CAPÍTULO 10

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Nara Ana

Mimi se fue a donde estaba Miriam y empezaron a bailar al ritmo de me rehúso y yo me estaba empezando a cabrear

Roi: ¿te pone Mimi o te pone mi prima?

-¿Qué dices Roi?

Roi: no dejas de mirarlas y no pareces estar de buen humor

De repente nos interrumpió Cepeda y yo lo agradecí internamente porque Roi me conoce demasiado como para mentirle

Cepeda: ¿Has invitado a Jadel?

-No ¿por?

Cepeda: esta en la puerta y dice que quiere hablar contigo

Salí a la puerta y efectivamente estaba Jadel.

-¿Qué quieres?

Jadel: te echo de menos

-Vete

Estaba intentado estar calmada y no ponerme a gritar porque entre esto y lo de antes. ¿Por qué me importaba tanto lo de Miriam? Dios no entiendo nada

Jadel: Vuelve conmigo por favor

-¿Estas de coña? Pirate ya en serio, deja de hacer el ridículo

Jadel: ven

Me agarró con fuerza del brazo e intente librarme de su agarre pero tiene mas fuerza que yo. Me llevó hasta una de las habitaciones de la casa.

-Jadel dejame

Me tiró contra la cama e intente gritar pero me tapó la boca con la mano.

Empezó a darme besos por el cuello y fue bajando y a la vez desabronchando primero el botón de mi pantalón y después el del suyo.

Estuvo asi un rato, hasta que empezó a bajarme la ropa y yo intentaba detenerle pero me tenía agarrada y tampoco podía gritar.

Por suerte soltó un poco su agarre, le mordi la mano con todas mis fuerzas y le di una putada en el estomago.

Conseguí gritar pero el se recuperó enseguida y volvió a agarrarme con mas fuerza, y esta vez entró dentro de mi, me quede paralizada suplicando mentalmente que apareciese alguien.

Narra Miriam

Mimi quería liarse conmigo, pero yo no tenía interés en ella, no podía dejar de pensar en Ana así que me libre de Mimi poniéndole como excusa que tenía que ir con Nerea que estaba sola.

De camino a donde estaba Nerea me encontré con Cepeda y le pregunté por Ana porque hacía rato que no la veía

-¿Sabes dónde esta Ana?

Cepeda: la vi subir con Jadel, estarán en alguna habitación reconciliandose

Algo no me olía bien así que subí a la planta de arriba a buscarla.

Empecé a abrir la puerta de todas las habitaciones hasta que topé con la que era. Y efectivamente no iba bien la cosa

Jadel estaba encima de Ana, mientras ella lloraba.

Quité a Jadel de encima de Ana y le metí una hostia, el intentó pegarme pero yo tengo más fuerza.

Los chicos escucharon el jaleo y al minuto tenía a Cepeda y a Raoul llevándose a Jadel, claro, después de haberle metido un par de hostias.

Sacaron a Jadel de la casa y echaron al resto de la gente, excepto a mis amigos y a los de ella.

Subieron a la habitación a ver que tal estaba Ana.

Narra Ana

En ese momento solo me apetecía morirme.

Les dije a todos que se podían quedar a dormir y aceptaron, Miriam estaba saliendo por la puerta cuando la frene

-Quedate a dormir conmigo, por favor

Miriam parecía pensativa pero acabó aceptando.

Cerró la puerta y se metió en la cama conmigo

Miriam: ¿no te pones el pijama?

-Sí, claro, acercamelo porfa, esta en el escritorio en el primer cajón

Me trajo el pijama y fue en dirección a la puerta

-¿A dónde vas?

Miriam: te dejaba espacio para cambiarte tranquila

Dijo ella algo nerviosa y sonrojada

-No seas tonta

Me puse el pijama y ella se quito los zapatos y la chaqueta que traía y se metió en la cama conmigo.

Apagó la luz, puse mi cabeza sobre su pecho y ella empezo a hacer circulos en mi brazo.

Levanté la cabeza y ella me miró,  gracias a la luz que entraba por la ventana pude notar como bajaba la vista a mis labios.

Me acerqué más y la besé

Sólo si es contigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora