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Taehyung
—¿Lo ves? Te dije que no sería tan malo hablarle.— Jennie  y yo estamos sentados en una banca, disfrutando de nuestra hora libre (que gracias a Dios es la última) y nuestro almuerzo.
—Sí, por lo que hemos hablado parece buena persona. Me gustaría conocerlo un poco más, no estaría nada mal hacer nuevos amigos.—Justo en ese momento Yoongi pasó junto con sus amigos y... Wo, está saludándome. Le devolví el gesto saludando con la mano.
—Sí, creo que deberían salir alguna vez.—Jennie me miró sonriendo levemente, pero desvío su mirada hacia arriba de mi cabeza, esta vez con una sonrisa más amplia.

Alguien se acercó detrás mío y me tocó el hombro.

—¡Hola Tae, Hola Jennie!— Es Lisa, hace tiempo que no la veo, y había estado pensando en cómo se encontraba, pero decidí no buscarla debido a lo ocurrido. Verla me hizo sentir una especie de alivio, porque realmente estaba preocupado por ella. Se ve muy sonriente. Casi por instinto Sonreí y me levanté para abrazarla.
—¡Hola Lisa!—Nos apartamos y ella se dirigió a saludar a su amiga, que parecía igual de contenta. Ambas se sentaron y se vieron a los ojos.
—Dime, ¿Qué pasó con él?— ¿Saben? Es gracioso que de repente se pongan a hablar  entre ellas y yo quede como mal tercio, solo intentando mirar hacia otro lado fingiendo que no escucho. Siempre que ellas hablan en mi presencia hago ese gesto de forma algo tierna para que se den cuenta de que estoy ahí, y siempre las hace reír. Esta vez no fue la excepción.
—Está bien, Tae, esto también te interesa, puedes oír. —Lisa me dijo esto riéndose un poco pero con una mirada de melancolía.
—Ah, está bien, gracias. Pero ¿seguro que no quieren que las deje solas?—Quería quedarme, me encanta escuchar sus historias, pero les pregunté esto por respeto.
—En serio, quédate.—Lisa se volteó para poder dirigirse a ambos (Jennie y yo) mientras hablara.— Es sobre, Jungkok.—Bajó la mirada un poco. Rayos. Jennie le pasó un brazo por los hombros y la acercó un poco más a ella.
—Bien, hace dos días hablamos. Yo no había querido hablar con él, sé que no fue del todo su culpa, pero realmente estaba molesta.
—¿A qué te refieres con que no todo fue su culpa?—Jennie dijo esto muy extrañada, porque sabe que fue completamente su culpa, o eso me dijo la vez pasada que hablamos.
—Sí, olvidé decirles esto. Él sufre de problemas de la ira, hace un tiempo lo desarrolló, y a veces pasa por crisis como la de esa noche, de hecho durante un tiempo estuvo medicandose para ayudarse un poco. Lo que pasa es que desde hace tiempo dejó de tomar ese medicamento pensando que estaba bien, pero los problemas volvieron. No hizo caso cuando discutimos una vez y siguió descuidándose. Llegó a su límite hace 15 días, en la fiesta. Y yo también.
—Oh por Dios, realmente no sabíamos eso.—El tono en el que lo dijo y su mirada nos representó a ambos. No puedo creer que Jeon esté enfermo, eso me hace sentir de cierta manera culpable.
—Sí. Es por eso que me molesté tanto, porque él no me escuchó. Y bueno, por fin hace dos días tomé el valor de hablar con él. Le dije que no estaba dispuesta a seguir tolerando eso, y menos porque sea su capricho el no querer cuidarse. Terminé con él, me dolió demasiado, pero sé que es lo correcto.—Unas pequeñas lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, no pude tolerar verla así, Jennie y yo nos acercamos  a ella y la abrazamos.
—Vamos, bebé, todo estará bien.—Jennie le dijo esto de la manera más dulce posible.
—No puedo con la culpa de haberlo dejado solo cuando está pasando por todo esto.—Lisa comenzó a llorar más fuerte.
—Lisa, está así por decisión propia. No es tu culpa. Debes ver primero por ti—Le dije esto porque cero que es lo más sabio que puedo decir. No tengo idea de qué hacer. Lisa se acaba de voltear para abrazar a Jennie. Creo que ahora es momento de irme.
—Chicas, iré por algo a la tienda, ¿Sí?
—Tae, antes de que vayas, debo decirte que le di tu número a Jungkook, probablemente  te mande mensaje más tarde.—Ya vi de dónde sacó eso Jennie.
—Bueno, gracias Lisa.
—Gracias a ti.—Sonrió un poco mientras se limpiaba las lágrimas, pero no pudo contenerse mucho. Regresó a los brazos de Jennie.

Después de cinco minutos he llegado a la tienda, como siempre hay demasiada gente. Intentando meterme me topé con alguien conocido.

—Oh, Yoongi, Hola.—Babosos, me están empujando. Oooh, pisé a Yoongi.—Lo siento, lo siento.— Se rió levemente pero en su tono lograba escuchar el dolor.
—Hola Taehyung. ¿Cómo estás?—La gente sigue empujandonos y es muy incómodo.
—¿Qué te parece si vamos afuera de... Esto?
—Me parece bien.
—Ahg, vamos.

—Ahora sí. Estoy bien, gracias. ¿Y tú?
—Igual, bueno, hambriento. Pero parece que no podré comer ahora.—Yoongi señaló a todos los demás estudiantes.
—Oh, ¿Tienes esta clase?
—No, ya no.
—Hay una Pizzería aquí cerca. ¿No quieres ir?
—Es obvio que quiero ir, tengo hambre. Sólo espera, ¿Sí? Le diré a mis amigos.—Comenzó a buscar entre todos pero parece que no los encuentra.
—Oh, chicos, iré con Tae por pizza, ¿Vienen?—De la multitud salieron tres chicos.
—Lo siento. Ellos son Jimin, Namjoon Y Hoseok. Chicos, él es Kim Taehyung.
—Hola—Los saludé sonriéndoles y ellos me devolvieron el gesto, menos Jimin, que me saludó de manera un poco seria.
—¡Sí, vamos!— Uno de ellos, creo que Namjoon, lo dijo muy entusiasmado pero Otro no estuvo de acuerdo.
—Tonto, no. Nos quedamos. Pero gracias.—Al parecer es Hoseok, acaba de golpearlo en el hombro. Nos sonrió.
—Bueno, vamos. Adiós chicos.
—¡Bye!—Hoseok saltó y dio la vuelta, Namjoon seguía sobando su hombro y Jimin no dijo nada más.

—Me agradan—Le dije a Yoongi mientras le sonreía.
—Más te vale que lo hagan, o nuestra amistad no podría continuar.—él me miró y se rió a la vez.—Tú me guías.
—Por supuesto.

NADA ES LO QUE PARECE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora