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F E E L T H E C U R R E N T W I T H I N ╌────═✞═────╌
⚠️ Spoilers del 8x09⚠️
"Pero Satanás conocía cada uno de sus defectos, y Dios cada una de sus virtudes"
Las ramas de los árboles golpeaban su rostro, dejando marcas rojas en ella pero eso no le importó, solo seguía las órdenes del chico a su lado, sus piernas y pies estaban cansados mientras su respiración se agitaba con gran medida.
Hasta que visualizó a las jóvenes brujas gritando horrorizadas, haciéndola detenerse abruptamente. Con desesperación miró hacia la academia, sintiendo ese leve dolor crecer.
— Tienes que correr — el chico la tomó del brazo, tirando de ella.
— No puedo — negó con la cabeza mientras su vista comenzaba a nublarse.
Y de un segundo a otro, su mente proyectó una imagen, la mayoría de las brujas muertas.
— Mi deber es protegerte y sacarte de aquí — volvió a tirar de ella — sana y salva — su agarre se había hecho más fuerte.
— No es lo que mi padre hubiera querido, ni mucho menos Dios.
— Lo único que harás será matarte — la regañó — y a mi me condenarán por no salvarte.
— Y lo entiendo, gracias por ello. Le puedes decir a mi padre que estaré bien y que me salvaste — la voz de Amelia temblaba a gran medida que hablaba — pero si tú no piensas ayudar, alguien tiene que hacerlo. Esta batalla no es tuya, sino mía.
— Ellas no son nada tuyo — habló intentando detenerla — nosotros sí.
Y con un simple movimiento estrelló al chico contra un árbol.
— Son mis hermanas — murmuró.
— Amelia — gritó sin siquiera poder moverse al ver a la chica desaparecer.
El cuerpo de Amelia cayó al piso sin previo aviso, la academia lucía tan silenciosa sintiendo un vacío en ella. Un pequeño grito salió de sus labios al ver a tres chicas junto a las escaleras, ¿Quién podría ser tan inhumano?, al saber la respuesta negó con la cabeza. De inmediato corrió hacia ellas, resbalandose con la sangre que caía de sus costados mientras las tomaba del rostro, intentando encontrar alguna señal de vida, no le importó si quiera ver su vestido blanco teñirse de rojo, sus manos pasaron por su rostro dejando ligeras manchas en su mejilla que se mezclaban con sus lágrimas saladas.
