Things I'd Do For You [SAGA THINGS #1]

Capítulo 44

Un fin de semana de ver a Luca a todas horas después, vuelvo a entrar por las puertas de Valedebebas cargada con el bolso, un café y el portátil.

-Vaya, mírala ella, que diva -me saluda Isco riendo al verme pelear con las gafas de sol.

-Cállate y ven a ayudarme antes de que me manche o estrelle el ordenador.

Al fin mis brazos descansan y le sigo hasta mi despacho, donde se sienta en mi silla y se cruza de brazos expectante.

-Tengo una pregunta.

-Pregunta -le digo deshaciéndome de la chaqueta vaquera.

-¿Qué tienes con Luca? 

Joder, rápido y directo.

-¿Por qué mi vida privada es vox populi?

-Estás en el Madrid, guapa. Venga, responde -insiste el malagueño posando sus codos sobre la mesa.

-Mira dile a Marco que si tiene algo a preguntar que venga él mismo, tan chulito y valiente que es...

-Marco no me ha enviado pero sí, le diré tu respuesta, aunque sea para joderlo un poco. Además, de valiente tiene lo que tú de rubia.

Ja, ja. Que chiste más bueno se acaba de marcar el malagueño. Ha ganado el primer premio a capullo.

Le lanzo una mirada envenenada y me siento en el sofá bebiendo un largo trago de café para no desesperarme y tirarle algo a la cabeza. ¿Pero cómo pueden llegar a ser tan marujas en este equipo?

-Isco, si salgo o no salgo con Luca no sé en qué afecta al equipo o a cualquier otra cosa extra que no sea a nuestra vida -pronuncio lentamente las palabras.

-Ya hablas en primera del plural, si que vais en serio. Vamos, ¿que estáis saliendo? Marcelo me debe veinte euros.

-¿Pero de qué vais? ¿Habéis apostado por lo que había entre Luca y yo? Estáis muy mal. Iros a la mierda.

Frunzo el ceño y salgo por la puerta dejando con la boca abierta de par en par al malagueño que sale inmediatamente corriendo detrás de mi.

-Lo siento Emma. Perdona. ¡Venga coño, espera que no sé como puedes ir más rápido en tacones que plana! -se queja y yo freno en seco riendo a carcajadas.

-Isco, no somos nada. Solo... salimos eso es todo. Quedamos y vamos por ahí y ya está.

-¿Lo sabe Asensio? -encara una deja y baja la vista a sus zapatos.

-No pienso monopolizar todo a su existencia. Marco y yo lo dejamos en julio. ¡Por Dios han pasado dos meses! Como si él no se viera con otras...

Su compañero abre la boca para defenderle pero en menos de un segundo la vuelve a cerrar y se aclara la garganta, por lo que me tomo su gesto como una afirmación. Marco está saliendo con alguien.

Por raro que parezca pensar en ello ya no me produce tanto resquemor como me habría parecido de no haber ido como fueron las cosas. Supongo que después de Marina peté y ahora todo me está bien. Si quiere rehacer su vida me va bien. Si quieren apostar por cuanto van a durar me está bien. 

Parezco ser la única que ha madurado y entiende que Marco y yo ya no estamos juntos.

-Hombre, aquí estás. ¿Cuando has llegado? -Zizou Jr. me saluda posando un leve beso en mis labios el qual provoca que mis mejillas se tiñan de un rubor carmesí. 

-Acabo de llegar... -sonrío avergonzada-. ¿Dónde ibas?

-Al gimnasio, a entrenar un rato. Por cierto, Isco tío tu también -lo une a la conversación para que no siga ahí plantado como un pasmarote-. Os habéis enterado de la fiesta, ¿verdad?