Insoportablemente Bello [TAETEN] ©

Cap. 01 🌼

TaeYong gustaba de Ten.

Lee TaeYong era consciente de su enamoramiento hacia el menor de su círculo de amigos, lo supo rápidamente luego de conocerlo. Ten poseía una linda sonrisa y una tierna mirada, que hizo que el mayor se pusiera a sus pies desde el primer día, figurativamente hablando.

El pelirrubio sabía que era un enamoramiento, lo supo la primera vez que presenció su emotiva sonrisa en una merienda al aire libre con sus demás amigos, sentados en el patio de la escuela. Ese día aprendió que a Ten le gustaban los sándwiches de mantequilla de maní con mermelada, y guardó aquella información que parecía irrelevante en su mente para luego. Ese día comenzó a verlo por lo que era, un muchacho tierno, dulce, con muchas ganas por vivir y una gran vida por delante.

No es su intención observarlo tanto al punto de incomodarlo algunas veces, pero TaeYong cree no poder abstenerse de hacerlo. Cada vez que están cerca lo único que desea es mirarle por largo rato, velar sus pequeños hábitos y que el tiempo fuese tan amable de detenerse un instante para seguir viéndolo sin preocuparse del resto, un momento en el cual pudiese observarle sin necesidad de una excusa del porqué lo hacía.

En ese cerca, eso era lo más cerca que podía tenerle.

Ten surtía ese efecto en él, un sentimiento agradable en estado depresivo. Cuando sus ojos se encontraban por casualidad en medio del grupo sentía los músculos del cuerpo tensionarsele, su pulso aceleraba y en más de una ocasión estuvo por escupir un abrupto "Me gustas" sin mucha planificación de antemano.

TaeYong era torpe para éste tipo de cosas. Jamás tuvo pareja, jamás salió en citas, no sabe cómo regalar un cumplido amable sin dar la impresión de ser grosero. Y lo más importante, jamás creyó que le pudieran atraer sentimentalmente los chicos. O tal vez nunca se hubo percatado de ello, no hasta que llegó Ten.

He tenido ésta historia sentada en mis drafts desde hace años. Ya era hora de quitarle el polvo y dejarla salir al mundo. Jeje.

Gracias por leer, Mochi.