Amor a Golpes

97

__________

—¿Estas enojada? —pregunta—. No quería gritar, ni montar una presión.

Mi corazón aun se encuentra en mi garganta y tomo la sabana en puños aun con las lágrimas rodando por mis mejillas.

—No la recuerdo Harry, yo-yo no recuerdo ni su nombre ¿Es una broma? —digo diciendo lo ultimo severamente enojada, pero su cara de preocupación no cambia ni un poco.

—Vamos abajo —dice como una orden y limpio mi cara con e dorso de mi mano y me arrastro en la cama hasta llegar a tocar el suelo—. Si no la recuerdas esta bien.

—Pero yo quiero hacerlo —las lagrimas bajan de nuevo y mis manos se vuelven puños—. Si ella es una buena amiga no quiero terminar con esto solo porque no la recuerde.

Bajamos juntos hasta la sala y limpio mi cara para no parecer una loca, pero es en vano al ver a la persona parada en el recibidor mis ojos se llenan de lagrimas nuevamente, no por que la recuerde, si no por lo contrario, pase toda la tarde dándome golpes mentales para recordarla para recordar como la conocí pero no ha servido de nada, esto era tan inútil yo soy tan inútil.

Harry toma con fuerza mi muñeca evitando a que me vaya.

—No te preocupes por que no sepas quien soy, es mas esta muy bien podemos hablar de todo lo que ha pasado a lo largo de nuestras vidas ¿Te parece bien? —pregunta o mas bien afirma y me quedo estática en mi puesto pensando.

—No necesito que te compadezcas de mi —digo desencajada y siento como mi brazo duele y me hace sentir un poco mas fuera de lugar—, y tampoco necesito que tu lo hagas. —me dirijo a Harry y logro quitar su mano con el esfuerzo que hago.

Subo nuevamente, quería que pasara una cosa a la vez, quería que todo fuera lento, ¿Por qué carajos la trajo a casa sabiendo que aun no he digerido que voy a tener un bebe?

El teléfono suena y antes de atenderlo escucho como lo hacen antes abajo y abro el teléfono sin hacer ruido para escuchar.

—¿Perrie? —Harry dice.

—¿Qué hace Joseph fuera de prisión? —¿Qué carajos acabo de escuchar?—. Ojalas estés durmiendo con un ojo abierto, ¿Tu no sabes que el quiere es el bebe no?

—Yo se que el esta suelto, ¿Pero de dónde saco pruebas de que abuso de ella? Yo le creo pero eso no basta con eso, ellos necesitan una prueba y yo no la tengo.

—¿No le has dicho, verdad? —obviamente no me había dicho, estaba a punto de echar el grito al suelo, pero es muy pronto, quiero seguir escuchando—. Harry, ella necesita saberlo, quizás tenga una prueba, ella también necesita cuidarse cuando este sola, necesita cuidar a ese bebé.

Trato de no emitir ningún ruido para que no descubran que escucho lo que dicen, me siento como una intrusa, como a la vez me siento tan furiosa, quiero golpear a Harry tan fuerte, pero se siente tan injusto cuando lo hace por no poner otro peso en mis hombros.

—¿Zayn lo sabe? —pregunta y un sollozo me asalta—. ¿Estas llorando? —dice y trago duro.

—No ¿Estas con alguien? —pregunta ahora ella—. Pensé que estabas con Adelaide yo que se.

—Mierda. —dice y cierro el teléfono cuidadosamente para evitar que lo escuchen.  

Me cubro con la manta hasta arriba y me volteo del lado contrario de la puerta para hacer que llevo rato durmiendo.

El abre la puerta, y cierro los ojos de golpe sin moverme, y suspira como si estuviera aliviado, el baja de nuevo y me paro rápidamente también suspirando, botando todo el aire retenido por el miedo de ser descubierta.

...

Es de noche y estoy vuelta un manojo de nervios, cada sonido me aterra, mi corazón esta acelerado, quiero llorar hasta desahogarme pero no quiero que Harry sepa que yo se que Joseph no esta tras las rejas.

Quiero que sea de día, quiero que amanezca y saber que sigo viva, que esto es solo un mal momento, pero de un momento a otro siento como sube la temperatura, y me despojo de la cobija que me cubre.

Mi respiración se para un momento cuando no veo a Harry en la cama, me he comenzado a desesperar y es hasta que prendo la luz de la habitación y un grito sale inconscientemente cuando veo a Harry salir del baño.

Me sostengo de la manilla de la puerta y mi mano libre la dejo justo donde esta mi corazón, tratando de tranquilizarme, las gotas de sudor corren por toda mi cara y se combinan con las lagrimas, estoy tan asustada que no asimilo nada.

—¿Todo esta bien? —se asoma Anne y me toma en sus brazos—. ¿Qué te sucede? Tienes fiebre, algo que debes evitar cuando estas en este estado. —ella me sienta en la cama y tomo su mano por el temblor que tengo ahora.

Anne se queda a mi lado por un momento, y agradezco que se quede aquí, necesito contárselo a alguien o si me voy a morir.

Harry esta aturdido al igual que yo pero el no dice nada, las lagrimas aun bajan, sigo muy asustada, me sorprendió mucho ver a Harry, estaba intimidada.

—¿Podemos hablar? —dejo la pregunta al aire.

—¿Si? —dice Harry y Anne esta a punto de irse pero reacciono.

—Es con tu madre —pongo mis manos en puño con tanta fuerza que siento como mis uñas se incrustan en mis manos—. Lo siento.

—No pasa nada —dice—. Ya vuelvo.

—¿Qué querías decirme? —dice cuando Harry ya esta afuera.

—No puedo dormir porque tengo miedo —digo aun con ganas de vomitar, y con la manos aun vueltas puños—. Joseph esta afuera —sollozo y ella me abraza con protección—, me entere porque estuve escuchando por el teléfono mientras hablaba, pero no quiero que lo sepa.

Anne solo me mira y es hasta que un suspiro se me escapa y ella habla suave y cariñosa, como si fuera otra hija para ella.

—¿Crees que todo esta mejor ocultándolo? —la veo por unos segundos y asiento con la cabeza—. ¿Por qué?

—Siento que no tiene que esta cargando con mi miedo cada tres segundos, porque no esta demás decir que ya no me siento muy segura aquí, Joseph ya ha entrado antes aquí —digo y hago mas presión en mis manos y siento como la sangre se escurre—. Se que Harry no puede hacer mas de lo que hace, pero no puedo agregar otra cosa a sus hombros, ademas de que se enoje por escuchar lo que no me conviene.

 —No pasa nada —menciona—. Yo no le diré nada hasta que estés completamente preparada, ahora creo que debemos llevarte a un hospital.

—¡¿Qué?! Anne yo estoy bien.

—Estas embarazada, no puedes dejar que se te suba la temperatura o si no ya sabes lo que le prosigue a eso, llamare a Harry.

—¡NO! Yo iré contigo a buscarlo.

Me quedo un instante parada en mi puesto viendo a un punto fijo, y boto todo el aire retenido,observo mis manos por un instante y el desastre que he hecho me hace reaccionar.

...