Strawberry Milk. ❤Jikook❤

🍓9🍓

—¿Ahora puedo llamar a Jin Hyung para irme?.—Jungkook dijo con prisa.

—¿No quieres otro batido?.—Jimin ofreció.

Jungkook negó enseguida—.Solo quiero irme, con Jin Hyung.

Namjoon fue quien soltó un suspiro y se encogió de hombros—.Llámalo entonces, puedes esperarlo aquí.

Jungkook rápidamente sacó el móvil de su bolsillo, y se dispuso a encenderlo para desbloquearlo y así llamar a Jin, pero cuando el móvil no dio indicios de querer encenderse Jungkook se dio cuenta de que este estaba apagado. Había salido de su casa con la batería justa, ya que no pensó en cargarlo antes de salir, su madre probablemente le hubiera gritado si la hubiera dicho que primero cargaría su móvil y después iría a hacerle el recado.

—Está apagado.—hizo un puchero para después morder su labio—.No tiene batería.

—Podemos dejarte nosotros un....

—Te dejaríamos un móvil.—Namjoon interrumpió a Hoseok—.Pero los móviles solo se dejan a los amigos, así que...—Namjoon sonrió—.¿Eres nuestro amigo?.

Jungkook negó lentamente.

Bien, eso no había salido como Namjoon había querido, pretendía que Jungkook dijera que si, y así que él chico volviera a ser con ellos como lo era antes de que lo trataran mal. Después de ver como los tres idiotas habían tratado de golpearlo y que él chiquillo les contara su mala experiencia sentía un gran remordimiento.

—Si no eres nuestro amigo no podemos dejarte un móvil para que llames a tu Hyung.—Jimin siguió él juego de Namjoon.

—Pero.....yo necesito llamar.—se encogió de hombros él castaño—.Y si no le llamo él no sabrá donde estoy... y no podrá venir.

—Yo te dejo el mío.—Taehyung chilló.

Taehyung no había entendido nada, eso había quedado claro.

—No.—Namjoon se lo impidió rápidamente—.Jungkook debe ser nuestro amigo para que se lo podamos dejar.

—¿Eres mi amigo, Jungkook?.—el peliverde esperó por una respuesta.

—Pero....—Jungkook volvió a encogerse de hombres, haciéndose más pequeño—.Vosotros dijistéis que no queríais ser mis amigos...y que yo era una molestia.—su labio inferior salió en un puchero.

Intercambiando miradas, buscaron una respuesta que dar, Jungkook podía ser todo un charlatán despistado, pero se acordaba bien de las cosas. Y no parecía haber olvidado las duras palabras que le dijeron.

—Nosotros estábamos molestos.

—Pero si yo no hice nada.—Jungkook chilló ante la respuesta de Hoseok.

—No por ti.—trató de corregir.

—Es que a ti te gusta él batido de leche de fresa, Jungkook.—Taehyung dijo, simple—.Y a nosotros no nos gusta, bueno, a mi me da igual, nunca lo he probado, Yoongi no me deja, si lo pruebo él me deja de hablar, pero como yo quiero mucho a Yoongi y no quiero que me deje de hablar no lo bebo, así que no lo bebo.

Eso no había llegado a ningún lado, ni siquiera tenía sentido él montón de palabras que Taehyung había soltado sin filtro, él se desvió del tema tan rápido como empezó.

—Pero a mi me gusta mi batido.

Al parecer Jungkook tampoco había entendido a Taehyung y había decidido soltar lo primero que se le pasó por la cabeza.

—Tae.—Namjoom llamó de forma relajada—.Tu mejor mantente callado hasta que terminemos esto, y entonces podrás hablar todo lo que quieras.

Taehyung asintió con una sonrisa efusivamente.