MEJORES AMIGOS. Just friends, Just Sex [FANFIC VEGETA Y BULMA]

CAPÍTULO 13 - EN LA HABITACIÓN DE LAUNCH.

Los rayos del sol entraban por una de las muchas ventanas de la habitación de la peli azul, estos llegaban hasta su rostro e iluminaban cada una de las facciones de su hermosa cara de Ángel.

Abrió los ojos por si sola, ya hace dos semanas su hermana mayor ya no venía a despertarla como solía pasar, desde esa vez que la encontró llorando en la cocina ebria.

Hoy era el último día de clases para los jóvenes de preparatoria, dos meses de descanso le esperaban.

Se puso de pie aún casi dormida, camino al baño de su habitación para darse una ducha.
Treinta minutos después se encontraba casi lista, aplicándose un poco de labial en sus labios un tanto carnosos. Al terminar un llamada entrante de Vegeta recibió.

- ¿Bueno? - pregunto ella con el celular en la mano y con la otra acomodando su cabello.

- Oye, nunca te conectas en el grupo - pronunció algo risueño.

- No la verdad no, osea, las demás conversaciones no me interesan y tu eres el más importante y hablamos por llamada, así que no importa ¿pero que pasa?

- Ja... nos pusimos de acuerdo para no asistir hoy e ir a la casa de Launch... Voy a pasar por ti.

- ¿En serio Milk acepto? - pregunto con una sonrisa en su rostro, para dar unos cuantos saltitos muy cortos al estar emocionada.

- Si, el insecto de Kakarotto la convenció - pronunció Vegeta mientras miraba al frente, estando a unas cuantas casa para llegar a la de Bulma.

- Ok, ok, te dejo para terminar de alistarme.

Colgó, dandose la media vuelta para ir directo a su bolso y sacar un par de libretas, e ir agregando más cosas como, gomas de mascar, dinero, una pequeña botella de ron y lo más importante para Vegeta y para ella, dos empaques de condones sabor fresa y uva.

Bajo las escaleras con rapidez, caminando hacia la puerta sin despedirse de sus padres y hermana. Salió de su casa para luego sentir el viento frío el cual chocaba en sus mejillas y recorría su cabello corto, su piel se erizo, pero se erizo aún más al ver a Vegeta recargado en la puerta de su auto esperandola.

- ¡Ya llegue! - mencionó cerrando el barandal que tenía como protección para su casa, caminando con sus pies juntos como si fuera un pingüino, viéndose demasiado tierna ante los ojos de su mejor amigo.

Vegeta sólo la miro con una sonrisa, sin mencionar ninguna palabra, acercándose a ella, colocando su brazo derecho en su cintura, levantando el mentón con su mano, para darle un beso un tanto largo, sus cuerpos estaban demasiado cerca, se daban calor directamente y sus bocas sola intercambiaban saliva caliente.

-¿Y ese beso? - pregunto ella colocando sus manos frías en el pecho muy marcado de el hombre.

- Surgió de pronto, quería un poco de tu baba en mi boca - afirmó sacándole una sonrisa a su amiga para luego abrirle la puerta ofreciéndole su mano para dejarle entrar, era todo un caballero.

  Ambos se encontraban dentro del auto el cual dentro de el, el ambiente estaba en modo cálido, Bulma apartó de su cuerpo un sacó color azul marino, para luego sacar de su bolso el paquete de condones.

- Traigo una sorpresa - dijo acercándolos a su boca.

- Vez como tu siempre empiezas... - mencionó colocando las llaves.

Bulma llevo una mano a su pecho, moviéndose dramáticamente - Pero tu bien que le sigues - pronunció.

- Me pones caliente, te pones caliente tu, y es un no parar - contestó Vegeta, diciendo la verdad.