El sonido del despertador perforaba mis oídos, estire la mano y lo apagué rápidamente. Le di un abrazo a la almohada y después de 5 minutos decidí levantarme. Cogí un sudadera y leggings, ya que hoy me tocaba gimnasia, cosa que odiaba, y unas zapatillas Nike blancas.
Iba yendo hacia el instituto, sola, como era de costumbre, con la música en mis auriculares al máximo, Team de Lorde sonaba.
Mi vida era una jodida mierda, tenia malos hábitos, mis padres me odiaban, sacaba malas notas y mi rutina era estar desde las 3 que salía del instituto hasta la noche, que volvía a casa, solo iba a dormir, mis padres no querían saber nada de mi, según ellos, viviré sola cuando acabe los estudios y ellos no van a dejar que viva del morro.
Llegué al instituto y me senté sola en un banco que había por fuera, aun quedaban 10 minutos para que sonara la campana. Alguien golpeó mis hombros y me giré viendo a Elena, mi única y mejor amiga. Me quite el auricular y le sonreí
-que tal? Se sentó lentamente al lado mio
-como siempre. Dije soltando todo el aire que tenia
-has hecho los deberes? Dirigió la mirada a mi boca, como si deseara que dijera que si, ella siempre me ayudaba a que fuera mejor persona y aprobara. Yo le hacía caso solo por verla feliz, veía que se sentía orgullosa, aun sigo sin saber porque se fijo en mi y quiso ser mi amiga, antes yo estaba sola siempre hasta que se empezó a acercar a mi.
-si...
-perfecto. Me abrazó- te voy a presentar a unas amigas que he hecho, son buena gente. Me cogió del brazo y me arrastró hacia donde habían un grupo de chicas estúpidas. Elena les saludo amistosa. Después de saludar a las chicas, una que iba con una falda y un crop top blanco me miró de arriba a bajo. Mi mente se llenaba de miles de insultos para esa chica que me miraba asqueada, esa chica se llamana Alejandra, iba a mi clase, las demás chicas las conocía de vista.
-porque vas así? Dijo Alejandra señalando mi ropa
-hoy toca gimnasia. Dije levantando mis brazos
-con las malas notas que tienes y como eres de solitaria, que raro que no hagas pellas y te vallas a escapar por ahí. Dijo riendo de una forma que casi me dan náuseas.
-Elena me voy al banco. Di media vuelta y me alejé.
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Acabó el instituto y me dirigí hacia casa, no solía volver a casa, pero como Elena se había ido con las demás de compras no tuve otra elección
-mamá, hoy vengo a comer. Grite dejando la mochila en el suelo- papa? Fui por toda la casa y no había nadie, ni se habían molestado en dejar una nota.
Fui a la nevera y saque dos trozos de carne y comí.
Salí fuera al jardín y metí los pies en la piscina. Cuando hacia eso me relajaba. Saqué un paquete de cigarrillos del bolsillo de la sudadera y lo encendí. Hice una calada y solté todo el humo mientras cerraba los ojos y me tumbaba.
Que porque fumo? Bueno, mi vida no es perfecta, y cada vez que me tomo un cigarrillo me relajo, todo desaparece, todo se olvida. La vida, desaparece
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-LEER IMPORTANTE-
Hola, esto ha sido como una entradilla (?) para que sepáis más o menos sobre la vida de Noelia, que así se llama la protagonista, ella tiene 17 años, es de Australia, de un pueblo pequeño.
Descripción de Noelia:
Rubia, ojos verdes, estatura normal, es muy tímida, pero hace lo que sea por sus seres queridos (Elena) sus padres no la aceptan desde que tenia 15 que empezó su afición por fumar, por culpa de un antiguo amigo de ella con el que no mantiene contacto porque se fue a Chicago a vivir, desde entonces, no cree en la amistad para siempre. Le gusta estar sola y alejarse de los problemas.
Espero que os guste la novela.
