– ¿A qué hora regresa tu hermana? – Pregunto
Estábamos sentados frente a frente, podía sentir como me analizaba con la mirada
– Después de las seis
– Bien, tenemos tiempo
Se puso de pie y tomo asiento a mi lado sobre el sillón, sabía que no debía haber aceptado, pero mi curiosidad pudo más, si él lograba conquistar a Valu o a cualquier otra chica nunca más podría volver a besarlo. Agus se acercó hasta que nuestras rodillas se tocaron, yo sólo mantenía la vista al frente
– Caro
– ¿Sí?
– Necesito que me mires
Tome una respiración profunda buscando valor, sabía que tenía que mirarlo. Gire mi rostro lentamente y me di cuenta de que estaba más cerca de lo que creí, Agus sonrió y toco mi mejilla, mis manos estaban heladas por los nervios
– Este es el beso para encender la llama – Se acercó lentamente hasta mi rostro
Instintivamente cerré los ojos y espere, Agus beso la comisura de mis labios suavemente, sentí como los latidos de mi corazón se aceleraban y una corriente eléctrica recorría mi cuerpo, aunque no abrí los ojos sabía que él estaba sonriendo
– Estás demasiado nerviosa – Susurro – Deberías calmarte un poco y disfrutarlo – Ojalá fuera así de sencillo – Este es un beso palpitante
Comenzó depositando pequeños besos en mis labios, el contacto era muy rápido y me ayudo a relajarme, sonreí e ignore a mi corazón decidiendo disfrutar del momento, me hacía cosquillas
– ¿Te gusto? – Pregunto devolviéndome la sonrisa
– Fue divertido – Admití
– ¿A si? – Coloco una mano bajo mi barbilla e inclino mi rostro
– Si
– Y apenas se pone interesante – Me miro desde arriba – Este es un beso inclinado
Me beso manteniendo mi rostro inclinado, el contacto de sus labios sobre los míos era suave y lento, me permití disfrutar de esto mientras durara, a fin de cuentas no estaba haciendo nada malo. Agus se separó un poco de mí y me miro a los ojos
– Este es un beso ladeado – Susurro sobre mis labios
Soltó mi barbilla y ladeo su rostro, había visto esta clase de besos en las películas románticas así que imite su acción inclinando mi rostro hacia el lado contrario, Agus sonrió sobre mis labios al ver que había aprendido rápido y continuo besándome ¿por qué no había hecho esto antes?
– Beso directo – Coloco una mano en mi nuca y me atrajo hacia él
Comenzó a chupar mis labios como si fueran una fruta dulce, coloque mis manos sobre sus hombros y me atreví a devolverle el beso, podría besarlo por horas
– Beso de contacto
Me estremecí al sentir como su lengua delineaba mi labio superior, creí que besar era sencillo, pero parecía que había miles de formas diferentes de besar. Agus continuo besándome mientras yo me aferraba a su cuello, no quería que se detuviera pero lo hizo
– ¿Recuerdas cuál fue el segundo?
– ¿El segundo qué? – Aún me sentía confundida por sus besos
– Beso – Sonrió – ¿Recuerdas cuál fue el segundo beso?
Estaba en blanco ¿cómo pretendía que lo recordara? Había perdido la cuenta de cuántos besos nos habíamos dado y la verdad es que no preste mucha atención a lo que decía sino a lo que hacía. Intente recordar los nombres de los besos bajo su atenta mirada, parecía que le divertía verme confundida, podía recordar cómo era el segundo beso pero por más que intentaba no lograba recordar su nombre
Agus seguía esperando una respuesta, así que decidí mostrárselo. Me acerque a él y comencé a darle pequeños besos en los labios, sentí cómo sonreía y eso me animo a continuar, Palpitante así era como se llamaba el beso, aunque nuestros labios a penas se rozaban con cada beso podía sentir la chispa recorrer mi cuerpo cada vez que lo hacían
– ¿Beso inclinado? – Pregunto
Nuestra diferencia de estatura a veces puede ser un problema, como en esta ocasión. Me levante un poco del sillón y me senté sobre mis rodillas, él era más alto que yo así que para poder hacerlo bien debía parecer más alta
– Creo que necesitarás ponerte de pie para hacerlo – Dijo en tono burlón
Me acerque a él y deslice mis dedos entre su cabello, él me miro atento esperando mi siguiente movimiento, usualmente soy yo la que espera para descubrir qué pasara, sonreí y tire un poco de su cabello para inclinar su rostro, me apoye sobre mis rodillas y lo bese, ahora yo era más alta que él
– Lo haces bien – Dijo sobre mis labios haciéndome sonreír – ¿Cuál es el beso de contacto?
Solté su cabello y lo mire con el ceño fruncido tratando de recordar, todos los besos eran de contacto, estaba segura de que era uno de los últimos que me había enseñado, pero no lograba recordar cuál exactamente, Agus sonrió de lado ante mi silencio
– Necesito una pista – Admití
– Fue mi favorito – No me había dicho cuál era su favorito así que no contaba – Hasta ahora
– Jamás mencionaste que... – Beso mi mejilla – No me dijiste cuál... – Descendió hasta mi clavícula haciéndome estremecer – Agus...
– Mmm... – Beso lentamente mi cuello justo bajo mi oreja
No logre terminar mi frase coherentemente ya que sus besos eran un gran distractor, él volvió a besarme, esta vez fue en la nuca, la corriente eléctrica fue mucho más fuerte ahora, me aferre a su camisa tratando de que continuara, jamás hubiese podido imaginar lo maravilloso que se sentía esto
– Ese fue un beso distractor – Susurro en mi oreja
Mordí mi labio inferior con ganas de continuar la clase, él volvió a mirarme atento, quizá aún esperaba una respuesta aunque había olvidado cuál era su pregunta. Mis manos seguían aferradas a su camisa, lentamente la solté pero no retire mis manos. Lo mire a los ojos y coloque la palma de mi mano sobre su corazón, podía sentir su ritmo desenfrenado sobre la tela, Agus coloco su mano sobre la mía
– Este es un beso sin reloj
Tomo mi mano y la coloco sobre su hombro mientras su brazo me tomaba por la cintura atrayéndome hacia él, sus labios tomaron los míos con un rápido movimiento, tarde un poco en comprender lo que sucedía, mi corazón saltaba de alegría. Enrede mis brazos en su cuello mientras él me colocaba sobre sus piernas para estar más cerca, jamás imagine que algún día estaríamos así
Agus sonrió haciéndome sonreír y en esa misma posición repasamos todos los besos que nos habíamos dado. Sabía que él quería a alguien más, pero justo en este momento no quería recordarlo, ya tendría tiempo de sobra para torturarme después
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Mil tormentas
FanfictionAgustín está confundido en medio de un amor platónico y la chica que lo hace sonreír, siente algo especial por ambas pero aún no logra descifrar qué es. ¿Será capaz de descubrirlo antes de que el amor de su vida se escape entre sus dedos? Para ella...