089 | Movimiento Feliz - Parte uno

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Ocho capítulos antes del final ❤️



Barak

Cassie me lleva a otro extremo y se detiene en la maleta que descansa debajo de un árbol. Me suelta la manga y se agacha, abriendo el cierre y buscando en el interior.

¿Está...?

Me llevo una mano a la boca y miro hacia atrás cuando caigo en cuenta de lo que pasa.

¿Me hará ponerme esa camiseta?

Veo de un lado a otro con pánico.

La miro otra vez con los ojos abiertos de par en par, sin retirar la mano, entonces Cassie se pone de pie con la camiseta blanca en las manos. Me sonríe.

Se acerca a mí y me la indica. Bajo la mano lentamente, el dramatismo apoderándose de mi expresión.

— Aquí tienes — anuncia, pestañeando con inocencia y sonriéndome con sus labios rojos.

Una sonrisa tensa se extiende en mi boca.

— Gracias — mascullo, cogiendo la camiseta.

Cassie se encoge de hombros y su mirada se desvía cuando alguien aparece por detrás de mí de repente.

— Oh, ha vuelto. Cámbiate pronto, ya va a comenzar — me dice y se aleja rápidamente a hablar con aquel hombre.

Haciendo un puchero, la sigo con la mirada.

¿De verdad tengo que usar esto? Mile para este entonces ya ha de haber acabado con su tatuaje. ¿Debería volver? Mis ojos vuelven a posarse en Cassie, que charla plácidamente con el mentor. ¿O debería quedarme?

La duda se arraiga en mi pecho. He pasado con mis amigos todos estos días sin descanso, en cambio a Cassie si no es por las salidas de Martín o porque soy yo quien la busca no la veo.

Ah, mierda. Quería fumarme un cigarro pero ahora tengo que aguantarme.

Al final decido quedarme y, con la camiseta hecha pelota en mis manos, doy pasos tristes hacia el árbol.

Me saco la chaqueta y luego la camiseta que estoy vistiendo rápidamente y las ubico entre mis piernas, entonces me pongo la blanca que Cassie me ha dado. Guardo mis prendas dentro de la maleta abierta habiendo terminado y con un suspiro me acerco a ella.

Cassie me mira de reojo todavía hablando con el hombre, una chispa de diversión brillando en sus ojos al instante.

¿Qué es lo divertido? Estoy usando su maldita camiseta de felicidad.

El clima es agradable y las palomas vuelan por mi lado. Familias caminan cerca de nosotros ojeando entre los suplementos sobre el césped y luego se alejan con sus hijos. El bullicio en el parque es leve pero presente.

Cuando vuelvo a mirar al frente, Cassie está caminando hacia mí.

— ¿Por qué te ves tan molesto? — se echa a reír.

Su risa hace mi estómago revolotear. Sonrío.

— No, no. Esta es mi cara de felicidad — le explico.

Me mira desconfiada pero continúa sonriendo.

— Ah — lo recuerdo —. ¿Puedo pedirte un favor?

Si voy a quedarme al menos que sea para estar a su lado y no para compartir mi preciado tiempo con estos desconocidos.

— Claro, dime — accede Cassie rápidamente.

All you had to do was stay ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora