El sentido de ser humano.

7.

La mañana del día siguiente Inoue se adelanto a los planes de Ulquiorra y se levanto antes, preparó el desayuno, para cuando este bajo las escaleras listo para marcharse quien sabe donde a esa hora, ella se puso en su camino. 

Con una esplendida y cálida sonrisa. -Buenos días Ulquiorra ¿desayunas?- le indicó con la mano para que tomará asiento. 

-Tu amiga aún no se va- se quejo esté. -Ella no lo negó, no era como si estuviera preguntando también -está bien- termino aceptando, estaba hambriento, no había cenado como correspondía ayer.  

-No te agrada por que es ruidosa, Grim también lo es, te veo desenvolviendo muy bien con él, y con Nel, Rukia también es algo ruidosa- podía seguir tirando le nombres, pero la mueca que estaba haciendo el moreno hizo que se detuviera. Suspiro -ya es viernes, noche de películas, no te quedes haciendo nada extra en el instituto. 

-Eso debería decírtelo yo- se bebió todo su café, tomo su bolsa -nada de hacer los recados de alguien más- sacó un dinero y se lo dio en la mano -gracias por el uniforme. 

Ella sonrió -ve con cuidado- dijo, este pareció un poco extrañado, ya había tomado por costumbre irse con Inoue. 

-No te atrases-  dijo antes de salir de casa. 

Al cabo de unos minutos salio Riruka, y lo empezó a buscar al otro habitante de la casa -¿ya se fue? - concluyo al no sentir su riatsu en casa.

-Se acaba de ir. Es muy madrugador.

-Ya veo- dijo pensativa -también guapo, exceptuando eso ¿en qué otras áreas es bueno?

La pregunta hizo enrojecer a Inoue, agito sus cabeza y golpeo la mesa para tranquilizarse, ante la mirada de suspicacia que le lanzaba Riruka -tengo algo que comentarte, ya que necesito tu opinión al respecto. 

-Bien, te escucho- dijo esta poniéndose seria, tomo asiento y comenzó a surtirse el desayuno. 

-Ayer acepte hacer un favor, aunque me sentí terrible al hacerlo, la chica quería que le entregará un obsequio en su lugar a Ulquiorra, lo hice, al principio parecía feliz, pero en cuanto le dije que no era mio sino que se lo enviaba otra persona, se molesto conmigo y lo arrojó a la basura. Ha estado extraño desde entonces, entre molesto y...

-Mujer, es que le gustas, lo acepto bien al principio ¿no? por que creyó que era tuyo, es muy obvio ¿por qué necesitas mi opinión? esta más que claro.

-Si se tratará de cualquier otra persona, si, pero él... -se golpeo la frente con la palma de la mano- haré una prueba hoy, me aseguraré primero antes de sacar conclusiones. 

La adinerada chica llamo a su chófer y llevo a Inoue a la pastelería para que comprará los chocolates, los fue envolviendo en el camino, ya que también la fue a dejar al instituto. -Suerte Orihime. Voy a estar más al pendiente de ti. 

-Gracias Riruka-chan -se despidió de su amiga, y no entro hasta que dejo de ver el vehículo. 

Entro con tranquilidad y busco su salón, saco su libreta y comenzó a garabatear algunas frases, para dedicarle algún mensaje a los chocolates, había comprado semi amargos, para que no le saliera con algún, "no me gustaron" o "detesto los chocolates", aprovechando que aún no llegaba el profesor, Tatsuki estaba escuchando música a su lado, cuando Keigo le quito su cuaderno para leer lo que tenia escrito, Inoue abrió los ojos, pero la primera en reaccionar fue la morena quien salio persiguiéndolo por el salón, el chico comenzó a burlarse de los intentos de ambas chicas por arrebatar les la libreta, Inoue lo acorralo y este abrió la puerta del salón saliendo al pasillo, la de ojos grises alcanzo a cogerle de la camisa para obligarlo a devolverle su libreta, pero él estiro su mano y al ser más alto que las dos chicas seguían sin quitarle la dichosa libreta.