Good Manners ♠ KOOKV

✳O N C E✳

Taehyung había olvidado lo mal que la pasaba en mar abierto.

—¿Quieres que entre?– Jungkook llamaba a la puerta del baño.

—N-no...– Taehyung respondió con voz temblorosa, conteniendo una arcada —no quiero que me veas así–.

Jungkook se recargó contra la puerta de madera, no pensaba moverse de ahí.

Apenas llevaban un par de horas que habían zarpado, el atardecer se desdibujaba a lo lejos perdiéndose en en lo que aparentaba ser el filo del océano. Pronto anochecería y la familia de Taehyung ya había hecho de las suyas poniéndolos en recamaras separadas. Según ellos no había más y cada habitación contaba sólo con una cama individual. Jungkook habría estado perfecto con eso si tan sólo se tragara la mentira de que un barco tan grande como ese no tuviera más habitaciones. Además la alcoba de la arpía pelirroja quedaba demasiado convenientemente cerca a la de Taehyung.

Chanyeol entró a la habitación sin llamar a la puerta con una enorme rebanada de sandía en las manos.

—Esos hijos de puta son insoportables– refunfuñó sin dejar de comer —¿puedes creer que me llamaron gordo?–.

—Intenta no meterte en problemas– pidió Jungkook.

—No prometo nada– el otro desvió la mirada hasta el baño—¿Tae está bien?–.

—Eso creo–.

Casi al instante la puerta del baño se abrió y un pálido Taehyung apareció bañado en una delgada capa de sudor. Contuvo una mueca de asco al divisar la sandía en manos de Chanyeol y se tumbó en la cama.

—¿Quieres que llamé al médico a bordo?–.

—Estaré bien, usualmente se me pasa en unas pocas horas– el rubio se mordió el labio inferior —lamento esto–.

—Bebé, si no dejas de disculparte en verdad terminare enojándome– sonrió Jungkook.

Un par de toques en la puerta se escucharon y la hermana de Taehyung se asomó haciendo cara de asco.

—Papá dice que se preparen para la cena en el salón– dijo ella y lanzo una mirada a Taehyung —cómo siempre queriendo llamar la atención ¿verdad, hermano?–.

Taehyung no se sentía siquiera con ánimos de responder a eso.

—Creo que te llaman en la estación “vete a la mierda”– interrumpió la voz de Jimin, quien venía entrando.

Hye lo fulminó y se apartó.

—Se reproducen como cucharachas– dijo ella con horror.

Jimin se preparaba para el contraataque pero antes de hacerlo, Hye salió del lugar azotando la puerta y provocandole una migraña más intensa a Taehyung.

—No tienen que ir a la cena– habló muy bajo.

—¡¿Estás loco?! Nos darán comida gratis– apuntó Chanyeol.

—Nosotros estaremos bien, creo que podremos manejar a tu familia solos pero tú debes dormir ¿de acuerdo?– Jimin se sentó a lado de él en la cama.

Taehyung asintió cerrando los ojos y cayendo poco a poco víctima del sueño, el estres y el cansancio. Los tres presentes intercambiaron miradas, en verdad esperaban poder arreglárselas solos. No es que se sintieran intimidados frente a ese grupo de estúpidos sino que sería difícil no terminar golpeando a alguien sin Taehyung que los detuviera.

***

—¿No tenías una camisa más ridícula?– Jungkook observaba la camisa hawaiana de Chanyeol con una sonrisa burlona en sus labios. —Todos vienen con trajes ¿quién mierda usa traje costoso en un crucero?– aunque Jungkook no podía decir con certeza qué era lo que se debía y no debía usar a bordo de un barco ya que jamás había estado en uno antes de ese día.