A mi lado [Flores explosivas book #2]

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Las clases pasaron con la normalidad usual, exceptuando el claro hecho de que los gritos y quejas del rubio o sus peleas con el peliverde faltaban, dando incluso al silencio un tono más tranquilo

—el día es aburrido sin poder molestar a Bakugou

—cierto—agregó Mina soltando un suspiro, mientras acunaba su rostro entre sus manos, apoyándose en la mesa de la cafetería

—¿porque les gusta tanto el peligro?—cuestiono Sero en un murmullo bajo, mirando hacia la pelirosada de orbes celestes, quien alzo los hombros mientras negaba y suspiraba

—¿y si molestamos a Ao en su lugar?—cuestiono Kaminari, la chica se sobresalto al escuchar su nombre y se giro hacia el

—¡¿y porque a mi?!—le cuestiono

—cierto, mejor esperemos a volver a los dormitorios y molestemos a Bakugou—agrego Kirishima—no es varonil molestar a las chicas

—tampoco el grito que dieron antes cuando Bakugou abrió la puerta—murmuro Mina por lo bajo entre risitas, causando la risa de su igualmente pelirosada amiga, la cual estallo en carcajadas, los tres restrantes se sonrojaron, Kirishima se levanto

—¡¡le contaste?!, ¡¡molestemos a Ao!!—vocifero señalándola

—¡no! ¡lo siento!

—¡no lo sientes, sigues riendo!

—l-lo siento—replico aun riendo por lo bajo

—Fukishima—le llamo una voz desde atrás, haciendo girar al resto, quienes paraon de reir

—¿uh? ¿Shinsou?—murmuro ella mientras se levantaba

—¿no se llevaban mal?—cuestiono Kirishima

—larga historia, los vere en clases—respondio la chica alejándose hacia el, dejando a los 4 restantes solos—¿que ocurre?—cuestiono llegando a el

—Aizawa-sensei nos llama, me pidió buscarte—respondio comenzando a caminar fuera de la cafeteria

—ya veo—murmuro la chica siguiéndole por los pasillos.

el silencio entre ellos, como siempre era incomodo, pero dados sus choques pasados el silencio era lo mas conveniente, llegaron a la sala de maestros, donde solo estaba All Might y Aizawa, pidieron permiso y pasaron, plantándose frente al mayor.

—aquí esta—murmuro en respuesta Shinsou, en aquel tono serio usual en el.

—¿e-es por el entrenamiento de hoy? l-lo lamento, con todo el ajetreo anoche...—murmuro la chica nerviosa, jugando con la punta de sus dedos.

—si es por el entrenamiento—respondió el mayor, interrumpiéndole—pero no es por que no hayas ido hoy—agrego, calmándola—con lo que paso anoche tenemos que reforzar la seguridad en la escuela, aun mas...—murmuro mas bajo al final

—¿entonces...no nos entrenara mas?—cuestiono la chica, el azabache negó lentamente

—por lo menos no en un tiempo, en lo que arreglamos las cosas.

—ya veo...—murmuro la chica

el timbre sonó, indicando que el receso había llegado a su fin y las clases comenzarían, Aizawa soltó otro suspiro y se levanto, Shinsou solo hizo una reverencia mientras se marchaba por su lado, dejando de lado al par restante, quienes caminaban nuevamente en silencio hacia su aula indicada.

—...Aizawa sensei..—murmuro la chica llamando la atención del mayor, quien se giro a verla pero no respondio—...se que en realidad ahí no decía nada que no se supiera pero...estoy algo preocupada...dudo que den un paso sin tener algún fundamento—continuo la chica, mirándole preocupada, el mayor solo se quedo mirando al frente pensativo, parando su andar y haciendo parar el de la menor también

—...—se quedo en silencio un par de segundos antes e volver a suspirar—...si, estas en lo cierto, haces bien en pensar asi, nunca se debe subestimar a un enemigo—respondio girándose a verla, con mas seriedad de la usual en el—sabiendo eso espero que entiendas que no puedes salir de la escuela sola, eso incluye las residencias, ahí no hay nadie que sepa...tu situación, por ahora debes centrarte en las prácticas para la licencia

—si, entiendo...pero sobre ello, ¿ir ahí estará bien?

—lo estará, yo mismo iré a supervisarlos, no tienes que preocuparte por ello

—de acuerdo, muchas gracias Aizawa sensei—agradeció la chica con una reverencia

—andando...—ordeno mientras volvia a avanzar la chica afirmo y corrió para alcanzarlo

llegaron al salón de clases llendo cada uno a su designado lugar, siguiendo con las clases con la normalidad con la que lo harian cualquier otro dia.

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la chica negó con una suave sonrisa al ver como los chicos cumplían su palabra cumplían su palabra y al llegar y ver al malhumorado rubio limpiar  junto con Midoriya comenzaron a molestarlo.

—no limpiaste bien Bakugou, yo veo bastante sucio aquí—afirmo Mineta acompañado por Kaminari, pasando el dedo por el suelo, recogiendo algo de polvo

—¡ese es el lugar que limpio el maldito de Deku!—exclamo el rubio en respuesta—¡oye! ¡haz bien tu trabajo!—le exclamo al susodicho, haciéndole dar un salto

—l-lo siento Kacchan—respondió de inmediato

—¿quieren que los ayude?—cuestiono la chica recargada sobre el respaldo del sillón.

—no muevas el culo de ahí idiota—respondió Bakugou señalándole

—oh~ Ao, por mi puedes mover el culo todo lo que quieras — murmuro morboso el pequeño chico de cabello grumoso, limpiando la saliva que escurria de su boca con su ante brazo, con la mirada clavada en la susodicha chica, quien hizo una mueca de desagrado junto con los demás presentes, exeptuando a Bakugou quien le miraba mal, la joven se encogio en su lugar, ocultándose tras el respaldo del sillón, dejando solo su nariz y parte superior del rostro a la vista

—para—pidió en su escondite

—vamos mineta no empieces de nuevo—pidió igualmente Kaminari con una leve mueca de desagrado, pues de todos, el era el que estaba mas acostumbrado a las obscenidades del chico

—eso~—murmuro el chico, sumido en sus obsenas imaginaciones, la chica con las mejillas ardiendo se levanto

—¡M-Mineta! ¡¡deja de imaginar cosas raras!!—vocifero avergonzada

—yo te ayudo—afirmo sero, sacando cinta desde sus codos, la chica aun avergonzada asintió

aprovechando que el grumoso seguía en su mundo, aprovecharon para enredarlo en aquella cinta, formando un pequeño capullo, dejando solo un pequeño espacio de sus ojos y nariz, el cual Bakugou tomo del extremo sobrante, arrastrándolo

—¡Deku! encárgate de la demás basura—exclamo

—m-muy bien—accedió el peliverde tomando las bolsas y saliendo con ellas, el rubio dio una leve carcajada levantándolo hasta la altura de su rostro

—yo me encargare de ti pequeña mierda molesta—le dijo mirándole amanzánate, causando que el capullo se removiera aun mas

Bakugou hizo colgar gracias al extremo de la cinta el capullo de una de las aspas del ventilador que se encontraba en el techo sobre la sala, encendiéndolo a la máxima velocidad

—y-ya basta Bakugou, déjalo...—pidió la pelirosada, mirando con pena al chico girar entre sus gritos ahogados por la cinta

—¡eso Bakugou! ¡¡venga nuestro honor!!—exclamo Mina desde el comedor, ella y el resto de chicas tomaban te y algunos postres acompañados por Kouda y Satou, quien había hecho los mismos

—¡¿vez?! deja que tenga su merecido y vámonos—agrego el rubio, tomando del brazo a la menor para llevársela por el pasillo

—¡pero Kats!—rezongo mientras se la llevaba, evitando así que su compasión le hiciera parar el ventilador o bajarlo de ahí.