Epílogo

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22.10.2021

David

Hoy hace veinte años que se estrenó OT. Veinte años de La casa de Inés y Lía. Veinte años desde que la vi encima de un escenario por primera vez y supe ciertamente que se convertiría en el amor de mi vida. Veinte años de aventuras y desventuras musicales y amorosas.

Me encuentro en Barcelona, en los estudios del Parque Audiovisual de Terrassa. Es un espacio enorme y chulísimo. Puedes encontrar platós, salas de toda clase... Hasta incluso hay los decorados de Un monstruo viene a verme. ¿Gran peli, no? Sinceramente, no me acuerdo de que iba pero supongo que en su momento me gustó. Estoy desvariando y no era mi intención. Serán los nervios. Me cruzo con Noemí Galera que me da dos besos y me guiña el ojo con picardía. Laura no sabe que estoy aquí. Os pongo en situación: para celebrar las dos décadas del programa que nos lanzó al éxito han decidido juntarnos en una gala especial en directo. Excepto Juan Camus y servidor todos estábamos confirmados. Realmente, yo sí estaba confirmado pero no sabíamos hasta última hora si podría venir y me negué. No obstante, un avance a última hora me ha permitido aterrizar en la ciudad condal hace escasas dos horas llegado directamente de Miami, donde estoy grabando un disco recopilatorio en el que cuento con gente tan importante como mis hijas o Lau, la persona que duerme a mi lado cada noche y que sé del cierto que está enfadada porque no voy a actuar con ella en Escondidos ni voy a estar presente en esta noche tan especial. Bueno... eso cree ella. Tengo muchos cómplices en este recinto.

-¡Papá! – la dulce voz de Inés llega a mí cuando entro en plató para observar el ambiente. Debo estar lejos de Laura.

D: ¡Cariño! ¿Qué haces aquí? – la cojo en brazos llenándola de besos.

Inés (In): Con la tita Gis.

D: ¿Y mamá? – se encoge de hombros – ¿Está enfadada?

E: Sí – mi niña mayor aparece de la nada mostrándose rotunda – Está en maquillaje.

Debería poneros al día de nuestras vidas y las de nuestros conocidos... Gisela y Bustamante están juntos y son padres de mellizos: Mónica y Pau, dos bebés preciosos que nos tienen el corazón robado. Apenas tienen seis meses. Rosa ha conocido a un chico y parece que es el definitivo. Ito y Ro no están en una relación seria, simplemente quedan cuando tienen ganas de acostarse. Si ellos son felices, no me meto. Del resto de compañeros nada a destacar, francamente. Sus vidas no han cambiado mucho en tres años. ¡Ay me olvidaba! Manu y Núria, nuestros andaluces preferidos y con más salero del universo han ido de noche de bohemia en noche de bohemia hasta darse cuenta de su amor hacia el otro. ¿Y Laura y yo, os preguntaréis? Pues ahí estamos, con nuestros más y nuestros menos. Nos casamos cuando Inés cumplió los cuatro meses en una íntima ceremonia en el Cabo de Gata. Ella pasó a vivir con nosotros y solo visita a su madre en vacaciones ya que vive en Houston. Tema enfado... Le prometí que estaría de vuelta para esta noche y como no he cumplido está muy enfadada. Espero que me perdone ya que estoy aquí. Digamos que llevamos unos meses en los que nuestro matrimonio se ha debilitado. Mis múltiples viajes al otro lado del charco para grabar el álbum la han molestado en exceso. Y eso que ya no estoy con Universal... Ojalá pueda arreglarlo hoy. Necesito verla, lo anhelo. No puedo salir a cantar estando peleado con ella.

E: Dice que está muy enfadada – sigue hablando mi primogénita – No sé qué ha pasado pero a ver si lo arreglas de una vez que últimamente...

"Claro, ya no tiene cuatro años. Se da cuenta de todo"

D: Ya lo sé, cielo, voy a hablar con ella. ¿Te encargas de Inés?

E: ¿Podemos ir a los inflables? Hay más niños.

Dejemos el pensar atrásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora