DEPRESIÓN | KOOKMIN.

02

Nadie se preocupó en preguntar que le había pasado, a nadie le importaba saber si era golpeado o no.

Pero lo que Jimin si sabía era que el día que el muriera, ese día todos ellos iba a celebrar. Lo sabía porque siempre le decían que debía morirse, que el no valía nada, que nadie lo quería. Y era cierto.

A las doce del mediodía el tiempo escolar terminó y Jimin fue el primero en salir de allí, pero no se fue a su casa, se fue directo al parque. Donde se sintió libre y pudo descansar su cuerpo en la hierba. Ese era el lugar especial del rubio, donde podía estar en paz por unos momentos, donde se sentía libre.

Para las personas que frecuentaban el lugar ya no les era nada extraño verlo golpeado y en el mismo lugar siempre, sólo lo miraban con lástima, lástima que Jimin odiaba.

Sacó de nuevo sus audífonos y cerró los ojos dejando pasar los dolores y descansando.

No supo cuantas horas estuvo allí, pues ya estaba anocheciendo. Era hora de volver a casa. "Mi principal infierno" pensaba Jimin.

Se paró de allí y comenzó a caminar perezoso hacia su casa, le esperaba una larga reprimenda por llegar en ese estado.

Mientras iba caminando sólo podía rezar por que su madre estuviera en casa y que no le tocara quedarse a solas con su padre, no quería que abusara de él otra vez.

Con manos temblorosas abrió la puerta de su casa, olía a alcohol y cigarros, la música estaba exageradamente fuerte y Jimin sabía la causa. Su padre se había emborrachado otra vez. Con frustración y tristeza se dirigió a su habitación y empezó a rezar por que su madre llegara pronto, o su hermana.

Se puso su pijama, se lavó los dientes y se acostó mientras esperaba.

No le tocó esperar mucho, pues su padre cinco minutos después estaba tocando la puerta de su habitación.

Con temor, Jimin abrió la puerta de su habitación y vio allí a su padre sin camisa y con un fuerte olor a alcohol y cigarros, "asqueroso" decía Jimin para sí.

Park Yeong Su, era el padre de Jimin, el hombre perfecto para cualquier mujer que no lo conociese. Pero en el fondo, era un malvado, abusador, alcohólico, sinvergüenza.

—YS: ¿Te golpearon de nuevo pedazo de mierda?, que bien —habló quitándose el resto de ropa que le quedaba, Jimin sabía lo que venía, sólo le quedaba rezar para que no fuera muy agresivo esta vez que estaba tan herido— hace unas semanas me dejaste con muchas ganas, no tendré piedad contigo hoy.

Y aquí iba de nuevo... Un Jimin llorando por los abusos sexuales y mentales de su padre.

"¿Porqué no puedo tener una vida buena y normal como los demás? ¿Qué hice mal?" Se preguntaba constantemente Jimin. El no quería seguir con esa vida, pero tampoco tenía el valor de suicidarse, se decía cobarde a si mismo por no poder hacerlo.

Luego de que su padre se fue de su habitación se encerró a llorar en el baño, se sentía sucio, roto, sin vida...

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Espero que les esté gustando la historia;(

Se que está un poco triste hasta el momento pero luego ya vendrá la luz(?.

Gracias por leer❤