Diez

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Nos encontramos sentados en una de las mesas cerca de la cancha, hay uno que otro puesto de comida chatarra pero nada más, una que otra decoración solo para aliviar el ambiente y música completamente aburrida, Frank habla sobre algo que desconozco, ni siquiera le estoy prestando la más mínima atención a lo que sucede a mi alrededor, solo puedo fijar mi vista en la mata de cabello castaño que está frente a mí, le veo sonreírle a la rubia, ambos están sentados y ella toma sus manos de vez en cuando, una corriente de molestia se desliza por toda mi espina dorsal dejándome un amargo sabor de boca al ver como él le sonríe y como ella se acerca a él, no me extrañaría que Tyler sintiera algo por la chica, es delgada, es rubia tienes ojos azules brillantes y una hermosa sonrisa y lo más importante que es mujer, en los parámetros establecidos por la educación que Tyler ha recibido es conocido ese tipo de contacto y esto me hace darme cuenta que la tengo difícil, ser un hombre complica las cosas, me siento decaído ante la idea que en cualquier momento su curiosidad por experimentar se puede acabar y yo me voy a quedar sin poder hacer nada.

— ¡Josh! — Debby me habla y me veo obligada a desviar la mirada de donde se encuentra el castaño para ahora verle a ella — a mi amiga le pareces atractivo, me ha dicho que no te diga pero podrías ir e hablarle. — ella se encoge de hombros un poco desentendida del tema, como si lo hiciera sin importarle cuál sea mi respuesta ante la declaración, Ryan me codea y no puedo evitar reírme «¿Por qué no?»
— ¿Quién es tu amiga? — paso mi mano por mi mentón acariciando levemente la piel, Debby ríe complacida.
— Es la chica de cabellos negros que está allá. — con su dedo índice señala a una chica un poco baja, asiento con mi cabeza, me levanto de la mesa, poco a poco camino hasta la chica de cabellos negros, lleva el cabello suelto por lo que puede apreciarse su largo, el flequillo le da un aspecto muy tierno, de piel blanca similar a la mía, con los labios pintados de rojo que bien podrían pasar por naturales, entre más me acerco puedo ver que está maquillada de una manera muy  sutil, me sonríe entre más me acerco a ella, se acomoda el cabello tras la oreja de una forma coqueta y yo le sonrío radiante.


[…]


Le miro los ojos azules brillantes, se acomoda el cabello tras la oreja y se coloca de nuevo sus broches en forma de flores sobre su cabello rubio y liso, le sonrío por compromiso, Jenna ha sido una de mis mejores amigas pero ahora las cosas están cambiando a mis padres se les ha ocurrido la genial idea de que ella y yo deberíamos salir solo porque es hermana del padre que ofrece la misa en la iglesia a la que vamos, todo marchaba bien con ella pero ahora me coquetea y con el pasar de los días me di cuenta que lo de Mike fue hecho con una doble intención, mi padre fue muy claro y me dijo que incluso ya había hablado con la familia de Jenna quienes al igual que él se mostrarían miy complacidos de verme salir con su hija, Jenna es hermosa es todo lo que cualquiera querría pero yo no pienso en eso… no ahora, alguien más ocupa mi cabeza estos días. Mis padre siempre han sido muy entrometidos respecto a mi vida, siempre quieren saber que hago y con quien estoy a cada momento incluso como me comporto cuando ellos no pueden verme, a veces quisiera irme lejos y poder vivir como a mí me gustaría, pero al final del día son mis padres y no puedo solo alejarme y esconderme de ellos.

— Estás muy distraído ¿Sucede algo, cariño? — suelto un suspiro frustrado, ella toma mi mejilla con su mano fría, cierro los ojos ante el tacto pero al instante los abro, no soporto que Jenna me trate así, con una doble intención, por mucho que la quiera no puedo verla como algo más y debo decírselo no voy a permitir que mis padres pongan palabras en mi boca que yo nunca he dicho.

— Jenna — tomo su mano entre la mía y la alejo de mi rostro, ella me mira atenta — no sé que le hayan dicho mis padres a los tuyos pero… yo en serio no podría verte como algo más. — ella abre sus ojos sorprendida y luego se ríe.
— Por un momento pensé que lo que ellos habían dicho era cierto ¡Joder! — se ríe y relaja los hombros, le veo sin poder entender que es lo que pasa por su cabeza, ella suelta mi mano y recoge su cabello en una coleta mal hecha. — mis padres me dijeron que tú le habías confesado a tus padres que estabas enamorado de mí, y me dijeron que tenía que comportarme de manera educada contigo ¡Pensé que te había perdido! — exclama, me abraza mientras se sigue riendo levemente.

La familia de Jenna es similar a la mía, casi idéntica manejan la misma creencia y el mismo estilo para educar, conozco a Jenna desde hace años, desde que tengo once años quizá, ambos estamos conscientes de que nuestras familias manejan nuestra vida de una manera implícita, siempre cubierta por un "amor" que promete que siempre quieren nuestro bien, los padres de Jenna siempre le presionan para que salga con un buen chico al igual que mis padres siempre me presionan para que salga con una buena chica… lo que ellos no saben y tampoco Jenna sabe es que ahora lo que único que se me antoja es salir con un chico en especial.

Le confesé a Josh que quizá sí me atraen los chicos, con el pasar de los días voy aceptando ese hecho pero no es sencillo, tengo miedo, demasiado, tener una relación con un chico no es sencillo, no de donde vengo, mi familia no lo aceptaría, no, ni en miles de años, pero es algo que no puedo ignorar y ya, no puedo tan solo ignorar el hecho de que me atrae Josh «no cuando él me ha dicho que siente lo mismo» pero no puedo evitar pensar en el futuro si Josh y yo llegáramos a tener algo como una pareja implicaría que en algún momento querría pasar con él, en pocas palabras llevar una relación normal pero si mis padres se enteraran de eso sería una catástrofe, ni siquiera sé que hacer exactamente, quizá estoy pensando mucho las cosas.

Religious [Joshler]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora