Isabella (J.D.D #1)✔️

Capitulo 36

—Isa ya te dije hoy iremos a la doctora, sin excusas, te veo en el consultorio apenas salgas del trabajo—

—Si mamá—

—Hablando de mamás tenemos que decirles a nuestras madres—

—Lo se, yo estoy esperando, ella viene mañana aquí a Estados Unidos, todavía no sabe que termine con Christopher—

—¿Se lo dirás a Grace?—

—Yo no se—

—Se que no estás preparada para decirle a Chris pero tal vez a Grace le gustaría saberlo—

—Lo pensaré—

—Bien te dejo trabajar—

¿Debería decírselo a la familia de Christopher?

—Hola Isa—dice Chuck entrando.

—Hola Chuck—le sonrió.

—¿Salimos a tomar algo después del trabajo?, mi mejor amiga me dejó plantado—

—Y lamento decirte que tu otra amiga también te dejará plantado—dije y él frunció el ceño—Tengo cita con el doctor—

—Bueno está bien otro día será, y como vas con el tema ese que hablábamos ayer—

—Ah cierto, ya lo arreglé ahora las mujeres de esta empresa cobran lo mismo que los hombres según sus respectivos trabajos, el idiota que estaba antes que yo, les había bajado el sueldo.—

—Si es lamentable que haya tanta diferencia de sueldo según el género.—dice Chuck.

—Lo se, ¿Y qué tal arreglaste las cosas con tu madre?—

—Claro que si, yo amo a esa señora despues de todo—dice y yo rio—Pues te dejo trabajar tengo una reunión—dice yéndose.

Algo bueno de trabajar aquí es que tengo a Chuck, él realmente es agradable y su compañía es divertida y relajante. Es un gran amigo.

Decido continuar trabajando.

(...)

Mi celular comienza a sonar interrumpiéndome del trabajo.

—Isabella mueve tu trasero hasta el consultorio en este mismo momento si no quieres que te vaya a buscar y termine mal—

—Estoy trabajando—

—No mientas recién llame a la secretaria de piso y me dijo que tú hora terminó hace media hora pero tú sigue ahí—

—Bien ya salgo—

Dije y colgué.

Tenía un miedo, un único miedo. Qué el bebé no esté ahí, que sea un embarazo de alto riesgo o que pase algo malo. Mi vida siempre se baso en eso, en que cosas malas me pasen, la mala suerte me sigue, es como si todo el tiempo algo malo me pasara. Pero que puedo esperar si cuando estoy feliz algo va y hace que vuelva a cómo empecé.

Con todos esos pensamientos decidí agarrar mis cosas e ir hacia el auto. Que por cierto compre un día después de que me entere del embarazo. Le debo mucho a Chuck por acompañarme y escucharme criticar cada auto.

Creo que pensé mucho en el bebé a la hora de comprar el auto, es automático, grande y seguro.

Ahora Supongo que es hora de enfrentar la realidad.

Después de unos minutos llegue al consultorio donde Jade y Marcus me esperaban.

—¿Estas lista?—dice Jade