🍓10🍓Jimin🍓

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Sentado sobre el taburete y con un segundo batido de leche de fresa entre sus manos, Jungkook esperaba la llegada de Jin al local para que lo llevara a casa. Jin le había dicho que estaba algo lejos y que tardaría bastante en llegar, pero él esperaría.

Tras la salida de Yoongi del local, Taehyung lo siguió apresuradamente, ese chico parecía estar siempre detrás del gruñón, como Jungkook lo había apodado, pero solo en su cabeza, si lo decía en voz alta estaba seguro de que él chico golpearía su cabeza contra alguna pared.

—¿Que dijo tu lindo hermano?.

Jungkook miró a Namjoon, quien le había echo la pregunta y se encogió de hombros—.Él dijo que está un poco lejos, que tardará en llegar.

—No pasa nada, puedes esperarle aquí hasta que llegue.—Jimin ofreció.

Jungkook asintió—.Gracias.

Un silencio se instaló entre ellos de forma automática, nadie sabía que más decir, solo observaban como él chiquillo de castaño cabello sorbía su batido. En las pocas veces que habían visto al castaño éste no había parado de soltar palabras por su boca sin resorte, un montón de frases sin sentido que dejaba salir sin filtro.

Pero ahora el ver al chico tan callado y sin siquiera mirar en otra dirección que no fuera el batido en sus manos les indicaba que éste se sentía cohibido e incómodo.

Sabían que habían hecho mal al tratar a un niño de aquella forma pero en ese momento solo se dejaron llevar por el enojo y la rabia, ni siquiera pensaron a la hora de hablar y soltar aquellas palabras hirientes, haciendo sentir herido al chiquillo.

—Jungkook.—Jimin lo llamó, haciendo que este lo mirara.

—¿Si?.

—Acompáñame un momento.—se levantó colocándose a su lado.

—¿A dónde?.—Jungkook bajó del taburete pero desconfiado, mirando a los demás quienes también parecían confundidos.

—Te enseñaré algo.—instó, tendiéndole la mano.

Jungkook miró a los demás una última vez, dándose cuenta de que ellos estaban tan confundidos como él, parecían perdidos por las acciones de Jimin, y es que no entendían que pretendía. Antes de que pudiera hacer algo más Jimin le agarró de la mano y lo arrastró con él, llevándolo a la parte trasera del local, donde parecía haber un pequeño despacho.

Al abrir la puerta Jungkook fue recibido por una pequeña habitación que, en efecto, era un despacho, pero este era bonito. Las paredes eran azul clarito con decoraciones blancas, haciéndolo ver animado y llamativo. Un amplio sofá estaba colocado en una esquina, y en él centro una mesa con una silla giratoria.

—Siéntate.—pidió Jimin.

Jungkook caminó hacia él sillón pero en vez de sentarse en este, se dejó caer en la afelpada alfombra gris que decoraba el suelo. Jimin negó con la cabeza pero imitó al castaño y se sentó a su lado.

Jungkook cruzó sus piernas al estilo indio y miró a Jimin, esperando que este dijera algo, o bien, que hiciera algo.

—¿Me vas a pegar?.—Jungkook susurró.

—No.—Jimin contestó alarmado—.No, por supuesto que no.

—¿Y por que me trajiste aquí?.

—Quiero hablar contigo.—las palabras sonaron pesadas—.Solo eso.

—Uhum.—Jungkook asintió confundido.

—Sentimos la manera en que te tratamos la otra vez, no queríamos hacerte sentir mal, ni insultarte, solo estábamos pasando por un mal momento en que los recuerdos nos atormentaron a todos.—habló sin mirar al castaño—.Y lo que nos lleva a los tormentosos recuerdos es ese dichoso batido que tanto amas.

Strawberry Milk.  ❤Jikook❤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora