EQUIPO SASU-HINA-NARU

I

La reacción de molestia e incredulidad no se hace esperar por el resto de kunoichi presentes.

«No pude quedar en el mismo equipo que Sakura-chan»desconsaldo el chico voltea en dirección a la chica quien permanece totalmente quieta y paralizada. «Ademas...»tensa el rubio las manos sin creer lo que sucede.

En cambio, la tercer integrante, la única miembro del equipo se encuentra completamente asombrada.

Su corazón martillea, la respiración se entrecorta y el teñirse las blancas mejillas no se hizo esperar.

—Naruto-kun... —pronuncia el nombre con suavidad tocando su mano a la altura del pecho.

Y así, la clase continua con el profesor anunciando el resto de equipos previamente formados, dar unas últimas palabras y finalizar la última clase de esos chicos en la Academia.

Inmóvil un rubio admira las personas moverse de su lugar uno tras otro, andando fuera del que fue su aula de clases para empezar una nueva etapa de su vida.

«No habrá mejor momento después»asegura siguiendo los pasos de una chica de rosados cabellos.

Un pensamiento que no se limitaba solo en él.

—Y-Yo... —unas manos aferrán un bento con fuerza en la misma habitación.

El rubio no pierde de vista la chica que sale con su equipo a la puerta sin saber que detrás alguien al igual lo observa de la misma manera.

—Naruto-kun... —suaviza la vista—. Es mi oportunidad... —asegura para darse valor.

Esos ojos que han observado los pasos del rubio todos lo días, que desde lejos miran ha culminado, esta vez sería diferente. Incluso si las piernas le tiemblan y el aire escasea.

Estar en su equipo es una buena señal, debía serlo.

«Lo haré»repite a si misma avanzando aquella dirección con nerviosismo.

Antes de que él cruze la puerta. Antes de que se pierda de su vista. Antes de que se arrepienta de hacerlo.

El almuerzo con su reciente nombrado equipo permitiría conocerse. La oportunidad perfecta para hablarle la tiene por fin adelante.

—¡Oye!

Una voz obliga a la azabache detenerse y permitirse respirar. Ha dado un respingo que casi hace caer la caja de almuerzo junto sus esperanzas.

Identifica molestia en aquel tono proveniente detrás de su espalda.

Gira—¿S-Si?

—¿Tú eres Hinata? —cuestiona con mirada afilada una chica acompañada de tres kunoichi

Era fácil identificar el motivo del por qué estaban frente a ella y lo que querían tratar, no por nada todos sabían que eran las autoproclamadas admiradoras de Sasuke.

Pero aún así la azabache no lo comprendía a diferencia de los compañeros que veían avecinar una tormenta.

«To-Todas... Todos me miran»se hunde avergonzandose sobremanera la chica azabache.

No recordaba haber hecho algo para llamar su atención.

—Déjame advertirte algo... El hecho de que Sasuke este en tu equipo, no significa que sea tuyo.

Al oír aquel nombre sus ojos se asombran.

«¿S-Sasuke-kun?»la calidez en sus mejillas desaparecen de golpe clarificando su mente.

—Etto... —busca seguridad—. Y-Yo... Yo... Eh... —niega y respira tratando hablar.

La forma que la veían aquellas kunoichi y el resto de personas no ayudaba en lo absoluto.