Maldito corazón | Esconcer | Editando | | 𓍢ִ໋ 🃏 ͙֒ ♪

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—Y...¿Como está Leo?

—Empeoró.

—¿Estará bien?

—Si, él es fuerte.

Escorpio me llevó a mi casa y Capricornio me recibió, mandó las ventanas a arreglar, así que están como nuevas. Me alivia mucho.
Ahora mismo yo estoy en su cuarto acostada en su cama mientras él en su escritorio.

—¿Estas bien?

Suspiro, —No lo se, yo...siento que tengo tantas cosas encima, tantas cosas en la cabeza...

—¿Como que cosas? —preguntó levantándose de su asiento para acostarse a mi lado, ambos mirando al techo.

—No creas que me he olvidado de el asunto de tu madre, —escuché un gruñido de su parte, —mis hermanos, en especial Sophia, —en eso, escucho patitas por las escaleras, miró a la puerta y veo a mi hermoso hijo acercarse, —Noche, —lo menciono mientras se monta en la cama con nosotros y yo le acarició el lomo mientras se acuesta en medio de ambos, —Mariel, Libra, la universidad, Miranda, mis citas perdidas al psicólogo, —imágenes de la espalda de Escorpio vuelan en mi mente, luego el que su padre quiere hablar conmigo a solas, la balacera de hoy, —estoy atrapada...

—Necesitas un descanso.

—Necesitamos.

Mi teléfono suena, alarmando a Noche, le acarició la cabeza y se vuelve a relajar, Capricornio se levanta y me lo pasa, —Gracias. ¿Hola?

—¿Cancer?

—¡Hola Sol! ¿Cómo estás?

—Bien, gracias por preguntar, —su delicada voz otorga una paz increíble, que dicha tiene Brayan, —¿Y tú?

—Ahí, deseando escapar unos días. —escuchó la risa de Capricornio a mi lado.

—¿Que te parece pasar un fin de semana en una casa de playa?

En eso mi teléfono vibra.

—Aguarda un momento Escorpio me está llamando.

—¡No! ¡No le contestes! Me retó a ver quien te llamaba primero para invitarte. —dijo entre risas.

Sonreí, —Dame un segundo, —puse a Sol en espera para contestarle a Escorpio, —Hola.

—Hola preciosa, ¿Como estas?

—Estas interrumpiendo mi llamada con Sol.

—¡¿Ah?! —se escuchó como gritó para otro lado, —¡¿Como la llamaste tan rápido?!

—Perdiste, bye, te quiero. —colgué y regresé con Sol, —listo.

La risa de Sol aumentó mientras al fondo se escuchaba las maldiciones de Escorpio y Brayan, las de su hermano van específicamente para Escorpio, —¡Gracias, ahora Escorpio tiene que bailar para nosotras con Brayan! —ya entiendo porque. Parece que está en casa de ellos.

—Eso me encantará verlo. —dije divertida, —y...cuando seria esa "escapada"?

—Mmm...no lo se, lo estamos discutiendo ahora, si quieres puedes venir.

Sonreí y me senté en la cama, —¿En serio? —miré a Capricornio, él me miró y me sonrió torcidamente. No puedo dejarlo solo como siempre, —bueno yo...no puedo, estoy pasando tiempo con mi hermano, será otro día Sol.

—De acuerdo, te mantengo al tanto Cancer, adiós.

—Adiós.

Dejé el celular en la esquina de la cama y me volví a acostar, —¿Por qué no te fuiste?