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Como cualquier día usual los jóvenes alumnos de la clase 1-A se dirigían a los dormitorios nuevamente después de su jornada estudiantil, emocionados por comenzar las planeaciones de los grupos para su evento en el festival, charlaban los unos con los otros sin prestar atención a las miradas de algunos de los otros alumnos de otras clases y departamentos

—¿escuchaste cual será el evento de esa clase?—murmuro una chica del departamento de educación general, mirando con desprecio hacia los de heroísmo—que clase tan engreída, ellos son los que comienzan el problema...—murmuro, llamando la atención del cenizo, el cual se giro a mirarlos con igual desprecio, haciendo un choque de miradas sumamente tenso, el cual explotaría (literalmente) con la mas mínima chispa

Fue un suave tacto en la mano del cenizo aquello que rompió la tensión, haciendo que el susodicho se girara, encontrándose con la pelirosada, la cual con su usual sonrisa negó suavemente, para avanzar, dejándose llevar el cenizo simplemente suspiro, siguiéndole el paso a la contraria.

... 

Aun con el entusiasmo corriendo por las venas del grupo comenzó a planear y dividirse el trabajo siendo el tema de los instrumentos la prioridad y con ello el de la batería, uno de los instrumentos mas tardados de aprender

—podría enseñarle a alguien a tocarla pero para ser sincera un mes es muy poco tiempo—murmuro Jiro pensativa, en aquel momento la mirada de la pelirosada se dirigió al cenizo, quien igualmente la miro diciendo: "no te atrevas" con la mirada

—¡ah, cierto, tu fuiste forzado a ir a clases de música!—exclamo Kaminari señalando a Bakugou, causando la leve risa de la pelirosada y que todos se giraran hacia el sorprendidos.

—¿porque no intentas tocar la batería?—sugirió Sero, entregándole las baquetas de Jiro

—porque no me interesa nada de esta mierda...—murmuro en respuesta mientras se marchaba

—no será que es demasiado para ti?—cuestiono Sero burlón, dando en el punto débil del cenizo, su orgullo

El cenizo demostró que no le llamaban genio en la escuela secundaria solo por gusto tocado la batería con explosiva fluidez a pesar del tiempo que llevaba sin hacerlo, emocionando a toda su clase.

—ni se emocionen idiotas, no dije que lo haría—agrego mientras volvía a emprender su camino hacia su habitación

—Bakugou, entiendo que no te guste todo esto pero necesitamos de tu ayuda—agrego Jiro avanzando tras el, el contrario se detuvo pero no se giro

—no entiendo porque se preocupan por los sentimientos de todos esos idiotas, como si se lo merecieran, y parece que ustedes idiotas no pueden ver las cosas claras, se supone que la elite no debería de perder el tiempo con estas estupideces—murmuro molesto, girando parcialmente el rostro para ver a sus compañeros, los cuales se limitaron a quedarse en silencio—mejor olvídense de eso...—murmuro y comenzó a caminar nuevamente

—¡por favor!—exclamo Jiro, haciendo que el contrario volviera a detener su andar—no puedo obligarte a hacerlo, y tampoco voy a pedirle a Ao lo haga, hazlo como un favor para mi...—pidió colocando la mano en su pecho

—... pierdes tu tiempo—murmuro, desilusionado a la azabache, la cual se quedo en silencio, justo como el resto de sus compañeros tras ella—... solo que te quede una cosa clara...—agrego, haciendo que la pelirosada sonriera y se tranquilizara—¡va a ser gracias a mi sonido que exploten!—vocifero, emocionando de nueva cuenta a los demás, los cuales no dudaron en demostrarlo saltando de la emoción.

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Ya con los puestos decididos la pelirosada decidió ir a entrenar un poco, pues mañana mismo comenzarían a practicar sus coreografías, por lo que, entre eso, las clases, los entrenamientos extras y las tareas de la escuela lo mas probable es que no tendría mucho tiempo libre para hacerlo.

Limpio con el dorso de su mano el sudor que comenzaba a escurrir por su frente, se agacho y recargo sus manos en sus rodillas inclinándose levemente hacia delante, su respiración agitada y visión levemente distorsionada le dejaron en claro que nuevamente se había excedido, soltó un suspiro, tenía que recomponerse o volverían a regañarla.

Por otro lado, la pelirroja dejo de lado los apuntes frente a ella en su escritorio, de cualquier modo realmente no les estaba prestando mucha atención, pues su cabeza estaba mas ocupada con otros asuntos, ya bastante estresada decidió salir a tomar algo de aire para despejar su mente, camino fuera de los dormitorios planteándose el ir a entrenar un rato, cuando su mirada se cruzo con la causante del desastre en su cabeza, la cual se encontraba sumida en sus propios pensamientos, caminando en dirección contraria a la que ella se dirigía haciendo que fueran a cruzarse dentro de poco

—Mell, hola, ¿vas a entrenar?—cuestiono la pelirosada, bajando la botella de suero de la que bebía

—ah...no—respondió desviando la mirada, extrañando a la contraria—solo salí a tomar algo de aire—explico, la pelirosada con expresión algo preocupada ladeó levemente la cabeza, se había dado cuenta de la mirada de la pelirroja hacia ella, pero cuando cruzaban miradas ella la desviaba al instante y se marchaba

—amm, Mell, ¿hice algo...que te molestara?—cuestiono, la pelirroja no devolvió la mirada, pensó en negar, pero estaba harta de todo ese estrés que simplemente crecía y crecía, como una bola de nieve bajando por una colina nevada, por lo que soltó un suspiro y clavo su mirada justo en la de la contraria.

—no exactamente algo que me molestara personalmente—respondió, se cruzo de brazos y volvió a suspirar—aun así, las preparaciones para el festival están por comenzar y realmente es un mal momento para tratar eso ahora, encarguémonos de eso después ¿de acuerdo?—cuestiono, la pelirosada asintió sin estar muy convencida—nos vemos después entonces—agrego agitando la mano por arriba de su hombro mientras se marchaba, sin poder hacer mas la pelirosada decidió avanzar nuevamente y seguir con lo suyo, pues aunque la curiosidad le mataba, no podía hacer nada.

...

Parecería que aquel extremadamente corto intercambio de palabras no cambiaria mucho, pero no era para nada así, pues poner un "plazo libre" a todo ese asunto ayudo a que por lo menos por esos días alejara todo ese asunto de su mente, logrando así llevar a cabo los entrenamientos sin momentos incómodos entre ambas féminas.

Gracias a ello los ensayos de sus coreografías eran un sueño, a pesar de que Mineta estaba con ellas, pues con la mas mínima interacción indebida hacia cualquiera la quitarían su "escena harem" que le habían prometido para que bailara con ellas, por lo que todo era paz y amor, cantaban en coro mientras armaban sus coreografías y todos se divertían y gracias a que Jiro escucho el canto por accidente mientras pasaba por ahí, decidió que se escuchaban muy bien, y deberían de cantar igualmente como un coro, junto con ella, quien seria la voz principal, añadiendo así también las clases de entonación para evitar cualquier, perfeccionando su actuación aun mas.



A mi lado [Flores explosivas book #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora