Mi imbécil Uchiha. [SasuSaku]

No lo sabe..

La cabeza me daba vueltas, me sentía mareada lo único que recordaba era a esos sujetos rompiendo mi puerta.

A no ma.. Si es cierto.

¡Pinche Itachi hijo de su madre!.

¡Me había secuestrado el perro!.

Pero cuando lo vea, le voy a dar unos buenos vergazos. Nos vamos a dar en la madre para que se le quite.

—¿Esta despierta?.— escuche decir. Esa era la voz de itachi la reconozco.

—Creo que si señor.

—¡Si estoy despierta!.— hable ahora yo. —¡Quitame lo que sea que tenga en los ojos Itachi!.

Cuando me quitaron el pañuelo de los ojos lo primero que vi fue a Itachi, maldito como se le a ocurrido traerme hasta no se donde.

—Bienvenida Sakura.— me dijo amablemente.

—Oh muchas gracias.— conteste. —Te daría la mano pero la tengo amarrada.

—Me disculpo por mi actitud Sakura, se que no fue la mejor manera de traerte aquí.

—A no te preocupes, me encanta que me duerman y me transporten de país en país.

—¿En serio?, pues vaya me alegró.

—Ahora sueltame.— exigí. —Por que te voy agarrar a putasos.

—En ese caso mejor no te suelto.

—¡Sueltame!, ¡Vamos al patio y ahí demonos en la madre!.

—Sakura..

No me había fijado, eche un vistazo por toda la casa.. ¡Cual casa era una pinche mansión!. Era enorme.. Se podría decir que era lo doble que la mía o incluso mas.

—Señor.— volvió hablar un sujeto por detrás de Itachi. —El joven a comenzado hacerlo otra vez.

—Ya no intentes nada.— dijo Itachi. —Pronto lo arreglaremos.

—Como ordene.— y volvió a desaparecer.

—Sakura.— esta vez hablo dirigiéndose a mi. —Te soltaré pero por favor habla con Sasuke.

—No lo haré. Regresame a mi casa y arregla mi puerta.

—Sakura por favor..

—No Itachi, no voy hacer nada de nada. Es tu hermano, tu debes controlar la situación.

—Fue un error traerlo conmigo, contigo o sin ti él tiene un futuro por delante.

—Te equívocas.— le corregí. —Conmigo no tenia futuro.

—¿Por que lo niegas?, tu sabes bien que si tenia futuro, le brindaste tu amor, tu confianza, tu bondad, le ayudaste y también le ofreciste un techo donde vivir.

—Solo eso podía darle. En cambio tu le puedes dar mas Itachi.

—Puede que tengas razón, pero aun a si él no es feliz si no es contigo.

—Itachi..

—Que chiste tiene que le de todo, si no es feliz.

Suspire. —¿Y que esperas que haga?, ¿Que vaya y le ruegue?, te recuerdo que él también fue quien decidió quedarse contigo.

—Te equivocas, a la los dos días en que se vino conmigo quiso regresar contigo.

—¿Que?.

—Pero yo le cancele los vuelos, e incluso los camiones para que volviera.