KagaKuro - Futari De (Kiseki no Sedai: Daini no Sedai #1)

二十

Paso mi mano por mi rostro, sacando el sudor de mis ojos luego de escuchar el silbato del final de la práctica. Siento el sudor correr por mi espalda y jadeo ligeramente. Me enderezo y apoyo mis manos en mis caderas, antes de tomar una profunda respiración. El ritmo de mi corazón se ralentiza mientras camino con los demás hacia los camerinos.

Abro mi casillero y saco una toalla y una muda de ropa, antes de cerrar la puerta. Por el rabillo de mi ojo puedo ver una figura, y me sobresalto un poco, antes de darme cuenta de quién se trata.

—¡No hagas eso! —, le digo con mi corazón latiendo a todo ritmo una vez más —. ¿Qué estás haciendo aquí? Pensé que estarías en casa de tus padres.

Tetsuya oculta sus emociones una vez más, pero puedo ver su diversión claramente en sus ojos.

—Pensé que mejor venía a buscarte para que vayamos juntos.

—Está bien —, le digo. Me acerco a él, y atraigo solo su cabeza hacia mí para poder besar su cabello —. Mi madre dijo que quería ir también.

—La mía igual dijo eso —. Dice Tetsuya agarrando mi camiseta con sus puños —. Estoy un poco nervioso.

—No lo estés —. Le digo, pero puedo sentir como mis nervios están de punta ante lo grande que será esto para nuestras vidas —. Estaremos los dos juntos, y las abuelas tendrán la oportunidad de darle la primera mirada a su nieto o nieta por venir.

—No creo que quiera saber el sexo del bebé aún —. Respiro el aroma de su cabello, y lo beso una vez más, antes de alejarlo un poco, y mirar directamente a sus ojos.

—Está bien. Yo tampoco quiero saberlo aún. Debe ser mejor la sorpresa cuando nazca.

—¿¡Kuroko!? —La voz en grito del capitán hace que nos separemos, pero no alejo mis manos demasiado de Tetsuya, quien se estremece ligeramente antes de volver a esconderse tras su máscara de insensibilidad —. ¡Hace tanto tiempo que no te veíamos por la práctica!

—Hace un tiempo que no nos vemos, capitán.

Me alejo de Tetsuya con mi cambio de ropa, y voy a las duchas. Me desnudo rápidamente y entro en el agua caliente. Me lavo rápidamente. Tetsuya está acostumbrado a los chicos, pero ahora está embarazado, y es mi deber proteger a ambos. Puedo sentir mis instintos pateándome por dejarlo solo, pero sé que estará seguro con los chicos.

Cierro el paso del agua, agarro la toalla y me seco. Me visto a la velocidad de la luz, y salgo una vez más a los casilleros. Tetsuya está enfrascado en una conversación con los chicos, y yo me acerco a él por su espalda. Lo abrazo a mi pecho en cuanto puedo, y mis manos caen rápidamente a su vientre abultado.

Los ojos de todos se mueven en esa dirección por primera vez, y puedo ver lo felices que están por nosotros en las sinceras sonrisas que muestran.

—Lo siento, pero ya tenemos que irnos —. Les digo, y tomo la mano de Tetsuya luego de hacer una ligera reverencia de despedida para todos. Escuchamos las despedidas mientras caminamos hacia el exterior.

—Sabes que podríamos haber esperado un poco más.

—Nuestras madres estarán acá en un momento, y no quiero hacerlas esperar.

Tetsuya suspira, y sigue caminando con la mirada hacia el frente. Pero puedo ver una ligera sonrisa en su rostro, y mi corazón bombea con el conocimiento de que, en realidad, está feliz.

En la puerta de la escuela, mi madre y la suya están hablando, apoyadas en un vehículo familiar.

—¿Qué hacen los cuatro aquí? —Digo en cuanto nos acercamos lo suficiente para que todos puedan oírnos.