Epílogo

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Amor prohibido era coreado por todas las personas que habían venido a vernos esta tarde, era un momento importante para el dúo ya que estábamos de gira promocionando nuestra música, estábamos llegando a lugares que ni en sueños hubiésemos imaginado. Continúe tocando la guitarra, esa guitarra que nos acompañaba a todas partes, ya estaba algo gastada y le había cambiado las cuerdas varias veces, pero aun así me resistía a cambiarla

Estar sobre el escenario cantando nuestra primera canción era mágico, parecía que todo estaba en su lugar, estaba realizando mi sueño al lado de mi mejor amigo, tenía una novia que me quería y parecía que las cicatrices de un amor que no pudo ser al fin estaban desapareciendo

La canción termino y le agradecimos al público por acompañarnos, acabábamos de lanzar nuestro primer disco y era genial ver lo bien que lo había aceptado el público, al principio estábamos nerviosos porque queríamos expresar nuestra esencia con ese disco y teníamos miedo de que no saliera como queríamos. Afortunadamente nuestros miedos desaparecieron al ver como se vendía, les había encantado

Tome la guitarra y junto a Maxi nos despedimos del público y bajamos del escenario, mañana volveríamos a repetirlo. Agustina vino a mi encuentro y me beso, yo la abracé por la cintura y correspondí su beso, había decidido acompañarnos hoy

– ¿Podrían dejar de besarse? – Dijo Maxi con cara de asco – Odio ser el mal tercio

– Deberías conseguirte una novia – Sugerí

– Ya la tengo

– ¿Es en serio? – Pregunto Agustina sorprendida – ¿Cómo se llama?

– Es la música – Sonrió burlándose de nosotros – Estoy totalmente comprometido con ella, la amo y algún día nos casaremos

Negué en silencio con una sonrisa, Maxi puede es muy entregado, por el momento está realmente comprometido con el dúo y cree que una novia sería un fuerte distractor para su carrera. Yo pienso todo lo contrario, tengo una novia y aun así cumplo con mi trabajo, puedo seguir haciendo música y mantener mi relación, así que no veo el problema

– ¿Están listos chicos? – Pregunto Esteban

La disquera había organizado una fiesta para nosotros, era una especie de publicidad, asistirían varios artistas y la prensa cubriría el evento

– Tengo que retocarme el maquillaje – Dijo Agustina corriendo al baño

– Yo estoy listo – Dijo Maxi

– ¿Y tú Agus?

– Yo iré a guardar la guitarra y enseguida vuelvo

– Bien, aquí estaremos

Me dirigí hacia la parte trasera del escenario, había muchas personas desmontándolo, nada de lo que había aquí nos pertenecía a excepción de la guitarra y nuestras voces, nuestros conciertos seguían siendo sencillos, no necesitábamos de mucha producción para hacer música. Tomé el estuche de la guitarra y la metí dentro

Esta guitarra era la que me había regalado Caro en mi cumpleaños, con ella escribimos Amor prohibido, nos había acompañado desde entonces, estaba presente en todas nuestras sesiones y conciertos, era algo así como mi amuleto de la suerte. En cierta forma me hacía sentirla cerca, todas las canciones que hemos escrito llevan una parte de ella, siempre quiso que le escribiera una canción, si tan solo supiera que le había escrito un disco entero

Sacudí la cabeza intentando dejar de pensar en eso, no podía pensar en ella, se supone que seguí adelante, tenía una novia que me quería y yo la quería a ella, entonces ¿Por qué extrañar el pasado? Cerré el estuche y lo colgué de mi hombro, sería mejor volver con los chicos, estaba a punto de marcharme cuando mi celular comenzó a sonar

Fruncí el ceño al no reconocer el número, pero igual atendí la llamada

Llamada telefónica

– ¿Hola?

– Hola Agus, soy Martin

Fruncí el ceño sin comprender, ¿Por qué me llamaba de nuevo el productor de soy Luna? Hace semanas me llamo para platicarme de su nuevo proyecto, en realidad quiere hacer una película de la serie con el elenco original, él y el equipo de Disney creen que vendería muy bien, sin embargo, por mucho que insistió no logro convencerme, estaba entregado completamente a la música, la actuación había terminado para mí, creí que le había quedado claro

– Me gustaría que reconsideraras mi oferta

– En verdad lo lamento, pero ahora no puedo

– La mayoría de los chicos ya aceptaron Agus – Insistió – no podemos hacer esto sin ti

Si mi memoria no me fallaba, si habían podido hacerlo, sólo se deshicieron de Gastón enviándolo lejos y supliéndolo por Erick

– ¿Por qué no le hablas a Jadino? Tal vez él pueda ayudarlos

– Admito que eso fue un error – Sonreí con sarcasmo – Jandino es un gran actor, pero Erick jamás pudo reemplazar a Gastón

No había viso la serie después de que la deje, pero por los comentarios en redes sociales sabía que el público no había aceptado la despedida entre Nina y Gastón

– Por favor Agus – Puse los ojos en blanco – Gastina merece un final feliz

Mire hacia la pared sin saber que responder, yo también quería que Gastia tuviera su final feliz, pero grabar una película requería de mucho tiempo y con todo esto del dúo me era imposible hacerlo, además, cambiarle el final a la historia de Nina y Gastón implicaba volver a verla, volver a estar cerca, volver a actuar a su lado, y he de admitir que la simple idea me aterraba

– Sé que estas muy ocupado con todo lo de la gira y que lo primero para ti es la música – Hablo con tono conciliador – Pero realmente nos gustaría que formaras parte de esto, incluso podrías unirte cuando termine la gira

Necesite mucho tiempo para olvidarla y de repente nuestros caminos parecían volver a encontrarse y no sabía cómo sentirme al respecto. Carolina y yo hemos estado evitándonos durante todo este tiempo, nuestros caminos jamás coinciden porque ninguno de los dos está listo para hacerlo, sabía que si aceptaba sería un problema, pero también sabía que si no lo hacía perdería mi última oportunidad de volver a verla

– Esta bien – Dije nervioso – Acepto


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Mil tormentasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora