Evelyn
El cuerpo que encontramos era nada y nada menos que el propio Soulater, me acerqué a él, me puse de cuclillas con mi abanico tapando mitad de mi rostro y me dediqué a estudiar el motivo de su muerte, por el corte en su espalda y el enorme agujero que se apreciaba en su pecho pude deducir que tuvo que utilizar su máximo potencial para poder acabar con los asesinos algo que por desgracia para él no le sirvio de mucho, me fijé detenidamente en los árboles, muchos de ellos estaban partidos a la mitad, otros tenían cortes muy finos y delicados. Miré otra vez el cuerpo del cazador y aprecié una nota manchada en sangre al lado de su cabeza, la cogí con delicadeza y la guardé en mi kimono, me levanté, comenzé a examinar la escena y el cadáver. Árboles partidos a la mitad y otros con cortes delicados, corte en la espalda y un agujero transpasando el pecho de Soulater, esto solo podía significar una cosa, lo pillaron por sorpresa y por los signos que el cazaalmas presentaba, quién lo atacó fue Dark Letter y tal vez Offenderman o Splendorman.
¡¿Quieres dejar de examinar todo y llevar a mi amigo a la mansión?!
Me chilló Evan, la miré y le dediqué una sonrisa burlona con una mirada de picardía.
-Creo que esta tarea te convendría mejor a ti, no pienso manchar mis blancas y delicadas manos de la sangre de este.....joven-dije, antes de que Evan volviera a rechistar intercambié el cuerpo y no volví hablar con mi opuesta...ya que, tal y como sospechaba, ese demonio cuernudo andaba tramando algo.
Blood Geiko
Maldita Evelyn!!! Tuve que arrastrar el cuerpo de Soulater yo solita por que a la dama le daba cierta repugnancia llevarlo, en cuanto llegué, Slenderman enseguida cogió a Soulater y lo llevó a su laboratorio para ver si podía hacer algo, Jane al enterarse, derramo lágrimas por doquier y sin venir a cuento cogió un cuchillo y fue directo hacia Jeff, ambos tuvieron una buena pelea hasta que llegó Nina y Heder separando a ambos.
-!!MALDITO ENFERMO MENTAL, TUVISTE QUE HABER SIDO TÚ, SE NOTABA A DISTANCIA QUE ESTABAS CELOSO, CONFIESA!!-gritaba Jane mientras era sostenida por Nina.
-¡¿PERO QUÉ MIERDAS SUELTAS PLANA?! ¡¡¡AUNQUE TUVIERA CELOS DE SOULATER NO LO MATARÍA, GILIPOLLA!!!-le gritó esta vez Jeff haciendo lo posible por zafarse del agarre de Heder, este, sin más opción, tuvo que darle un codazo en la cabeza lo cual hizo que Jeff cayera desmayado. Al caer la noche, todos estábamos en nuestros respectivos cuartos, Slenderman aún seguía examinando el cuerpo de Soulater ¿y mientras qué hacía yo? pues estar sentada en el borde de mi cama pensando en todo lo ocurrido. Oi que alguien tocaba mi puerta y tras ella se asomó Heder que me saludó con la mano y me preguntó si tenía el permiso de pasar para hablar conmigo, yo se lo di con una ligera sonrisa, al entrar, caminó hasta mi escritorio y se sentó en la silla rotatoria.
-¿de qué querías hablar?-le pregunté con intriga. Él me miró algo...¿apenado,por qué será?.
-Verás...resulta que...mientras buscaba a mi hermo..di-digo...ejem...invocadora, me encontré con Bloody Painter...
-!Oh qué bien!-dije alegre.
-no te alegres tanto...por que lo encontré muerto-dijo Heder triste pero serio a la vez. En cuanto dijo "muerto" noté cómo mi corazón dejó de latir, estaba paralizada y mis ojos enseguida comenzaban a cristalizarse.
-al examinar su cuerpo tenía cortadas muy profundas y una gran marca de garras tanto en su cara como en su pecho-me explicó, cada palabra que decía sobre el cadáver de mi amante cada trozo que mi corazón se caia. No pude aguantar más y llore, esto no podía estar pasando, mi amor, el único que estuvo a mi lado en mis momentos de tristeza y en mis momentos de alegría ha sido asesinado.
Pasaron varios días, nos enteramos de que Sally también desapareció y Slenderman nos mandaba a buscarla sin rendirse en ningún momento, Heder seguía buscando a Sadgirl sin obtener resultado alguno mientras que Jane y yo no salíamos de nuestro cuarto para nada, ambas estábamos destrozadas. Mientras que los demás buscaban a los supuestos desaparecidos, yo miraba a la nada, hacía días que no comía nada pero no me importaba.
-Evan-
Me llamó Evelyn, pero la ignoré.
-Evan!-
Seguía ignorándola, no me apetecía nada escucharla.
-EVAN!!!-
-¡¿QUÉ COJONES QUIERES?! !NO TENGO GANAS DE ESCUCHAR TUS ESTÚPIDECES, ENTIENDES!-le grité furiosa, ella me miró con seriedad y frialdad.
-¿oh, entonces no quieres saber de la nota que encontré?-
-¿Qué?-le pregunté yo esta vez, ella me señalo la camisa con imitación al kimono japonés, la miré por un segundo y luego me levanté directa a la prenda, justo como Evelyn dijo, había una nota manchada en sangre, volví a mirar a Evelyn la cual me "invitaba" a que la leyera, yo dudosa, la abri y comencé a leerla.
Si te entregas sin oponer resistencia, dejaremos de matar a tu querida familia y es posible que le devuelva la vida a tu amante, pero si te niegas podríais encontraros con la maravillosa sorpresa que os tengo preparados a tí y tus amigos. Oh, dile a Heder de mí parte que más le vale que se preocupe por la persona de la cual está empezando a enamorarse.
Con cariño y no tanto, Dark Letter.Arrugé el papel con furia y lágrimas en mis ojos, al verme al espejo noté que mi ojo derecho se volvió negro con las pupilas de color fucsia brillante, de él caían gotas de sangre, pero por otro lado, mi ojo izquierdo tenía el ojo de Evelyn.
-supongo que ya es hora de darles una verdadera elección..¿no crees mi querida maiko?-me preguntó Evelyn con una mirada de maldad.
-Sí, si ese hombre me quiere solo a mí, eso quiere decir que mi hora de vengar a mi madre y a Bloody ya ha llegado-dije mirándome en el espejo, sonreí con maldad, al igual que Evelyn.
-Soy Blood Geiko, la geisha del atardecer...¿cómo te gustaría empezar la tortura.....Zalgo?/ Soy Blood Geiko, la geisha del atardecer...¿cómo te gustaría empezar la tortura...Zalgo?- dijimos al unísono.
Pd:"Maiko", es aprendiz de geisha mientras que "Geiko"es geisha en japonés.
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Uno De Ellos
ParanormalEvangelina ahora es una creepypasta y al enterarse de que su madre fue asesinada por Zalgo decide formar parte de los creepys. Slenderman y los demás no tendrán más remedio que entrenarla y ayudarla a cumplir su venganza, sin percatarse de que conta...