A mi lado [Flores explosivas book #2]

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Esperaban pacientemente a la fémina de cabello rosado en la sala principal de los dormitorios, la menor aun sujetaba suavemente la mano del cenizo, sintiendo la agradable calidez del agarre, alzo la mirada hacia el.

—...Ao estuvo muy bien, me gusto mucho como bailo—comento hacia el—...se veía muy linda—el cenizo dirigió su mirada hacia ella y abrió la boca para hablar pero fue interrumpido por el sonido del elevador.

—¡lamento la demora!—exclamo la pelirosada dirigiéndose hacia ellos, vestida con unos pantalones blancos entubados que le llevaban un poco mas arriba del tobillo, una playera rosa de mangas largas la cual dejaba un pequeño espacio entre ella y el borde de los pantalones y tenis del mismo color, con el cabello recogido en una coleta alta.

—...siempre lo hace...—murmuro el cenizo inconscientemente de que había hablado en voz alta, la pelirosada ladeó la cabeza confundida sobre de lo que se refería, y causando que el cenizo se percatara de que había pensado en voz alta—¡¿que esperas?! ¡camina que se hace tarde!—exclamo con un leve tono carmín adornando sus mejillas y comenzando a caminar.

—jo...que humor...—murmuro la fémina haciendo un leve puchero para al instante comenzar a seguirlos.

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Pasaron el día de evento en evento por el festival, desde el concurso de belleza hasta la obra de la clase B, comieron golosinas y se divirtieron en todas las demás atracciones, haciendo de ese día el mejor en la vida de la menor, pasándolo con todos aquellos quienes la trataban con tanta amabilidad y cariño.

—muchas gracias, a todos—agradeció la peli-blanco con una bolsa llena de dulces y golosinas, sobre todo con aquellas deliciosas manzanas cubiertas de caramelo que tanto le gustaban—me divertí mucho

—no tienes nada que agradecer, ese es el punto de todo esto—respondió Midoriya

—nos alegra mucho que te hayas divertido Eri, todos nos esforzamos mucho por eso—agrego la pelirosada

—esperamos que vuelvas pronto, incluso si no es nada especial, siempre serás bienvenida—agrego Yaoyorozu con una sonrisa amable, siguiéndole mas comentarios similares de los demás, tanto de la clase A y B como de los 3 grandes de tercer año.

Gracias a todo aquel cariño la niña se fue con una enorme sonrisa y sentimiento cálido llenando el interior de su pecho, ansiando el siguiente día en el que pudiera volver a verlos, por su parte los alumnos se dispusieron a ordenar un poco el desastre, para no dejar la escuela hecha un caos, por lo que cada grupo tenía la tarea de limpiar la zona en la que habían trabajado.

Después de limpiar los chicos se dirigieron hacia los dormitorios tranquilamente, deteniéndose extrañados al ver a un grupo de alumnos del departamento de educación general parados frente a ellos, enmedio del paso.

—ammm...—murmuro Iida extrañado, deseando que no dijeran nada que pudiera comenzar una pelea con el malhumorado cenizo que estaba ahí.

—Queriamos...disculparnos...—murmuro uno de ellos, desviando la mirada del extrañado grupo de heroísmo

—estuvimos diciendo cosas sobre ustedes y...—agrego ahora una chica de cabello azabache y coletas, la cual fue reconocida por el cenizo y la pelirosada, pues era una de las que efectivamente hizo comentarios sobre su clase y su evento.

—¡esta bien!—exclamo Ashido alegre, avanzando hacia ellos y extendiendo les la mano—no se preocupen por eso, mejor hay que llevarlos bien apartir de ahora ¿de acuerdo?—cuestiono, el grupo se quedó en silencio un par de segundos pero después sonrieron asintiendo y la chica estrecho la mano de Ashido