-Lo han encontrado.
-¿A quién? ¿Al asesino?
-Era José Velasco.
-¿Cómo? ¿El rubio favorito de la profesara Isabel?
-Exacto, ese mismo...
-Y...¿lo han detenido?
-Está muerto...
***
La sombra había sido derrotada. Todas las vidas inocentes habían sido vengadas. María no sabía qué hacer, la euforia no la dejaba pensar, soy pensaba en una cosa: la sombra está muerta.
-¡María!- Andrés vino corriendo y la abrazó- ¿Que ha pasado?
-¡La sombra ya no existe, Andrés! Hemos ganado a la muerte, lo hemos conseguido.
-Pero...
-¿Y Pedro? ¿Y Lucas? ¿Y Natalia?
-Están todos más o menos bien, pero...Pedro murió, intentó asesinar a Juan, Silvia, Lucas y Natalia.
-¿¡Qué!?
-Y sus primos, los que intentaron asesinarte, también están muertos. Dicen que fue Dani, pero...
-Sí, ya lo sé, Dani está muerto- y mirando de reojo a Jorge con complicidad- Es una larga historia.
Juan y Silvia subieron también a la azotea, segudos por Hunt que llevaba a su hijo en brazos.
-¡Andy!- gritó la profesora Isabel, y corrió hacia su bebé. Besó a Hunt y cogió a su hijo, mientras lo miraba con ternura.
En ese momento, subió Laura, la joven y torpe asistenta de Isabel:
-¡Isabel! He llamado a una ambulancia, hay cinco personas muertas pero, no se como, no hay heridos...
- Ellos nunca han existido, por eso las cosas que ellos han provocado se reparan, desaparecen- explicó Isabel.
-Pero, y los muertos...
-Es imposible volver a la vida una vez que la has perdido, Laura, por eso no vuelven.
-Entonces- interrumpió Jorge- ¿Sebastián habrá recuperado la vista?
-Es posible, quien sabe...-dijo Isabel.
-Un momento, ¿Y Carol?- dijo María, asustada.
Todos miraron a los lados, pero no había ningún rastro de la chica.
-La buscaré- dijo Laura.
-No hace falta- Carol llevaba una carpeta en una mano- Siento haber tardado tanto.
María notó que Carol se traía algo entre manos, pero no era capaz de preguntar nada. Se atrevió a susurrar:
-¿Qué pasa?
Carol ni siquiera oyó la preguntó, y se acercó a Juan. Puso su mano sobre la pistola y le quitó la pistola lentamente:
-Este día, el asesino morirá por esta pistola...Pero antes tenemos bastantes cosas que explicar.
-Pero faltan Lucas, Natalia, Eva...-susurró Andrés.
-Ellos son inocentes, el asesino está entre nosotros- miradas acusadoras entre unos y otros- y la segunda persona también. Ya sé que el chico que quería la ONG de los padres de su amigo y la chica que tenía una madre loca eran buenos móviles, pero todo es distinto...