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Harry

Como cada mes, me tocaba llevar a mi mamá a el doctor, ese maldito doctor, sigo pensando que el es el culpable de lo que sucedió ese día, obviamente ella se asusto por lo que le dijo.

Se que eso no tiene nada que ver con su muerte, pero el hizo algo mal, yo se que el tiene la culpa de algo en todo esto, porque según lo que me dijo antes de que se muriera, que su enfermedad no tenía nada que ver con el virus que tenía.

Recuerdo que la última vez que la había visto viva fue esa noche antes de irme, yo siempre vi raro que ella me pidiera que cancelará todo, que me fuera dicho que vaya hasta la playa y que dijera que quitarán todo, quizás lo hizo para que no me diera cuenta de que había muerto ese mismo día, se que lo que digo es muy tonto, porque nunca he creído en eso de que uno presiente cuando va a morir pero con ella no parece ser lo un poco.

— Harry espera por mi ahí afuera.— aunque mi mamá me odie porque cree que mate a _________, y que yo la odie por decir que yo soy el culpable, no quita el hecho de que la quiero aquí conmigo.

Mis ojos captan la presencia de alguien mas en la sala, y es la de ella, sus ojos están perdidos en la variedad de peces que hay en una gran pecera en la sala de espera.

— Hola.— ella se voltea asustada y me ve con desencaje.

Su voz tarda en salir, esta pálida, y el color rojo de sus mejillas parecen resaltar en ese pálido.

— Harry.— ella toca su pecho asustada todavía— Hola.

— ¿Qué haces aquí?— le pregunto indiscretamente.

— Creó que estos son para exámenes cancerígenos ¿No?— dice sarcástica, mientras tratando de ocultar su nerviosismos.

— Lo sé, ¿Presentas algún tipo de cáncer?— trato de no ser tan grosero con mi tono de voz, pero lo hago igual, así que no me importa mucho después de todo.

— ¡No!— casi grita y aleja su mirada de la mía.

No entendía el porque de que estaba aquí, y me culpo, me encanta se intrépido, ahora mas, cuando no conozco nada sobre la vida de esta mujer.

— Soy novia de Andrés.— ella vuelca su mirada en la mía, y juro que en este momento mi corazón se ha arrugado tanto que si pasa algo más me quedaré sin sentimientos— Es algo que no debería preocuparte.— rueda sus ojos— Y Harry, que lo de tu cita solo quede entre nosotros.

¿Joder ella cree que es un maldito juego esto? Esta bien que hayamos salido, ¿Pero que lo oculte? Si hay algo que me molesta es que me mientan, y si _________ me fuera hecho algo así literalmente moriría, aunque ya saben lo que había sucedido hace varios años atrás.

— Sinceramente, tu mente debe estar llena de culpabilidad.— digo sin pensarlo, porque ahora mismo no me importa que piense de mi.

— Tanta que no se donde guardarla.— ella dice mientras ve sus uñas con desinterés— Lo siento por todo Harry.— su cara esta roja, sus ojos cristalizados y su voz nerviosa y temblorosa.

¿Por qué ahora parece tan vulnerable? Pareciera que su estados cambiaran, en realidad no se lo que sucede ¿Le gusto que saliéramos esa noche o no?

— ¿Por qué lo sientes?

— Por...

— Entra ahora.— interrumpe Andrés, el esta en una pequeña ranura de entre la puerta y la pared, su voz es algo demandante y la reacción de la chica que tengo al frente es asustadiza, tanto que me causa lástima.

Yo también entro junto con ella ya que mi madre se encuentra ahí también, en tan solo segundos ellos se encuentran en la esquina mas lejana de nosotros, ellos se encuentran hablando casi discutiendo.

Amor a GolpesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora