Misión: Salvando a Suho (SuLay)

Babe

Solo dime qué es lo que quieres;

y te lo daré todo. (Lay u down-Lay)

Día lunes; Yixing faltó a clases, su mellizo recurrió a la enfermería en varias ocasiones y Junmyeon estaba con un humor terrible; lo único que pudo distraerlo fue las prácticas de Lacrosse, el fin de semana tenían un partido importante y dentro de su mente solo vagaba la imagen del pelinegro.

<Creo que me comporté como un idiota> 

El día anterior cuando dejó a Lay en aquél estacionamiento se sintió culpable sí, pero el orgullo no lo dejó volver. Para descargar su ira llamó una de las porristas que siempre estaba detrás suyo, necesitaba liberarse y que mejor que una buena follada.

En una de las habitaciones de la mansión, Yixing estaba recostado sobre su cama mirando el techo; había llorado mucho por lo acontecido. ¿Qué pensaría su padre Yifan si lo viera en ese estado? A la altura en donde estaba no llegaría nunca a estar a la par de los deseos relevantes de BlackPearl. El joven se cuestionó varias veces sobre aquello que fallaba en él pero no encontró nada que pudiera servir, ¿tendría que abandonar todos sus sentimientos para ser un alma fría como lo era su familia? 

La puerta de la habitación se abrió, su mellizo se acercaba a él y se veía terrible; ojeras y más pálido de lo que ya era gritó el nombre de su hermano.

—¡Yixing! tu novio está en la puerta esperándote. ¿Qué traes con el idiota de Kim? —preguntó Luhan tratando de no desvanecerse. 

<¿Novio? ¿Kim? ¿Puerta? oh no Junmyeon">

—No es mi novio, y Lulu ¿por qué estas tan decaído? —dijo Lay cuando reaccionó. Sin embargo el otro chico no le respondió.

A la última persona que quería ver en este momento estaba esperándolo en la puerta de su casa. El chico bajó las escaleras y allí estaba; apoyado en el umbral de la puerta. Luhan no le permitió entrar.

—¿Qué quieres? —Fue lo único que salió de la boca de Yixing, guardándose el discurso grosero.

—Lay yo quiero disculparme, se que soy medio idiota aveces —se rascó la nuca—. Y ayer me pasé de la raya, no suelo tener esos percances y jamás volverá a pasar. Vine porque me he preocupado y adem... —Kim no pudo recitar por completo lo que había ensayado mientras caminaba desde el colegio hasta la mansión Zhang. 

El dueño del lugar lo tomó con fuerza de su camiseta y lo entró a la casa cerrando la puerta con violencia. Junmyeon se sorprendió.

—Mejor hablemos en mi habitación, aquí pueden escucharnos... —dijo Yixing. 

La razón del por qué el chico entró a Junmyeon, fue el simple hecho de notar que el coche de sus padres se avecinaba sobre el gran portón. Lo mejor para todos era evitar que éstos se enteraran acerca de la existencia del castaño y con comprensión si los padres de éste llevan algo entre las manos con los suyos. 

—Oye Lay tu casa es muy bonita y todo, pero ¿por qué tu habitación? ¿Quieres volver a repetir lo de ayer a la noche? excepto la parte cuando huiste, o mejor dicho te ech... —Lay levantó una ceja —. Era broma, era broma Zhang —habló Junmyeon riendo nerviosamente.

—Sabes no escuché ni la mitad de lo que dijiste en la puerta, lo siento. ¿Puedes repetirlo?

—Mmm sí. Bueno... yo he venido en son de paz. Perdóname Lay nunca volveré a comportarme así. —Con pena movió sus manos demostrando nerviosismo.