A unos cuantos pasos del cielo

253 31 1
                                    

Dylan

- Hijo, buenos días, hoy te casas

Abrí los ojos cansado y traté de removerme en mi cama, mamá se rio un poco y me dejó una taza de café sobre la mesa, el solo olor hizo que abriera los ojos a gusto. Mamá y papá se estaban preparando para marcharse, pero sabía que en unos pocos días Luna y yo íbamos a estar durmiendo en esta misma cama. Debo aceptar que había pensado mucho en el tema de la noche, Luna no era cualquier chica y además era virgen, sabía que no era lo que siempre pensaba. Yo no quería estar junto a una niña virgen porque consideraba que era una responsabilidad enorme, que siempre iba a recordarme por ello. Pero en este caso, Luna iba a estar conmigo para toda la vida.

Bajé despacio y empecé a buscar a mi hermana, pero no la encontré

- ¿Y Nana?

- Tu amiga Becca ya la recogió- Dijo mi padre viéndome desde la sala

- Que bueno

- Iba como tarde ¿a qué hora quedó en encontrarse con Luna?

- No lo sé- Mentí

- No puedo creer que alguien haya querido casarse con esa niña tan corriente

- Papá por favor, eso fue hace mucho tiempo, además Be ya ha cambiado

- Aunque la mona se vista de seda

Lo malo de no tener a Nana merodeando en la casa era que justamente papá no se controlaba, lo bueno es que cada uno de mis padrinos comenzaron a llegar, mis amigos de la banda, algunos primos y también amigos de la iglesia, mamá había adecuado el jardín para que nos arregláramos allá, así que nos dirigimos afuera a hablar un rato mientras llegaba el fotógrafo. Cuando por fin llegó empezamos a hacer el tonto, todos vestidos solamente en una pantaloneta horrible y una camiseta. hubo una toma muy graciosa en la que mis amigos empezaron a actuar como niñas viéndose en el espejo como si tuvieran maquillaje. Todo muy bien preparado

Mi mamá al poco tiempo bajó y me pidió las argollas, después del matrimonio civil, Luna y yo nos quitamos los anillos porque no íbamos a comprar dos juegos de joyas para cada boda, mi mamá era la encargada de dárselos al pastor.

Fue entonces cuando llegó la hora de arreglarme, cuando tuve problemas con la corbata mi padre salió al rescate

- Dylan, aprovechando que te tengo a solas ¿puedo decirte algo?

- Claro

- Ven acompáñame

Subimos lentamente hasta el cuarto en donde se estaba quedando u noté que había una carpeta bastante llena sobre la cama

- Dylan- Dijo mi padre haciéndome sentar- Hijo, yo sé que no he sido el mejor padre del mundo, sé que en muchas ocasiones has esperado más de mí, y que el que hallas decidido tener la vida que ahora tienes, no es más que un reflejo de lo que yo he ocasionado en ti

- papá

- Déjame hablar por favor... Desde que comenzaste a hacer esto de la música fui muy claro con lo que pensaba sobre eso, creo que la forma en la que fui criado no me permitió ver que tu tenías una vida propia que vivir y que así mismo ibas a obrar. Te he mostrado de mil formas que no me parece lo que haces... Sin embargo, jamás, ni una sola vez, te he demostrado lo que siento por ti

Mi padre estiró la carpeta hacia mí, yo la tomé y al empezar a abrirla no pude evitar abrir los ojos sorprendido, había cada noticia sobre mí y mi banda desde la primera vez que salí

- Papá ¿qué es esto?

- Dylan, aunque considero hasta el día de hoy que esto sin lugar a duda es un hobbie, es un hobbie que te hace feliz y además exitoso, hijo, quiero que sepas que estoy muy orgulloso de ti

Sin poderlo evitar abracé mi papá quien me devolvió el abrazo con firmeza

- ¿Algún consejo para ser un buen esposo?

- Bueno... te diría que... ames a Luna, aunque a veces no la entiendas

Le sonreí y nos volvimos a abrasar, bajamos las escaleras y nos tomamos una foto todos los chicos con nuestros trajes.

Papá llamó a varios coches para que pudiéramos llegar a la boda. Cuando bajamos el lugar estaba impresionante, de verdad Becca se había lucido con la organización de todo, unos cuantos familiares llegaron así que fui a saludarlos, traté también ver a mi al rededor por si veía a Luna, quién yo sabía que estaba cerca, pero era verdaderamente difícil ver cualquier cosa.

Entonces vi a mi suegro quien estaba caminando, despacio, pero caminando

- ¡Pastor!

- Esto es una promesa cumplida hijo

Lo abracé mientras intentaba ocultar mi sorpresa, Luna seguramente estaría muy contenta

- Voy a ver si ya está lista tu esposa

- Muchas gracias suegro

Él me sonrió y se marchó, tras unos momentos vi a Becca venir hasta mí

- Hemos tenido una idea, pero debes confiar en mi

- De acuerdo

Empezamos a caminar y llegamos a lo que creía yo la parte de atrás del salón

- ¿Estás listo?

- ¿Para qué?

Be me sonrió y pasó una venda por mis ojos

- ¿Pero ¿qué...?

- Te voy a llevar donde esta Luna, el Pastor quiere que oren un momento antes de entrar

Sonreí emocionado, había intentado llamar a Lu, pero por alguna razón no me había contestado, ahora saber que iba a estar cerca de ella me emocionaba. Becca me hizo caminar un poco hasta llegar a algún sitio frio, sentí que era como un pasillo, estaba allí hasta que sentí un par de manos que me unieron a la de Luna

- ¿Amor?

- Hola- La voz de Luna reflejaban todos mis nervios

- Hola mi amor

- Ya casi nos casamos

- ¿Quieres que oremos un ratito?

- Si..

- ¿Y quieres que además dirija la oración? - Pregunté nervioso, Luna se rio y todos mis nervios se fueron

- Si amado sacerdote

- Esta bien- Respiré profundo y comencé a orar- Amado Señor, antes que cualquier cosa te quiero agradecer por habernos traído hasta aquí a Luna y a mí, gracias porque hemos visto tu bondad y misericordia, Padre Santo te pedimos que hoy Señor tomes en tus manos los eventos que pasen, que todo lo que suceda sea para glorificar tu nombre y que me prepares tanto a mi como a mi futura esposa para la vida que tenemos por delante. Amén

- Amén- Repitió Luna

- Bueno- Dijo Be- Es hora de que se separen por un breve momento para que se casen, tras de mí escuché una puerta cerrarse y allí me liberaron de la venda

Be me tomó los hombros

- Vamos al altar, debes esperar a tu esposa 

CelestialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora