Amor: (del latín amor, -ōris), masculino. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
Camila conducía con nervios y emoción hacia el hogar de su novia, quien probablemente debía estar esperandola... Ansiaba hacerle aquella sorpresa a Lauren.
No por San Valentín.
No por su cumpleaños.
Ni por cualquier otra fecha que hubiese que celebrar.
Ansiaba hacerlo simplemente por qué la amaba, de verdad la amaba y no le importaba nada más. La morena recordaba como tiempo atrás rogaba por sentir que era el amor, quería estar enamorada y quería amar a alguien más. Si bien tenía a Shawn y Dinah con ella, necesitaba a alguien más... Necesitaba sentir algo más.
Después de haber vivido con cáncer, pensó que su tiempo de vida se había acabado... ¡Qué tristeza le daba no haber experimentado el amor al menos una vez! Tanto que sus amigos le contaban sobre el. Sin embargo, los milagros médicos si existían, y el oncólogo que la trató lo sabía con claridad.
Camila era un milagro andante.
Pero en fin, eso era historia pasada... ¿Lo era? El dolor que se presentaba cada vez con más frecuencia y fuerza, y el hecho de que Camila haría lo necesario para ocultar aquello no ayudaba mucho a descubrir si había tenido una recaída.
* * *
Lauren estaba esperando en la sala de su casa a su novia, quien se había retrasado ya por diez minutos.
Como no sabía que ponerse y la tarde era algo fresca, decidió vestirse con unos shorts blancos y una camiseta negra sin mangas con un estampado de alguna banda de rock clásica. Por supuesto, no olvidaba su chaqueta de los Halcones de Wetport, sería un pecado que la olvidase.
Lauren era... Feliz. Después de haberle diagnosticado glaucoma hace algunos años y aprender a vivir con ello, al fin podía decir que era feliz de manera sincera. Su mundo se derrumbaba de a poco y entonces llegó Camila a armarlo de nuevo pieza por pieza. Su dependencia a la morena llegaba a tal punto que a veces llegaba a asustarle. ¿Camila seguiría queriendola cuando ella fuera ciega? ¿Camila amaría a una ciega? No lo sabía.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando un conocido claxon la hizo regresar a la realidad. Tomó su bolso y salió por la puerta hacia el auto de la morena, quien la miraba fijamente con una sonrisa en el rostro.
—Hola, Lauren. —dijo Camila quien la espera frente al capo del auto.
—Hola, Camz. —dijo Lauren mientras pasaba sus brazos sobre el cuello de la morena mientras esta se aferraba a su cintura. Se dieron un tierno beso y después ambas subieron al auto.
—¿A dónde vamos? —preguntó una curiosa Lauren.
—No te lo quería decir pero, esto es un secuestro. —dijo Camila haciendo reír a Lauren.
—Claro que sí. —dijo Lauren con una sonrisa.
—Por supuesto, no llegarás a tu casa hasta mañana así que, consideralo un secuestro.
Conforme Camila conducía, más curiosa estaba Lauren. El camino pasaba de ser algo urbano a tornarse más rural, con más naturaleza presente y un silencio que llenaba de paz. Pronto subieron una cuesta y estaban sobre un pequeño intento de montaña.
—Bien, llegamos. —anunció la morena apagando el auto y saliendo de este.
Lauren no dijo nada, simplemente bajo y contempló el bello paisaje natural que la rodeaba. Árboles por doquier, el canto de los pajarillos lugareños y el sonido de un arroyo corriendo por debajo de él pequeño intento de montaña.
—Ojitos, ven acá.
Y entonces Lauren se dirigió hacia la voz de Camila, topandose con una gran sorpresa. Un mantel sobre el piso, una canasta sobre este y varias cosas también por encima de este. Eso era un picnic sin dudar.
—¡Camila! Dios, esto es tan... No tengo palabras y-y... —decía Lauren pero de pronto se vio interrumpida.
—Shhh... —susurró Camila mientras la callaba con sus dedos. —¿Puedo hablar? —Lauren asintió en acuerdo.
Camila aclaro su garganta y comenzó a hablar.
—Realmente esto no es un picnic al 100%... Quiero decir, solo es sushi con Coca-Cola y una Nutella con fresas así que... —comenzó haciendo reír a Lauren. —En fin... Lauren Michelle Jauregui Morgado, necesito decirte esto con suma urgencia: Te amo, te amo con todo lo que soy, te amo con cada fibra y célula de mi ser, tanto que a veces me llega a dar algo de miedo. Te amo, te lo digo hoy y te lo digo con seguridad y sin ninguna duda. Estoy verdadera, loca y profundamente enamorada de tí y ¿Sabes? Soy muy feliz con ello. Si alguna vez llegué a sufrir o estar triste, créeme que probablemente no recuerdo lo que es ese sentimiento por qué tú, tú eres todo lo que necesito para poder vivir... Te haz convertido en mi sexto sentido y en la mujer ideal para mí. Demonios, me gustas tanto. Me gusta que me gustes. Me gusta que seas la primera persona por la que me siento sentimental y físicamente atraída. Me gusta seas la primera persona por la que hago estás idioteces cursis. Simplemente me gustas tú, y si me lo permites... Quiero estar contigo, quiero permanecer contigo el tiempo que la vida nos lo permita, simplemente te amo y quiero estar junto a ti Lauren, ¿Es mucho pedir?
Lauren estaba hecha un mar de lágrimas y uno que otro moco que se escapaba de sus fosas nasales. Ni siquiera podía ver con claridad por lo cristalizados que estaban sus ojos y no podía creer todo lo que había escuchado.
—¿Me amas? —preguntó Camila.
Lauren río.
—¿Quieres saber si te amo? —Camila asintió aferrándose a la cintura de la ojiverde y escondiéndose en su cuello.
—Bueno... Tan solo mira como te miro, solo mira como me río de todo lo que dices por más estúpido que sea, solo mira la sonrisa que brota en mi cara cuando dices mi nombre o yo escucho el tuyo, solo mira como hago lo que sea para poder hablar contigo (hasta robarle internet al vecino por qué apagan el mío a las once) —detalló Lauren haciendo reír a Camila. —¡Carajo! Tan solo mira como me quedo embobada mirándote dormir o sonreír, tan solo mira como veo películas como Harry Potter solo por qué a ti te gustan, tan solo... Tan solo mírame ahora. Estoy aquí, amándote como tú me amas y profundamente enamorada de ti. Si aún así no crees que te amo, podrías entrar a mis pensamientos y ver que el 99% de ellos eres tú y solo tú.
Después de todas estas palabras intercambiadas, hubo un especial beso de por medio en donde los labios de ambas se conectaban perfectamente y se movían de la misma manera, de manera suave y cariñosa. Ese beso gritaba un "te amo".
—Espero que hayas traído bikini por que sin duda pienso arrojarte al arroyo más tarde. —dijo Camila.
—Por suerte lo traje. Traje todo lo que me pediste. —anunció Lauren.
—Perfecto.
—Oh rayos, me gustabas más cursi.
—¿Oh sí? Bueno, entonces te diré algo mejor.
—Dime, ojos color caca. —dijo Lauren el improvisado apodo que las hizo estallar a ambas en carcajadas.
—Tengo hambre. Vayamos a comer, ojos color moco.
yo ya no puedo con esto de ser universitario u.u
Apoyen la historia por favor, dejen comentarios o mínimo un favorito, con eso me doy por bien servida:(
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Ojos de Regalo
Fanfiction"Era un amor sumamente jodido pero sobre todo, sumamente ciego". Una humilde obra que te hará reír y tal vez, llorar.