Capítulo 11.

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Vic’s pov

Estaba empapando el coche de Luke tanto con mis lágrimas como con mi ropa mojada de la lluvia. Pero me daba igual. En ese momento absolutamente todo me daba igual.

Apoyé mi cabeza en el cristal y solté un largo suspiro mientras las lágrimas seguían cayendo sin ninguna intención de parar.

Flashes de esa noche venían como fogonazos a mi mente, hundiéndome uno a uno un poco más en la miseria.

Como había llegado al bar y había esperado durante quince minutos la llegada de Evan. Como le había llamado preocupada y él me había dicho que estaba subiéndose a su avión.

Y sobre todo fogonazos de cuando Kat me dijo que volver con él una segunda vez no era buena idea. Debería haberle hecho caso.

Llegamos a mi casa y, haciéndome vivir un dejavú, Luke me sacó del coche al estilo nupcial y me hizo sentarme en el sofá.

-A ver, Victoria, ya está no llores.-dijo acariciándome la mejilla, tratando de tranquilizarme.

-No valgo nada.-murmuré.

-Shh, no digas eso, no es verdad. Sabes que vales oro, cielo.-dijo abrazándome.

Le devolví el abrazo, obligándolo a sentarse en el sofá conmigo. Se sentó a mi lado y volví a esconder mi cara en su pecho. Él comenzó a acariciar mi espalda hasta que por fin conseguí calmarme.

Cuando volví a abrir los ojos, aún pegada a su pecho, observé que llevaba una camiseta blanca, ahora mojada con la que podía entrever todos y cada uno de los centímetros de su piel. Iba a decirle algo, pero en el último momento decidí callarme. Observar no hacía daño a nadie.

-Deberías darte un baño. Te sentirás mejor.-dijo Luke.

-No tengo fuerzas para hacerlo.-dije encogiéndome de hombros.

-¿Me estás pidiendo indirectamente que me bañe contigo? Porque no me importaría.

-Eres un pervertido, Hemmings.

-Eres tú la que quiere bañarse conmigo.

-Pero ¿tú me estás diciendo esto en serio?-dije sorprendida.

-Totalmente, ponte un bikini.

Sin saber exactamente por qué, le hice caso. Subí a mi habitación y me puse un sencillo bikini negro que usaba cuando iba a las competiciones de natación mientras Luke se encargaba de llenar la bañera. Me hice una coleta alta y entré al baño donde me encontré a Luke, en bóxers, agachado intentando averiguar cómo poner el modo jacuzzi.

Me acerqué a él pero me detuve a un par de pasos. ¿Esos bóxers eran de las Tortugas Ninja? ¿En serio? Reprimí una risita y me metí en la bañera cogiéndolo de la mano, haciéndolo entrar conmigo.

Luke se sentó abriendo un poco las piernas y colocándome entre ellas, yo me apoyé en su torso. Empecé a jugar con la espuma de la bañera intentando hacer burbujas. Poco después, Luke se me unió y acabamos haciendo una pequeña competición a ver quién conseguía hacer la burbuja más grande. Ganó Luke.

Indignada, me separé de él y me alejé hasta la otra punta de la bañera. A medio metro de él. Luke se rió y siguió intentando hacer burbujas

-Esto es con diferencia, la cosa más rara que he hecho después de una ruptura.-solté de repente.

-¿Hacer un concurso de burbujas?-dijo Luke concentrado.

-No, bañarme con otro tío.-dije volviendo a acercarme y entrelazando mi mano con la suya, sentándome a horcajadas sobre él.

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