|Cap ₂|Roce de cuerpos.

46.9K 3.3K 1.4K
                                    


Hwasa tomó el control que habría la gran reja de acero, apretó un botón, abriéndonos paso a nuestra gigantesca y lujosa casa, donde nada más habitamos las tres hace algunos años, cuando comenzamos a ganar mucho más dinero a base de grandes robos.

Estacioné el Camaro en el garaje, en el cual no sólo yacía un auto, sino albergaban alrededor de seis autos y tres motocicletas, claro, si no queremos que nos encuentren tenemos que pasar desapercibidas y no ocupar el mismo auto siempre.

Salimos del auto y me dirigí al gran cajón dónde guardábamos patentes nuevas, sin ocupar.

Cada vez que volvemos de un robo cambiamos la patente, así sería aún más difícil encontrarnos. Cambio la patente y desecho la recién ocupada.

Luego de hacer eso, con las chicas subimos a la otra plataforma de la casa.

—Fue un día agotador, me ducharé y dormiré —anuncia la rubia—. Tal vez vea una serie que me haga olvidar que hoy casi matamos a una decena de personas —ladea la cabeza, tocándose el cuello,

—Buena opción, yo haré lo mismo —boto aire—. Por cierto, ¿el dinero? —miro a Hwasa y luego a Solar.

Las tres nos quedamos en silencio.

—Está aún en el maletero, mañana lo buscaremos —ríe la morena—. ¡Debiste ver tu cara!

—Casi me muero del susto —suspiré, dramática.

—Okey, yo me iré a la habitación. Duerman bien y sueñen húmedo —se va la rubia, divertida.

—Espera, ¿dijo que soñáramos húmedo? —enarqué una ceja, mirando a Hwasa, la cual estaba aguantando una risa.

—___, ¿hace cuánto no has tenido sexo? —me interroga con la mirada.

Silencio.

—¿Crees que tengo tiempo para sexo? —camino a la barra de la cocina, tomo el jarro de agua y me sirvo en un vaso—. Sé que has tenido alguna que otra relación con alguna mujer, pero lamento decirte que no estoy interesada en sexo lésbico, si es a lo que quieres llegar, querida amiga.

—Tranquila, no eres tan afortunada como para acostarte conmigo —ríe, sirviéndose agua también—. Bueno, pero a lo que iba, ¿no tienes tiempo o es porque no quieres? —se posiciona a mi lado, mirándome.

La verdad es que no he mantenido relaciones sexuales hace algunos años. La última vez fue con alguien que, sinceramente... ni si quiera recuerdo su rostro. Estaba borracha o algo así. Me había sentido tan mal que decidí nunca más dormir con un extraño de una sola noche. Tampoco juzgo a las persona que lo hacen, pero al menos para mí, se transformó en un tema que va totalmente contra mis principios.

Además, ningún chico me ha parecido realmente atractivo, ninguno me ha hecho llegar al punto de desearlo, como para conocerlo y entablar alguna conversación. Tampoco es que mi cuerpo sea del total gusto para los intocables, fresas y antipáticos hombres de Corea. Así que estamos a mano.

—Hwasa, sabes que prefiero pasar tiempo con ustedes, limpiando los autos, comprando nuevas armas o hasta comprar ropa, que... tener quince minutos de sexo, o por mucho veinte. —la observo de reojo y bebo de mi vaso con agua.

—Como usted diga —pone los ojos en blanco, y tuerce una sonrisa—. Cambiando de tema... —aclara la voz, un poco nerviosa—. Estábamos hablando con Solar y... tenemos pensado ir mañana por la noche a una fiesta en el centro. Será una gran fiesta en una discoteca. ¿Qué dices? ¿Te animas o quieres quedarte a limpiar los autos?

—Bueno —bebo de mi vaso.

—Vamos, ___, nunca quieres sal... —se interrumpe a ella misma—. ¡¿Qué?! ¿Dijiste que sí?

Poles Apart | JJK [+18][✔] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora