¡hola gente!
lectores/as:(la miran mal y le lanzan antorchas)
escritora:(error, error, error.....dueña de este libro ha sido eliminada)
XDDDDD
Ok no, mis queridos lectores, discúlpenme por no haber subido capítulos durante estos 19 días, pero, ya sabeís y seguro que muchos de los que escriben me comprenderán, la inspiración no me llegaba para nada sumando que estuve enferma y bla, bla, bla....en fin solo pido disculpas por el retraso, y ahora sí, ya los dejo de joder y disfrutar del capítulo XD.
Bloody Painter
Después de que mi pincelito terminara su último entrenamiento decidimos dar un paseo por la ciudad más cercana ocultos bajo nuestra apariencia humana y, ya que estábamos, comprar unos ingredientes que a Slenderman le hacía falta para el almuerzo. Por propia seguridad, según el insecto palo, fuimos acompañados por Heder, Sadgirl y Soulater y me hacía gracia por que me daba la impresión de que el hombre alargado los tiene como guardaespaldas o algo por el estilo, no me dí cuenta de que Blood Geiko me llamaba la atención y la miré a esos ojos marrones que me recordaban al dulce chocolate.
-¿Qué te pasa Bloody? llevas distraído desde esta mañana-me dijo preocupada mirándome a los ojos.
-Si molestamos, yo no tengo ningún problema en pirarme de aquí, total, no me importa para nada si vuestras vidas se joden en el purgatorio-dijo Sadgirl con su negatividad de siempre.
-yo no opino lo mismo de cuando nos tendieron la trampa de la captura de Evangelina-dijo Soulater, yo sonreí para mis adentros, ya iba a empezar con sus payasadas.
-¿eh? ¿qué pasó después de que me capturaron?-preguntó Blood curiosa.
-nada que no te importe-soltó Sadgirl de golpe.
-Se sintió muy mal cuando pasó eso, la pobrecilla no paraba de llorar por lo culpable que se sentía-dijo Heder sonriendo divertido y de brazos cruzados mientras mantenía un ojo abierto.
-¡Eso no es cierto! ¡Estaís mintiendo!-gritó Sadgirl sonrojada y de brazos cruzados.
-jajajaja, tranquila Sadgirl, de todas formas, agradezco tu preocupación por mí, después de todo siempre he sabido que detrás de esa bordería y enfado se escondía una fantasma muy amable y simpática-dijo Blood Geiko con una suave sonrisa, Sadgirl, que la miró por un momento, se sonrojó y se puso de espaldas molesta.
-S-Si claro, lo que tú digas, ¿vamos a comprar o vamos a quedarnos aquí parloteando?-preguntó evitando el tema.
-Sí, lo mejor será comprarle eso al jefe palo-dijo Soulater caminando hacia el supermercado junto con Blood Geiko y conmigo.Me paré y miré que Heder hablaba con Sadgirl de algo, al juzgar por la cara de la fantasma sabía que algo no andaba bien, después les preguntaría ya que a mí los secretos no me gustaban para nada y me parece que ya hemos tenido suficientes por ahora.
Más tarde salimos de una librería corriendo a toda pastilla, nos atrasamos viendo los libros que tenían en venta debido a que a Evan le gustaba leer y no nos acordamos del almuerzo, aún era mediodía así que habría tiempo de sobra, cruzamos el bosque esquivando los árboles hasta llegar a la mansión, nos detuvimos a coger aire mientras reíamos por nuestras caras, al entrar, nos esperaba alguien al que menos queríamos encontrarnos, Laughing Jack, Sadgirl enseguida se desvaneció tan rápido que pude oír la puerta de su cuarto cerrarse de golpe, ya que fue la primera a la que su cara encontró, Heder y Soulater también se largaron en un visto y no visto dejándonos a mí y a Blood Geiko en el pozo. Después de la reprimenda decidimos que cada uno tendría su tiempo libre, yo me dediqué a dibujar el paisaje que teníamos, la sangre se me estaba agotando así que pronto tendré que volver a cazar para repostar. Estaba tranquilo, dibujando el rostro de mi amada y como si de un deseo se tratase, esta apareció detrás de mi.
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Uno De Ellos
ParanormalEvangelina ahora es una creepypasta y al enterarse de que su madre fue asesinada por Zalgo decide formar parte de los creepys. Slenderman y los demás no tendrán más remedio que entrenarla y ayudarla a cumplir su venganza, sin percatarse de que conta...