Ocho

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—¿Acampar en la playa? ¿Pretender ser personas distintas por un día? ¿Hacer justicia por el vídeo de Kiwi? —decía Normani mientras leía toda aquella lista.

—Debes aceptar que han pasado meses y sigo sin entender el concepto del vídeo. —dijo Lauren encogiéndose de hombros.

—Bueno, llevas la razón en eso pero ¿Realmente crees tener la libertad suficiente como para cumplir con todo esto? Lauren, no te dejan ni siquiera venir a dormir a mi casa. —dijo Normani bebiendo de su gaseosa enlatada.

Aquel día se encontraban en el balcón de la habitación de Lauren, quien se encontraba buscando un buen outfit para la ocasión, pues saldría con la morena.

—Bueno, honestamente la última vez que pedí permiso para eso fue hace como... ¿Un año? Ni siquiera lo recuerdo. —dijo la ojiverde mientras se ponía sus aretes.

—Esa chica... Camila... Honestamente te está haciendo vivir tu vida como una adolescente normal. Yo llevo tratando de hacer eso desde que tienes catorce y ¡Pum! Llega ella hace menos de dos meses y te animas a salir de tu casa. Increíble. —dijo Normani pasándole una chamarra de mezclilla a Lauren.

—Bueno... Camila es especial, supongo. —dijo Lauren sincera.

—Oh demonios, justo en mi corazón. —dijo Normani dramatizando con una mano sobre el pecho, haciendo reír a Lauren.

—Es que... Es preciosa, de verdad. —dijo la ojiverde mientras sus mejillas se tornaban carmesí.

—¡Oh Dios! ¿Acaso te gusta! Claro... ¡Como no lo noté antes! —dijo Normani.

—¡No! Es mi amiga... —dijo la ojiverde tratando de corregirse.

—Claro... Y pronto encontraré a alguien con quien poder ver todos mis DVD's de Beyoncé.

El claxon de un auto se escuchó y Lauren se asomó por el balcón, viendo a Camila fuera del auto y saludándola con una mano.

—Bueno... A decir verdad es muy bonita.

—¡Normani!

Y entonces Lauren comenzó a apresurarse, tomando su pequeño bolso en donde guardo varias cosas esenciales. Bajo en compañía de Normani las escaleras hasta llegar a la sala, donde una Camila muy sonriente las esperaba.

—¡Camila! —dijo Lauren abalanzandose sobre la morena, quien la recibió con los brazos abiertos.

—Ojitos. —dijo Camila con una sonrisa.

Un flash de pronto las hizo exaltarse y separarse de manera rápida. Normani les había tomado una foto con su cámara Polaroid.

—¿Q-qué fue eso?... —preguntó Camila.

—Es solo una foto. Hola, me llamo Normani y Lauren me habla de ti 24/7. —dijo Normani extendiéndole su mano a Camila, quien le recibió el saludo.

—Ella es mi vecina, Mila... —dijo Lauren añadiendo el dato.

—Mucho gusto. —dijo la morena de manera amable.

Lauren fue a avisar a sus padres que saldría con Camila, los cuales accedieron por el simple hecho de que ya conocían a la morena pues iba muy seguido a la casa. Normani se fue de casa de Lauren con la excusa de tener que ver el maratón de Pretty Little Liars y casi golpea a Camila por hacerle un pequeño spoiler.

—Siento mucho lo de Normani, pero es realmente molesto que des spoilers. —dijo Lauren ya adentro del auto de Camila, quien conducía un Mustang rojo de los 80's.

—Realmente es más como un instinto, no lo pude evitar. —dijo Camila encendiendo el auto.

Según el acuerdo, los puntos de la lista serían acordados en base a la situación. No sé forzaría a cumplirlos, simplemente así se harían cuando el destino lo quisiese, y ese día no había plan alguno, así que era momento de improvisar.

—Oye, ¿Que haremos hoy? —dijo la morena conduciendo.

—No lo sé, honestamente tengo hambre. —dijo Lauren.

—¿Tacos? —dijo Camila y Lauren negó con la cabeza.

—Sigue conduciendo. —dijo Lauren mirando su teléfono.

La noche caía y las calles de Wetport City estaban mojadas, producto de una ligera lluvia. Por la calle en donde conducía Camila, un anuncio neón llamo la atención tanto de ella como la de Lauren.

—¿Que tal ahí? —dijo Camila y Lauren asintió en acuerdo.

Después de haber estacionado el auto, bajaron de este y la morena pago el parquímetro. Se dirigieron hacia la entrada de aquel lugar y sorpresivamenre se toparon con una especie de cafetería-bar ambientada en los años 90's. Vieron una mesa para dos libre y fueron hasta ahí, tomando asiento.

—Linda chaqueta, Halcones de Wetport. —dijo Lauren observando detenidamente la chaqueta.

—Fuí a ver a Shawn jugar, además del patriotismo hacia mi escuela claro. —dijo la morena.

—Dentro de dos días tengo exámen con Olivia y no he estudiado nada. —dijo la ojiverde mientras observaba a una mesera atenderlas.

Lauren tomaba clases en casa por decisión de sus padres, y al paso de los años se había acostumbrado. Camila de vez en cuando interrumpía las clases de la ojiverde solo por que ella se lo pedía. Después de que Lauren pidiese un sándwich especial y Camila se limitará a pedir una malteada, se dispusieron a esperar, aunque a la morena le llamo la atención un anuncio visible en las pantallas del establecimiento.

—Laur... Iré al baño. —dijo Camila parándose de su asiento.

—¿Te acompaño? —preguntó Lauren y Camila se negó, yendo sola.

Lauren esperaba mirando su teléfono para distraerse y entonces sintió como las luces se atenuaban un poco, dirigió su mirada a una de las pantallas que había y entonces leyó:

"Noche de Karaoke"

Las pantallas dieron un cambio para proyectar pronto la letra de una canción que al parecer, la mayoría de los presentes se sabían ya que el lugar se llenó de aplausos y chiflidos.

"What you want
Baby, I got it
What you need
Do you know I got it
All I'm askin'
Is for a little respect when you get home"

Lauren quedó boquiabierta al mirar a Camila abrirse paso por las mesas con una confianza demencial y un micrófono en la mano cantando como toda una profesional. Los presentes aplaudían al ritmo del karaoke e incluso grababan aquella improvisada presentación, Camila bailaba de manera divertida y tuvo el atrevimiento de subirse a un asiento para seguir cantando y entonces señalar a Lauren, quien incluso tuvo que acomodarse sus gafas más de una vez. Se quitó la chaqueta y la tiró por algún lugar sin dejar de bailar.

R-E-S-P-E-C-T, find out what it means to me! R-E-S-P-E-C-T take care, TCB... —cantaba Camila mientras los presentes la ayudaban a corear.

La canción termino y entonces el lugar se llenó de nuevo de ruidosos aplausos , Camila había terminado su show. Recogió su chaqueta del suelo y se dirigió de vuelta a su lugar junto a Lauren.

—¿Que carajos fue eso? Demonios, ¡Eres increíble! —dijo Lauren abrazándola.

—Uno de mis tantos talentos. Jack Dowson aparte de pintar bocetos también era un buen cantante. O eso creo. —dijo Camila bebiendo de su malteada.

Al final, la comida resultó correr por cuenta de aquel bar por la divertida presentación de Camila, además de que lea invitaron a que volvieran cuando quisieran.

—Hey, toma. —dijo Camila poniéndole su chaqueta a Lauren por el templado clima que había.

—Pero ¿Y tú? —preguntó Lauren.

—Traigo manga larga puesta, además tengo otra en casa. Esta es tuya. —dijo Camila subiendo al auto mientras la ojiverde repetía su acción.

—Wow, gracias. —dijo Lauren en agradecimiento.

—De nada, te vez preciosa en ella. —dijo Camila encendiendo el auto y las mejillas de Lauren.




Esa canción me da feels por qué seguimos sin ver la audición de mi bb ioro

Ojos de RegaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora