4| Simon

223 9 3
                                    

Al despertarme bajo hasta la cocina en la que me encuentro a Regina, vestida con un vestido de flores y su largo cabello rubio recogido en una coleta.

Esta mirando el movil, aun no se ha decantado de mi presencia.

—¿Y tu tan temprano aquí?—pregunto viendo a ver si hay algo de comer.

—Me desperté por el ruido que hicieron los mellizos, estamos solas, tuvieron que ir a la ciudad así que ya van hacer la compra allí asi que ni lo intentes porque no hay nada—dice girándose para verme.

—¿Y no tienes hambre?—frunzo el ceño.

—Estaba esperando que despertaras para ir a desayunar algo al pueblo—bosteza.

—Vale, me cambio y vamos—digo frotándome los ojos.

Subo a mi habitación y cambio mi pijama por una blusa blanca y unos pantalones cortos.

Regina y yo salimos en dirección al pueblo mientras ella me habla que necesita encontrar pareja.

—Regina, tienes 19 años vive la vida—río.

—Por eso mismo, tengo 19 años, se supone que a esta edad ya tendría que haber conocido a mi alma gemela ¿no?. Por lo menos eso dicen los post de cuentas de parejas de instagram—hace un puchero.

—¿Porque sigues a cuentas de parejas?—achino mis ojos con curiosidad.

—Porque soy masoquista—rueda los ojos apunto de perder la paciencia.

—Alguien habrá en este pueblo que quiera salir contigo, solo mírate eres Heather*—la señalo de arriba abajo.

Ella sonríe y decide cambiar de tema.

—¿Y tú que?—me da un codazo—Te escuche hablar con alguien.

¿Como?

—Hablaba con Dante por teléfono.

—¿Y se puede saber quien coño es Dante?—dice mientras entramos a un bar.

—¿Mi vecino?

—Ah el que está por ti, ya me acuerdo de él ¿Que tal está? ¿No seguirá igual de bajito no?

—Si, sigue siendo bajito y esta bastante bien ahora está estudiando fuera de la ciudad y ¿Cuántas veces tengo que repetirte que no esta por mi?

—Lo que tú digas—se sienta—¿Que vas a pedir?—dice cogiendo la carta.

—Supongo que unas tostadas—imito su acción.

—Yo pediré un café con hielo y tres sobres de azúcar.

Se nos acerca una chica con el cabello negro y corto, ojos oscuros y un piercing en el lado izquierdo de la nariz.

—¿Que van a pedir?—dice con la libreta en la mano.

—Yo un café con un vaso de hielo aparte y tres sobres de azúcar por favor.

Cuenta ConmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora