Antes que nada quiero agradecer que sigan leyendo la herencia de los Roberttson ❤gracias por leer!
Aviso de una vez que es un capitulo corto, lo hice como en hora y media, pero ya tengo una idea y escrito el comienzo del siguiente capitulo, que sera menos corto 😊
Espero les guste y plox dejen sus comentarios! 😂
Había terminado de hacer todos mis quehaceres en casa. Ya había lavado los trastes, recogido y limpiado la mesa y la cocina, había echado la ropa a la secadora, ya la había planchado, doblado y repartido a sus respectivos dueños, e incluso ya hasta había castigado a la pulga.
- Es hora de darme otro baño - me dije
Me fui a la ducha más cercana y me relaje después de un día tan tedioso… siempre castigar a Kevin es… cansado.Abrí el grifo de la regadera y deje que el agua escurriera por mi espalda, mis brazos, mis piernas y me llenara todo el cuerpo de esa agua caliente que me relajaba.
Estuve casi una hora bañándome y cuando termine ya pasaban de las diez.
Me sequé en la privacidad de mi habitación, fui al ropero negro que estaba a un lado de mi ventana y vi que mi almohada estaba tirada debajo del ventanal. Rodé los ojos, fue obra de Kevin en un ataque de rabia seguramente, ya lo había hecho un par de veces. La recogí y ahora sí fui al ropero y me puse una pijama azul a cuadros que me encantaba por lo calentita y cómoda que estaba. Cuando me senté en mi cama azul me fijé entonces que estaba bastante arrugada y deshecha de la colcha. Claro, había castigado a Kevin. La silla de mí escritorio también estaba mal acomodada y el cinturón con el que había pegado a la pulga estaba tirado en el suelo.
Suspire, incluso castigar ocasiona desorden. Recogí y acomode mi habitación, odiaba verla en ese estado por mínimo que fuera.
Y justo estaba metiendo mi ropa doblada en los cajones cuando escuche bastante ruido en las habitaciones vecinas. Ya era medio tarde, pasaban de las diez, mañana había escuela, los niños tendrán ya que estar acostándose para dormir y no seguir con su pequeño alboroto.
Deje a un lado lo que hacía y salí de mi habitación justo después de que Christopher entrara al cuarto de las niñas, seguro a decirles que ya era hora de dormir. Camine por el pasillo y entré al cuarto de los niños entonces.
- Hola chicos. Veo que Kevin sigue dormido - comente
- No se ha despertado ni una vez, ha estado roncando - respondió Ethan
- Bueno, pues es hora de que ustedes hagan lo mismo. Así que apaga esa lap y a la cama los dos. Vamos Alex, tu igual deja esa tablet, mañana sigues jugando.
- ¿Que? ¡Espera! ¡Déjame terminar este nivel! - me pidió el microbio sin despegar los ojos del juego - ¡No tardó más de cinco minutos!
Rodé los ojos ¿que son cinco minutos? Tampoco puedo ser un hitler malo y exigente, podía esperar unos minutos.Iba irme a dar una vuelta con las niñas pero vi que el cuarto estaba hecho un verdadero desastre. Ropa tirada, los dos escritorios que tenían estaban con un montón de cosas encima, había envolturas de frituras tiradas en el piso, zapatos por todos lados. La ropa doblada que les había dado solo la había metido Ethan, la demás seguía en los burós a un lado de sus camas, que igual eran un desastre.
Suspire.
- Este cuarto está hecho una verdadera asquerosidad - regañe.
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La herencia de los Robertson
Teen FictionLa vida puede ser algo curiosa. Dicen las personas que nunca dejas de conocer a tu familia, y nadie se lo había tomado tan literal como los Robertson, que un día sus vidas dan un giro inesperado para finalmente unirlos a todos en una sola pieza. Aho...