Yuri Plisetsky es el chico mas popular de su escuela, es el mas cortejado por hombres y mujeres por su extrema belleza tan exótica.
Cada vez que alguien comienza una relación con el rubio lo único que le provocaba aquel ángel ruso era darle todo lo...
La cena en la casa del kazajo había sido de ensueño, claro después de aquel pequeño (gran) detalle en la habitación del moreno había estado un poco difícil comenzar una platica normal, pero la madre del chico parecía que realmente no había visto nada, sonreía y platicaba con mucha normalidad la señora sabia fingir muy bien el serio trauma que había tenido al entrar a esa habitación, era una maestra nivel 4, mata rugal con una moneda de a peso, si, así de master era la señora en el arte de fingir.
Y aunque era mas que claro que "su bebe" ya no era un bebe desde hace mucho, no había notado que tanto había crecido y lo casi adulto que era realmente, y una nostálgica sonrisa mostró su rostro y es que ahora que veía a su hijo marcharse en aquella motocicleta, se preguntaba como era posible que no hubiera sido consciente de que ese niño ya no lo era mas desde hace tanto tiempo, y vaya que había crecido, era todo un hombre exactamente igual a su padre cuando lo había conocido y en ese momento entendió que lógicamente tenia necesidades que atender, probablemente ya llevaba tiempo sin hacer "nada" En ese momento que pensó en su hijo urgido la señora Altin se puso de mil colores de la vergüenza, su hijo pronto maduraría mas... probablemente a lado de aquel rubio y ciertamente no estaba nada disgustada con la elección de su hijo.
Aunque si le parecia algo extraño que de un momento a otro le gustara un hombre, si, Yuri era muy hermoso y el hecho de que fuera un hombre no le interesaba en lo mas mínimo, pero ella siempre había pensado que estaba muy enamorado de una chica de su colegio desde tenia memoria, pues el Kazajo siempre se desahogaba con ella, le había comentado acerca de una persona inalcanzable para el, una persona bella, de ojos verdes y piel pálida...
Pero, ahora que lo pensaba el nunca le había dicho que era una chica siempre menciono a una persona y una persona rubia. Y entonces todo hizo click. Siempre había sido Yuri.
- Beka - Susurro
Y al igual que Yuri había sentido admiración por ella, la señora Altin había sentido una sincera fascinación con el rubio, realmente el era todo lo que podía desear para su hijo, y sinceramente no le importaba que fuera un hombre o una mujer la pareja de Otabek, jamás había pensado en la posibilidad, pero eso no queria decir que debía actuar mal, darle un sermón, intentar hacer que regresara a ser "normal" y hacer sentir mal a su hijo con la decisión que el había tomado, porque desde el día que había nacido lo único que queria y necesitaba saber era que su Beka fuera feliz con la persona que el eligiera y mas si era alguien tan bueno como aquel muchacho, se veía a kilómetros que le hacia feliz
Y estaba mas que entusiasmado, incluso ella estaba sorprendida que dejara entrar a alguien mas a su casa y mas sorprendida que dejara alguien pasar por el umbral de su habitación. definitivamente era el elegido. si quería amarrar a su hijo lo estaba logrando, no mejor dicho: lo había logrado.
- Yo queria nietos - Hizo un puchero lanzando aquella frase al aire - ¡Pero pueden adoptar! - Sonrió
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Por otro lado entre los dos chicos las cosas estaban mejor que nunca, después de la cena Otabek llevo a Yuri a su casa por supuesto en su motocicleta.
- Gracias por traerme - Dijo el rubio un poco apenado y con una sonrisa discreta.
-¡Por Dios! - Grito el kazajo de una manera exagerada y en cierto tono de burla
-¿Que? - se giro molesto el rubio inflando los cachetes rojos como tomates
-¿Ese es Yuri Plisetsky apenado? - camino en dirección del rubio
- Seras idiota...- Se giro cruzando sus brazos - ¡Por supuesto que no estoy apenado! - y desvió la mirada del moreno volviendo a su faceta de diva inalcanzable
- Si, si estas - Dijo agachándose un poco y quedando frente a frente
Ante la insistencia del moreno, la cercanía y los nervios, tuvo que admitir lo evidente
-¿Y cual es el maldito problema si lo estuviera?
El kazajo lo abrazo y hundió su cabeza en su hombro, estaba emocionado, estaba feliz y se sentia tan cómodo con ese delgado cuerpo entre sus brazos
- Eres tan lindo - dijo ansioso mientras apretaba mas a Yuri
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Hola!! Muchas gracias a quienes me leen o sea chavas
La primera vez que lo publique ya llevaba 16k lecturas Y m Y ❤️😢❤️
