Summer se asomó para vernos, me hizo una señal para que checara el bolso de mi chaqueta, tenía a Ela en mis brazos, solté un brazo, lo bajé y metí mi mano a la bolsa, había un bote pequeño de cristal, tenía un líquido transparente, miré a Summer sin saber que hacer con el bote, con mímica ella me indicó que lo echara en el Ela, abrí el bote sin que Ela se diera cuenta, lo moví para echárselo en la espalda, Summer me indicó que no, me señaló su nuca, le vertí el líquido, Ela no se dio cuenta de nada, de un momento a otro, empecé a sentir su dolor, su tristeza me invadió el cuerpo, la mente, me sentía demasiado triste, derrotado, las muñecas me empezaron a arder y a doler demasiado, el dolor era insoportable, no tenía a mi lobo para que aliviara el dolor, Dash seguía buscando a Ela.
Pasaron muchos minutos hasta que Ela se calmó, estábamos en un sillón, ella en mis piernas, con su cabeza en mi hombro, yo la seguía abrazando, necesitaba de ella, sentir su piel, su aliento, como en estos momentos que me golpeaba en el pecho, erizando mi ser.
Poco a poco se fue enderezando, se acomodó el cabello detrás de sus orejas y se limpió su rostro, sus ojos estaban rojos al igual que su nariz.
-Me da pena contigo- bajó la mirada y su cabello también se bajo.
-No tienes porque sentir pena conmigo- le acomodé el cabello detrás de la oreja, y levanté su barbilla, no me gustaba como miraba al suelo.
-No se que pasó, no suelo ser así, no te conozco pero siento que lo hago desde hace mucho- susurró lo último; su mirada viajó hasta el reloj que estaba colgado en la pared de la biblioteca- No, ya es muy tarde, va a matarme si llego más tarde- se levantó rápido de mis piernas, la desesperación que ella sentía también yo la sentía.
-Tranquila- yo también me levanté.
-¡No! Tu no lo conoces, puede llegar a ser muy agresivo, muy violento...
-Tranquila, si algo te pasa, nos veremos aquí en la biblioteca...
-Pero como voy a saber...
-Tu solo ven, yo te voy a ayudar, conmigo vas a estar bien...
Ela solo asintió con la cabeza, y salió corriendo.
Summer se acercó, yo solo se me quedé viendo a la salida de la biblioteca.
-¿Qué fue lo que me diste, lo que le eché?
-Me mandó un texto Santi, me dijo que lo hizo el brujo de mi manada, es para que sintieras la conexión como si tuviera a su loba, solo funciona para los mates y solo ellos lo pueden detectar, no la vas a poner en peligro, al contrario es para que la cuides.
-¿Viste lo que le están haciendo? La están torturando, debo de sacarla de donde la tengan, debo llevarla conmigo- Ya iba a seguirla, pero Summer me detuvo.
-Espera Nicolás... No puedes actuar así, sin saber que esperar, así la vas a poner en mayor peligro.
-Entiende Summer la están matando.
-Y lo van a hacer si tu actúas de esa manera, vamos a la manda a ver que han descubierto.
