You know, I know [MYG×PJM] (Editando).

Epílogo ~You Know, I Know.

Con el paso del tiempo, entre más salga una persona lastimada, más comienza a tener miedo de volver a enamorarse ¿no?
El caso de JiMin fue parecido pero diferente. Él se enamoró de alguien una y otra vez, le dio segundas, terceras y hasta cuartas oportunidades. Una y otra vez, ese ciclo vicioso y dañino se repetía hasta que por fin lo pudo rechazar, lo pudo sacar de su vida y aunque tardó mucho en olvidarlo lo logró.
Una vez más se encontró en esa situación, en la situación de estar enamorado; vaya que el corazón es traicionero ¿verdad? Aquel chico de mirada gatuna, personalidad rebelde, ese chico malo y egoísta ese mismo fue quien le robo el corazón, quien se adueño completamente de los pensamientos del menor.

A pesar de ser polos completamente opuestos, pero no de esos que se atraen no, de esos que no se pueden juntar pero quieren hacerlo. A pesar de ser así, lograron sobre llevarse el uno al otro y ahora forman una linda pareja.

-¡JiMin! ¿Dónde pusiste la comida de Holly?

-¡En la alacena! -Gritó desde la cocina, pues estaba preparando el desayuno.

Su casa era un desastre todo porque recién se acababan de mudar, pasaron de un pequeño departamento a una casa de dos pisos, algo grande para dos personas y una mascota linda pero era mejor que el departamento apretujado en el que anteriormente vivían.

Han pasado cuatro años desde que ellos fueron novios, dos años desde que JiMin salió de la preparatoria para entrar a una de las academias más prestigiosas de Seúl y que YoonGi entró a la Universidad y exactamente ocho meses desde que decidieron vivir juntos. En esos ocho meses, tuvieron peleas las cuales supieron resolver perfectamente.

-Bebé, ya me voy a la Universidad y después al trabajo llegaré como a las 19:00 o 20:00 horas. Te amo. -Besó los labios del ahora ya peligris.

-Sí claro, yo en unos minutos iré a la Academia... cuando regrese tendré que ir a la cafetería así que ¿quién atenderá a Holly? -Los dos jóvenes miraron a la pequeña perrita quien los veía sacando su lengua y moviendo su colita de un lado a otro.

-Creo que tendremos que hablarle a Nam y Jin hyung... -Propuso el mayor.

-Mmm... está bien. -Tomó su celular y les llamó.

~💛~

Luego de un largo día de estudios y trabajo, los dos jóvenes llegaron a casa agotados.

-Hola Jin y Nam hyung. -Saludó JiMin mientras colgaba su saco en el perchero que estaba junto a la puerta.

-¡Hola JiMinnie! -El mayor de todos se acercó y aplastó las mejillas del menor.

-¿Cansado?

-Sí Nam hyung y mucho. -Hizo un puchero. -Debí quedarme en casa de mis padres donde me darían todo gratis. -Rió.

-Me ofendes Park. -Habló YoonGi desde la sala de estar.

-Lo siento.

-Te dije que no debías de trabajar. -Reclamó YoonGi.

-Al menos debes de agradecernos. -Dijo Nam.

-¿Por qué?

-Recogimos la casa y cuidamos de su pequeña perrita y además...

-¡Sorpresa! -Gritaron Tae, HoSeok y JungKook mientras salían de la cocina.

-¡Woaw! ¡Chicos! -El menor sonrió de oreja a oreja, estaba muy feliz por su visita pero faltaba alguien. -¿Y Nora? -Miró a HoSeok quien parecía triste por su pregunta.

-Ella... y yo... terminamos hace unos años.

-L-lo siento...

-No te preocupes, ahora tengo a alguien más. -Dijo feliz.

-Oh, ¡felicidades!

-¡Venimos a festejar! -Gritó TaeHyung mientras sostenía una botella de champán en su mano.

-Estoy cansado, chicos.

-Dejen descansar a mi pequeño JiMin... -Dijo YoonGi mientras se acercaba a Park y lo tomaba de la cintura acercándolo más a él.

-¡No sean aguafiestas! -Regaño JungKook.

HoSeok puso música y todos comenzaron a alterarse, bailaron y bebieron hasta que amaneció. La casa volvió a quedar patas arriba, lo bueno era que ese día era viernes al día siguiente no irían a clases más que al trabajo y eso, solo YoonGi iría pues JiMin descansaba los fines de semana y YoonGi solo los domingos los cuales aprovechaban para pasar tiempo con el otro.

Quién diría que las estrellas, la Luna, un árbol, una llamada telefónica e incluso una donación de sangre los uniría. Y quién pensaría que en una simple fiesta para celebrar un logro de YoonGi haría que conocieran a la persona con la cual compartirían el resto de sus vidas.

Al terminar aquella fiesta todos se fueron dejando solos a JiMin y a YoonGi.
Subieron a su habitación y salieron al balcón.

-¿Sabes qué día es hoy?

-Mmm... cómo no saberlo ¡feliz aniversario Yoonnie! -Le besó.

-Y, las estrellas siguen siendo testigos de nuestro amor. Quiero decirles a todas las personas que aquella promesa que el sol le hizo a la luna no se ha roto. -Dijo cuando se separó de JiMin por falta de aire.

-Sí, aún recuerdo aquella promesa. Te dije que el sol jamás se separaría de la luna aunque pareciera que sí lo hace.

-Sabes que te amo mucho ¿cierto?

-Lo sé.

Los dos chicos sonrieron, entraron a la habitación mientras se besaban y deseaban el uno al otro. En el transcurso, tropezaron con una caja y ésta provocó que cayeran al suelo, realmente no les importó siguieron con lo que empezaron. Y una vez más, YoonGi hizo suyo a JiMin; ahí en medio de aquella habitación con la luna iluminando a aquellos dos cuerpos agitados.

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N/A:

¡Hola linda (o) lectora! ¿Cómo estás? ¿Te esperabas éste final? La verdad que yo no, osea tenía otro final completamente diferente a éste (aunque éste es un epílogo). Sin embargo, quedé satisfecha con el final.

Gracias por todo tu apoyo durante el transcurso de ésta historia. Espero que la hayas disfrutado tanto como yo disfrute crearla, escribirla, editarla, corregirla y mejorarla. Realmente me divertí mucho con ésta historia.

Espero que en un futuro nos volvamos a leer (probablemente suba otra historia pero será completamente diferente a ésta) pero mientras eso pasa ¡hasta luego!

Te quiero.
~Ars.