47

4.8K 519 122
                                    

Con sus heridas completamente sanadas, la pelirosada volvió a los dormitorios, dispuesta a cambiarse para ir a entrenar un poco y matar el tiempo, por lo que entro, pero se detuvo al instante al ver al cenizo sentado en una silla, siendo retenido por Ashido de un brazo, Kirishima del otro, Kaminari rodeándolo del cuello con ambos brazos apegandolo a la silla y Sero asegurándolo con cinta, mientras que el resto de sus compañeros miraban la escena mientras discutían en voz alta, haciendo que eso junto a las maldiciones del cenizo hicieran que fuera imposible descifrar la razón de todo eso. 

—¡ahí esta Ao!—exclamo Kaminari, señalándola, haciendo que las miradas de todos se enfocaran en ella rápidamente, en una escena que le recordó por completo a una muy similar que había pasado hace ya tiempo atrás.

—¿q-que pasa?—cuestiono nerviosa la menor temerosa mientras retrocedía suavemente

—¡ni se te ocurra empezar a darle explicaciones a esta bola de idiotas!—exclamo el cenizo, desde su lugar, forcejeando con sus amigos.

—¡¡shhhhh!!—exclamo el rubio eléctrico cubriendo la boca del contrario, acallando las maldiciones del mismo, quien molesto lo mordió, haciendo que soltara un gran y muy agudo grito.

—¡Fukishima, entiendo la relación que ustedes tienen, pero la escuela no es lugar para ese tipo de cosas!—regaño Iida acercándose rápidamente, moviendo sus manos en aquellos robóticos movimientos típicos de el, confundida, la menor ladeó la cabeza y frunció el ceño mostrando su confusión.

—pero, ¿de que están hablando?—cuestiono nuevamente, desviando la mirada al resto de sus compañeros, los cuales comenzaron a rodearla ahora a ella.

—Ammm...Ao...—llamo Momo tendiéndole un celular, el cual miro extrañada antes de estallar en flores con las mejillas al rojo vivo, pues en la pantalla se encontró una foto de la misma escena que Mell había visto al entrar a su habitación, solo que al revés

—¡¿Pero de donde sacaron esto?!—cuestiono abochornada, alzando nuevamente la mirada hacia sus compañeros

—Parece que Mineta estaba esperando la oportunidad de entrar a espiar a tu habitación desde el techo...el la tomo...—explico Stella

—¡Lo siento!—exclamo Ashido abalanzándose hacia ella, abrazándola por el cuello—¡no pude evitar que este calenturiento te corrompiera!

—¡¡N-No es lo que piensan!!—exclamo separándose de la contraria, alzando las manos, mientras que las flores no paraban de brotar de ella.

—¿entonces que es lo que pasa ahí?—cuestiono Hagakure 

—pues...

...

Tranquila, con los audífonos puestos la menor terminaba de acomodar y decorar sus apuntes, pasándolos en limpio en la libreta de estudios, en la cual ponía lo mas importante para estudiar, cuando el desprendimiento de sus audífonos de manera repentina llamo su atención, haciéndole girarse al causante de dicha acción. 

—ah, Katsuki—señalo con una dulce sonrisa, girándose hacia el, parando la música desde su celular—lo siento, ¿Que querías?—cuestiono

—dejaste esto en mi habitación ayer—explico alzando la pequeña pulsera metálica rota que ayudaba a mantener su hidratación en combate.

—gracias—respondió al instante la menor alzando sus manos, sobre las cuales dejo su pulsera

—¿no ibas a ir a que la arreglaran?—cuestiono mientras retrocedía y se dejaba caer al borde de la cama.

—parece que Hatsume está ocupada, me dijo que en cuanto pudiera me avisaria—explico echando un vistazo a su teléfono, encontrando que no tenía ningún mensaje sin revisar.

A mi lado [Flores explosivas book #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora