My Personal Photographer

Capítulo 21: Chuches.

ALEX 'S POV

No se acuerda de nada, y prefiero no decirle lo que pasó en realidad. Creo que sería algo incómodo para los dos. Mejor olvidarlo. A ver si viene Ally con las aspirinas. Voy a darme una ducha mientras llega. Entro al baño, me quito toda la ropa y entro en la ducha. El agua cae sobre mi cuerpo hasta llegar a mis pies, justo en ese momento suena el timbre. Salgo de la ducha rápidamente, envuelvo mi cintura con una toalla y abro. Ally se me queda mirando y se sonroja.

- Me has cogido duchándome. - Digo mientras paso mi mano sobre mi nuca.

- Ya.ya veo. - Abro un poco más la puerta para dejarla pasar. - T.te he traído las aspirinas.

- Gracias, puedes sentarte si quieres, yo voy a cambiarme. ¿Vale?

- Si, si yo te espero.

Que mona es cuando se sonroja. Vuelvo al baño, me pongo la ropa que tenía preparada y me seco un poco el pelo. Ya está. Cojo el móvil de encima de la mesita de noche y las llaves de casa. Entro al salón, pero Ally está espaldas a mí. Está viendo las fotos que hay en la vitrina, son fotos de Angy y mías y alguna con nuestras familias.

- Ya estoy.

- Ah vale. ¿Puedo hacerte una pregunta?

- Claro.

- ¿Quién es el niño pequeño que hay entre vosotros dos, en esta foto?

- Es mi hermano pequeño, Marc. Ahora tiene 16 años ya. Hace mucho que no le veo.

- ¿No hablas con él?

- Si, hablamos por teléfono cada semana. Pero desde que me vine a Madrid en Septiembre no le he vuelto a ver.

- Ah. - Se creó un silencio entre los dos. La verdad es que le echaba de menos y bastante.

- ¿Damos una vuelta?

- Si claro.

Bajamos bajo y le cogí de la mano. Sé que le cogí de imprevisto pero no la soltó. Íbamos andando hasta una de las entradas del parque Europa. Como se nota que las universidad, institutos y colegios han acabado. Está lleno de adolescente y de abuelas vigilando a sus nietos. Llevamos andando un buen rato y decidimos sentarnos en un trozo de césped, en el cual no hay nadie. Me siento al pie de un árbol y ella se sienta entre mis piernas apoyando su espalda contra mi pecho. La rodeo con mis brazos y le doy pequeños besos sobre el cuello.

- ¿Crees que mi hermano y Angy habrán hablado?

- ¿Cuando se lo contaste como reaccionó?

- Bueno, llegué a casa y ya había estado bebiendo y fumando. Se olía por toda la casa, me lo encontré sentado bajo la ventana mirando el cielo. En ese momento le dije que se fuera a dormir. Se puso un poco tozudo, pero al final accedió. Me dormí a los pocos minutos pero, a las 4 de la madrugada me ha despertado. Me ha preguntado que si había hablado con ella. Le dije que si, y que tenía que contarle algo.

- ¿No se lo contaste?

- Si, si que se lo conté... pero no todo.

- ¿Cómo que no todo?

- Le dije lo que le pasó y que fuiste tú quien la salvó de esos y que por eso os hicisteis ese tatuaje.

- ¿Por qué no le contaste la verdad?

- Porque sé, que si le digo que la dejaste sola, desconfiaría de ti y intentaría separarnos, y no quiero Alex. - Dijo abrazándome.

- Shh.. Tranquila. Nadie nos va a separar ¿Vale? - Dije, mientras dejaba un beso sobre su cabeza.