Por casualidad, la noche 29 de febrero, tanto el famoso cantante, Shawn Mendes, como la joven Astrid Jenns, estaban tomando en un gran casino de Las Vegas; esa noche logra hacer que dos desconocidos terminen casándose en la capilla más famosa del mu...
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Al ver esa publicación E! news me enojó, me sentía celosa y traicionada. Miré a Ree y le mostré la publicación.
- Tal vez fue algo del trabajo - trató de tranquilizarme.
- Claro, ella no es cantante, ella es modelo, y por el momento Shawn no tiene planeado sacar un vídeo musical, también he notado que le da like a las publicaciones de Shawn y ha empezado a comentarle.
- No saques conclusiones precipitadas, As. Espera hoy por él y le preguntas.
- No me desvelaré por él, Ree. Buenas noches - tomé mi teléfono y me fui a la habitación, no me puse mi pijama sino que me acosté directamente así. Dejé mi celular en la mesita de noche y cerré los ojos, después de unos minutos los volví a abrir y suspiré. Oí como Ree apagaba todo y se encaminaba a la habitación.
Cuando el reloj marcó las 22:30, Shawn llegó. Me hice la dormida. Lo oí entrar de forma silenciosa a la habitación y quitarse la ropa, como cada noche. Sentí cuando se acostó y me abrazó por la espalda. Fruncí el ceño y no me apegué a él. Anoche me dijo que se vería con alguien mas no me dijo el nombre, pensé que se reuniría con alguien de la industria o algún amigo al que no me quiera presentar, pero no pensé que se reuniría con una tipa que le está cayendo. Él, que es de la industria, debe saber que no puede dar esa clase de revueltas. Si quiere estar con ella y no conmigo, me lo dice y yo le ayudo a que nadie se entere. Porque al fin y al cabo no estamos casados por amor y en unos meses nos divorciaremos y hasta aquí nuestra historia. Joder, estoy malditamente celosa.
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Me levanté antes que él y me safé de su abrazo. Me bañé y me fui a la sala a ver películas. No me apetecía meterme a mis redes sociales porque sé que habrán un montón de mensajes referentes a la imagen y una que otra burla, no tenía ánimos para leer eso. Me preparé un desayuno y volví a la sala. A la mierda todo. Sólo me quedan nueve meses y medio para no volver a pasar por éste infierno. No faltó mucho para que Ree se despertara, la apremié para que se bañara y cambiara rápido. Dejé una nota a Shawn:
"Salí con Ree, nos vemos en la noche, supongo".
Salimos y empezamos por un parque de atracciones. Me sentí niña otra vez, cuando mi abuelita nos llevaba a todas las atracciones posibles. Como la extrañaba.
- Astrid, mira, el martillo, vamos - se emocionó Ree y yo negué.
- No, no, sufro de vértigo, apenas y me soporto las montañas rusas. No.
- Venimos hasta aquí, gastamos dinero aquí, ¡nos vamos a subir a todo! - recitó Ree tal y como lo hacía mi abuela.
- Sube tú, Ree, yo no lo soporto.
- Me da igual, vamos - me arrastró a la fila. Cuando podíamos subir me traté de escapar pero ella no me dejó. Me hizo sentarme al lado de ella y nos pusieron la protección. Cerré los ojos y me dejé llevar, cuando la maquina empezó a bajar rápidamente no me retuve.
- MALDITA SEAS, REE, ME VOY A MORIR AQUÍ - lloriqueé -. JODER, NO, FUCK*, DÉJENME BAJAR.
- Cálmate, As - reía mi prima a mi lado y yo sólo me quería bajar ahora mismo. Cuando por fin paró, lo primero que hice fue correr al baño a vomitar, Ree vino detrás mío y me recogió el cabello.
- No pienso volver a subirme a una cosa de esas - demandé.
- Lo siento.
- Lo que sea - me enjuagué la boca con el agua que traía. Al salir del baño, un pequeño grupo de niñas se me acercaron corriendo.
- ¿Eres la esposa de Shawn Mendes? - me preguntaron y miré a Ree en busca de ayuda, ella sólo se encogió de hombros.
- Sí - respondí y de repente sentí un montón de agua fría sobre mí.
- ¡¿Quién te crees para haberte casado con Shawn?! ¡Ni siquiera eres famosa! Ojalá Shawn se hubiera casado con Hailee Steinfeld o Hailey Baldwin... pero tú, ¡eres fea! - me gritó una chica y quise llorar. Ree las regañó y me alejó de ellas, sacandome del parque.
- ¿A dónde vamos, Astrid? ¿Vamos con Shawn? Él me ha escrito preguntado por ti, si quieres...
- No. No quiero ir con Shawn en éste momento - respondí con un hilo de voz mientras las lágrimas caían.
- Entonces, ¿a dónde vamos? ¿Dónde tus suegros? - negué.
- No sé, no quiero estar cerca de Shawn y sé que él llegará allá.
- No sé dónde ir, Astrid, entonces...
- Vamos a alguna tienda para cambiarme de ropa y de ahí vemos.
Ree asintió y fuimos al centro comercial. Ella me prestó su chaqueta para taparme, pero el vestido estaba muy mojado. Entramos a una tienda y compré un jean y una camiseta. Me cambié y me recogí el cabello en una coleta alta. Nos fuimos a la plazoleta de comida y me empecé a comer un helado. Sabía que Ree estaba nerviosa por como fuera a reaccionar.
- No voy a llorar más - avisé.
- Lo sé.
- No me mires así, entonces.
- Lo siento... ¿Te ha pasado antes?
- No. No pensé que... Sí he leído los comentarios de odio, pero no pensé que llegaran a ofenderme en persona.
- Deberías hablar con Shawn sobre ésto, Astrid.
- ¿Él que puede hacer, Ree? Nada, no puede hacer nada, sus fans hacen cosas independientes a él, y si lo quieren ver con otra persona, pues les bastará esperar unos diez meses y él se va con otra chica, me da igual. Joder, no sé por qué tomé tanto ese día en Las Vegas.