CAPITULO 4

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Capitulo 4

Llegué a casa, y me metí en el garaje, para dejar dentro los patines. Los dejé y fuí descalza hasta el porche. Me disponía a abrir la puerta, cuando sentí que ésta se abría por dentro. Estaba esperando a ver a Zayn, pero en lugar de eso, me encontré con un hermoso muchacho rubio, con unos ojos de un precioso color ambarino.

Había poca luz, pero fue lo suficiente para que me quedara hipnotizada ante su profunda mirada. Pero reaccioné de golpe cuando mi hermano entró en escena:

-Hola (Tu), pasa, quiero presentarte a mi amigo –dijo Zayn, mientras me agarraba del brazo y me metía en la sala de estar- (Tu) éste es Liam, Liam, ésta es mi hermana (Tu)

-Encantado de conocerte (Tu) –dijo mientras extendía su mano

-Encantada igualmente –dije aceptando su mano, y sin poder evitar esbozar una pequeña sonrisa.

Ahora que estaba dentro, pude ver a Liam mejor gracias a la luz del interior de la casa. Pude observar, que no era rubio, era más bien de un castaño claro precioso. De pronto, sentí como la puerta de la cocina se abría, y una chica entraba por ella.

-Raquel? Qué haces aquí? –dije sorprendida

-Es cierto! Ustedes se conocieron esta mañana verdad? –dijo Zayn, alzando un poco la voz

-Si, es cierto –dijo Raquel. Se volteó y cambió su expresión de cara al ver mi cara llena de curiosidad- verás (Tu), Liam me dijo que quería presentarme a un amigo suyo, y cuando llegamos, me enteré de que se trataba de tu hermano.

-Entiendo –dije cambiando mi expresión de cara, había otra cosa que me interesaba mucho más en aquel momento- No es por ser cotilla, pero hay algo entre vosotros? Quiero decir, son pareja?

-QUÉ?! –dijeron Raquel y Liam al unísono, y Raquel continuó hablando- No, Liam y yo solo somos amigos, no hay nada más entre nosotros.

Liam y Raquel no se dieron cuenta, pero yo pude ver como Zayn daba un suspiro al escuchar esto último, y al instante comprendí lo que esto significaba. Estuvimos un rato hablando, cuando dieron las once, Liam y Raquel tuvieron que irse. Esperé a que Liam arrancara su coche, y en ese momento me lancé encima de Zayn dejándolo tumbado en el suelo y yo encima de él. Y en ese instante empecé a zarandearlo como loco.

-¡Oye, para! Qué haces? –dijo Zayn agarrándome de los brazos e inmovilizándome

-¡No puedo creerlo! –dije sobresaltada

-El que? –dijo él mientras intentaba quitarme de encima pero yo me resistí

-No puedo creerlo, te gusta Raquel!

-¡¿Qué?! Por favor no digas tonterías –dijo él un poco alterado

-Vamos, no me mientas te conozco demasiado bien, he visto como la miras, admítelo, o no me quitaré de encima de ti

-Ok, lo admito, Raquel me gusta –admitió Zayn, yo me limité a alzar los brazos en gesto de victoria, y después, este continuó- y ahora por favor, podrías quitarte de encima de mí? Me encanta tener a chicas en ésta misma postura, pero preferiría que se tratase de alguna que no resultase ser mi hermana– y sin previo aviso, volvió el pícaro y pervertido Zayn de siempre, y éste continuó- además no soy el único que se ha fijado en alguien…

-A qué te refieres –pregunté sorprendida

-Vamos, parecía que estabas desnudando a Liam con la mirada –dijo con su pícara mirada

-Por favor no digas tonterías –me aparté bruscamente de él y salí de la sala de estar. Estaba enfadado con lo que Zayn insinuaba, aunque la verdad es que Liam me parecía muy guapo, pero no sé por qué, en aquel instante volvió a mi cabeza la imagen de Louis.

Aquel, fue un día muy agotador, así que subí a mi habitación y me puse mi pijama favorito. 

Después me metí en la cama. Pero de pronto, mi móvil empezó a sonar.

Un choque afortunado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora