La luz casi me cegó por completo. Habían varias luces encendidas a medida que Cam me hacia avanzar, poniendo sus manos en mis hombros. Estábamos en la sala de bienvenida, donde habían varios muebles de aspecto antiguos, floreros, fotografías enmarcadas y algunos espejos. El suelo era flotante, de madera, que estaba cubierto por una larga alfombra color rojo carmesí con detalles amarillos y negros. Era tan acogedor. El calor de la chimenea llegaba incluso hasta donde estábamos nosotros, lo que le daba un aire tibio y amigable dentro de las paredes. Habían algunas puertas y pasillos a medida que avanzábamos, lo que me daba una gran impresión del enorme lugar en el que estaba.
-Cam?.
Una voz femenina me saco de mi sueño despierta. Cam me guió por una puerta hasta abrirla y entrar. Las luces estaban encendidas, de un color blanco brillante, que iluminaban toda la enorme cocina. Una señora, de unos treinta y tantos años,estaba frente a una olla revolviendo lo que se veía como salsa de tomate. Su mirada se dirigió a Cam para luego caer en mi. Detuvo lo que estaba haciendo, se limpió las manos y con una sonrisa se acercó a nosotros.
-Bueno ¿Quien eres linda?- sonrió
-B-bueno.... Y-yo....
-Ella es ___ mama- dijo Cameron.
Lo mire, intentando de alguna forma agradecerle con la mirada, pero cuando desvió su mirada de su madre hasta mi, me sentí intimidada y tuve que desviar la mía.
-Es un gusto conocerte, ___. Soy Joana la mama de Cam.-sonrió de una forma amable, mientras se acercaba a mi y me tomaba las manos con suavidad.
Suavidad...... Desde qué murió mama no la había sentido.
Ella me miro, luego miro a Cameron fijamente. Me soltó las manos mientras me tocaba las mejilla y la frente. Hizo una mueca.
-Tienes fiebre. ¿Qué sucedió Cams?
-Iba de camino a mi auto después de ir a buscar una.... cosa, y me la encontré sentada bajo un árbol a media tormenta. Cuando me acerque, temblaba y estaba realmente muy fría. La lleve a mi auto para abrigarla y ella me dijo que había salido justo cuando comenzaba la tormenta, y al momento querer regresar a su casa, no lograba ver nada y ya estaba perdida en ese momento. No se más.
Joana asintió, mientras me guiaba con cariño a una silla y hacia que me sentara allí.
-Te preparare algo de té y te daré algo para la fiebre. Te puedes quedar en la habitación de invitados que esta arriba por esta noche. Tiene una propia chimenea, aún que es algo pequeña. No creo que sufras de nuevo frío cariño- sonrió- Estaba haciendo la cena, por lo que quizás te gustaría comer algo antes de llevarte a la cama.
¿Comida? ¿Dónde estaba la amenaza o el favor a cambio de ella? ¿Me la daría gratis?
-Oh, claro gracias -sonreí intentando ser amable
(...)
Luego de cenar y conocer al resto de la familia Dallas, quienes la conformaban Joana y Marcus Dallas, y sus hijos Cam y Sierra, la pequeña hermana de seis años de Cam. Era muy linda, de alguna forma me recordaba a mi cuando tenía su edad. Además, era muy risueña y preguntaba de todo, pero no me aburría de ellas. Es más, me entretenía resolviendo todas sus dudas.
-Sierra, deja a ___ en paz- dijo Cam, cuando estábamos en la sala frente a la chimenea.
Joana me había dicho que me quedara allí unos minutos para recuperar el calor corporal. Estaba funcionando, ya sentía como el frío se iba de mi cuerpo y el calor comenzaba a remplazarlo de poco en poco. Cameron me estaba acompañando, mientras el Sr. y la Sra. Dallas terminaban de limpiar todo en la cocina. Sierra estaba sobre las piernas de Cam mientras le revolvía el cabello de una forma graciosa.
-¡¿Pero, pero, pero, pero porque?!- dijo mientras fruncía su frente
-La debes estar cansando Sierra
-No, no me esta cansando- le dije a Cam. El me miro y se encogió de hombros despreocupadamente mientras suspiraba,
-No sabes lo preguntona y odiosa que es cuando conoce a gente nueva. Un poco más y les pide una biografía de ellos mismos- dijo mientras le revolvió de vuelta su claro cabello con una risa
-¡Oye! ¡No lo hagas!
-Oh ¿ no?
-¡No!- chillo riéndose .
Cam me miro antes de comenzar a hacerle cosquillas en el estómago a ___. Ella comenzó a retorcerse en sus brazos mientras reía y chillaba. Reí con ellos mientras los veía divertirse de esa me era juntos.
-¡No, Cam! ¡___, ayúdame!- dijo entre risas
Me detuve ¿Que hago? ¿Me uno e interrumpo? Me encogí en mi lugar, mientras sentía como Cam detenía las cosquillas y bajaba de sus piernas a Sierra, quien aún reía y sonreía.
-Sierra, ¿Por qué no vas a jugar con tus muñecas mm?- sugirió de repente.
-¿Vienes conmigo ___?- pregunto Sierra
-Ella va después linda.
La pequeña asintió y se fue brincando las escaleras y comenzó a subirlas hasta desaparecer de nuestra vista. Cam se giró hasta mi y me miro. Su mirada curiosa y extrañada, mientras recorría mi delgado y debí lucho cuerpo con ellos.
-¿Qué tienes?- pregunto luego de unos segundos
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Sálvame (Cameron Dallas y tu)
FanfictionNovela que no querras perderte por nada del mundo.