20| Sensible

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17 años

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17 años

Victor cruzado de brazos observaba a los jugadores volar de un lado a otro.

-¡Rápido, rápido!- les grito-No pienso perder esta temporada.

Observo de un lado a otro mirando a todos volar por los aires entrenando, el no debía hacer eso, el era el capitan.

Se estiro con aburrimiento y volteo a ver a todas las otras casas que entrenaban, luego su vista se poso en una rubia y sonrió de lado.

-Estoy ocupada- hablo la chica cuando Victor se acerco a ella, sin alzar la vista del libro sonrió.

-¿Ocupada? Oh vamos Cour, ninguna chica esta ocupada para mi- sonrió de lado mirándola.

Esta bajo su libro, lo cerro y lo miro.

-Deberías estar con tu equipo- señalo a los jugadores.

-Soy el jefe de mi casa en Quiddich, tengo mis privilegios- sonrió.

Un grito se escucho en la cancha y varios jugadores corrieron haciendo un circulo, con fastidio los miro.

-Ya viene tu principe- le guiño un ojo a Fleur, esta rio y nego de un lado a otro.

Camino hacia el centro de la cancha y los miro.

-¿Que paso?- pregunto moviendo su capa de un lado a otro.

Un niño de primer grado señalo a una persona tirada en el pasto, sonrió ampliamente al ver de quien se trataba.

-Crei que había explicado bien las reglas Erick- rio Victor viendolo.

El chico levanto la vista y le mando una mirada fulminante, observo su pierna e hizo una mueca.

-¿Te duele?- pregunto Victor y se arrodillo a verlo.

-No como crees, solamente se me rompió la pierna y me hace sentir bien-contesto con sarcasmo.

Victor se enderezó y le mando una mirada de asco.

-Un minuto de silencio por la pierna de Erick- pidió, segundos después hablo- Listo, ya vete a enfermería.

-¡Eres tan sensible como una piedra!- le grito el chico desde el piso.

El pelinegro lo miro desde lo alto al chico, había firmado un contrato cuando lo pusieron como jefe de Quiddich, mejor no lo hubiera hecho.

-Sigan practicando, llevaré a Erick a enfermería.

Los otros jugadores se alejaron con sus escobas mientras murmuraban de lo que había pasado. El pelinegro comenzó a caminar hacia la entrada.

-¿Me vas a dejar aqui?- pregunto Erick .

-Levántate- contesto.

-¡Me rompí una maldita pierna, como quieres que camine!

Victor todo los ojos con fastidio, regreso hasta el y ayudo a levantarlo, juntos caminaron hacia enfermería.

-Podrías apurarte, casi no caminas- le hablo el pelinegro.

-Crei que querias que nos unieramos- recordo el peliblanco.

-Si, pero no cooperas en nada Erick.

Erick lo miro de reojo pero prefirió no contestar, al llegar el pelinegro arrojo al chico a una cama.

-¡Fluffy!- grito el pelinegro, de inmediato un pequeño elfo salio entre las camas, este se acerco y lo miro.

-Joven Riddle, que gusto volver a verlo por aqui- saludo

-Necesito que cure a Erick, lo necesito para el partido del viernes.

Este asintió. Victor camino hacia la salida cuando una voz lo detuvo.

-Victor, gracias-hablo con amargura el chico sin verlo.

Victor soltó una sonrisa, miro al chico sentado en la cama y salio del cuarto. Minutos mas tarde regreso con un pedazo de pastel y se lo tendio.

-¿Lo envenenaste?- pregunto Erick tomando el plato.

-No, hay mejores formas para matarte-sonrio el chico.

Erick dejo el plato al lado y observo a Victor que miraba por la ventana. El pequeño elfo que atendio al muchacho salio de la enfermeria haciendo una torpe reverencia a Victor que le sonrio.

-¿Haz tomado cerveza de mantequilla?- le pregunto.

Erick le sonrio.

HP| Los hijos de Voldemort Donde viven las historias. Descúbrelo ahora