28

164 19 3
                                    

Con la cara larga más que ceñuda el colorín salió de la casa de su amiga después de cuatro horas después de haber llegado, casi sin vida, sin aliento. 

—¿Eh? ¡Que haces en la casa de Inoue!— Grimmjow le grito a Ichigo ya que los dos estaban parados en el pórtico. 

El sexto arrancar venia descalzo y con su pijama que era una pantalón suelto de cordón con una camisa abierta. Ichigo se volteo y vio a Ulquiorra. 

—La desnudes en ustedes es algo racial. 

Ulquiorra entorno los ojos —estoy en mi casa. No me hago responsable por este. 

—Si... 

Grimmjow se abrió paso, quería entrar. —Déjame entrar maldito, siempre te pones como un muro imbécil mezquino, le mostraré algo a mi hermana y luego me iré. 

Ulquiorra no se movió e Ichigo se dio cuenta que no es que fuese así con él, era así con todos los que visitaban la casa —vete a casa, aprovecha la benevolencia de Nel. 

Ichigo recordó que Nel estaba embarazada y estado con la pareja hace unos meses, los libros tenían algo de sentido ahora y más cuando Grimmjow se había dado a la fuga los primeros meses. 

—Le voy a mostrar unas cosas para mi sobrina y me iré a dormir. 

—¿Sobrina?

—Si ¿Qué haces tan tarde en la casa de mi hermana?— A Ichigo esto también le parecía increíble que el maldito Grimmjow, el detestable animal salvaje se comportará dócilmente con Inoue y la llamará hermana. Claramente él no podía ser el reemplazo de su hermano Sora, pero Ichigo no conocía el carácter de Sora ni como fue realmente, fue alguien parecido a Grimmjow, solo Inoue lo sabía. No importaba cuantos años pasaran seguía chocándole.

El shinigami que seguía sorprendido a la falta de respuesta. —¿Qué haces tú en la casa de Inoue a esta hora?

Ulquiorra cerró la puerta cuando los irascibles comenzaron a discutir entre ellos.

Ichigo miro el frontis de la casa, cuando apareció Noitora no reconoció la casa, fue un hecho revelado por Rukia. Llego a pensar hasta que Inoue se había mudado sin que él lo supiera, la casa de su amiga siempre lucio pequeña y algo opaca, poco llamativa y humilde. En cambio ahora era sin duda la casa más bonita y bella del barrio, en toda la cuadra no había mejor casa. Grimmjow lo vio admirar la casa. 

Al arrancar le pareció curioso —¿hace un tiempo que no vienes por acá?

—Desde que inicie la universidad. 

El sexto miro la imagen de su teléfono, era una carriola, le gusto bastante y quería devolverles el favor a la pareja por cuidar de Nel. No era muy afecto a decir "gracias" pero si podía devolverles el agradecimiento de esta forma. 

—¿Cómo esta Nel?— sabía de la condición de la arrancar pero no se había acercado, ya tenía lo suyo en camino. 

—Eh... — Nel se asomo por la ventana para ver donde estaba Grimmjow. Este levanto la mano para indicarle donde estaba como si fuera necesario.

—¡Hola Ichigo!—sacudió su mano con bastante energía. 

—¿El pálido te ofreció algo?— esta era su invitación a la casa de Nel. 

—¿Están arrendando justo la casa del lado?

—No. No se muy bien como lo hizo, yo no entiendo de estas cosas, donde trabajo me dan donde quedarme. Ulquiorra hizo un trato con los propietarios anteriores y Nel esta pagándole las cuotas. 

El sentido de ser humano.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora