Probablemente la más conocida de las 10 historias que integran este post (pero que no podría, de ninguna manera, quedarse fuera de nuestra selección) es la que trata de contarnos la posible existencia de Kuchisake-Onna. Nadie sabe, con certeza, cómo se habría originado la leyenda de la Mujer de la Boca Cortada (o del Rostro Cortado), pero una de las versiones más recontadas por los asiáticos es la de que una bella mujer habría sido mutilada de oreja a oreja por el propio marido después de una sospechosa de traición (por parte de ella).
Características – Muchos informes convergen a una descripción de la criatura lleva una capa roja, hay otros relatos en los que se describe usando ropa blanca.
– Joven, con aproximadamente 20 o 25 años.
– Mientras usa máscara, es aparentemente bonita.
– Extremadamente rápida recorriendo la distancia de 100 metros en 6 segundos. En otros relatos, calculan que sería capaz de recorrer esa distancia en 3 segundos y aún, un caso en que habría superado una moto de la policía a alta velocidad.
– Generalmente usa una hoz de mano, pero hay relatos en los que usa una navaja, una tijera, una poda de jardinería o incluso un hacha.
Vagando por las calles de Japón durante altas horas de la noche, dicen que, además de usar una máscara quirúrgica capaz de cubrir gran parte de su rostro, la mujer misteriosa siempre lleva consigo un temible par de tijeras. "Preguntando a sus víctimas si" la encuentran bonita, tanto la respuesta afirmativa como la negativa no serán capaces de salvar la piel de la pobre alma que cruzase el camino de la Kuchisake-Onna (y no piense que huir es una opción, pues ella reaparecerá frente a cualquier intento, siempre a la espera de una respuesta).
Eso porque, si le dices "no", seguramente serás muerto a tijerasos, pero si opta por el "sí", la "dulce" mujer quitará la máscara de la cara y te sorprenderá con una nada simpática sonrisa desgarrada. Volviendo a cuestionarlas con un "y ahora?", Si la víctima se contradice y responde "no", sin dudas acabará muerto de la misma forma anterior; pero si intenta complacer a la doncella macabra con un "sí", ganará el desagradable regalo de ver la horrible sonrisa personalizada a la Kuchisake-Onna.
