediría él papel para revisar que había comprado todo y no se le había olvidado nada. Esperaba que su madre le agradeciera o al menos le dijera un "bien hecho".

Para volver a su casa decidió pasar por él parque que frecuentaba con Jin y al que había dejado de ir por estar demasiado triste y desanimado, solo pasaría por ahí, no tardaría, tampoco quería que su madre lo regañara por tardarse mucho.